LABYRINTH | Pietro Maximoff

chapter 5

Winifred estaba en su posición. Mientras Natasha y Clint luchaban con androides a su alrededor, ella se encontraba escondida en una cima. Era el elemento sorpresa.

Su arco apuntaba a Wanda Maximoff. No sería capaz de matarla. Por lo que la flecha estaba diseñada para paralizar. Winifred y Steve coincidieron en que su peor amenaza era la chica Maximoff, por lo que esa era su misión, vencerla.

Ella estaba lista para disparar cuando un rayo de luz azul le quitó su flecha. Estaba tan concentrada en su plan que olvido completamente al chico que había molestado sus pensamientos.

-Mierda- maldijo al notar que Wanda había desaparecido

-¿Pensabas dispararle a mi hermana? No creo que despues de eso te acepte como cuñada- canturreo Pietro sosteniendo la flecha de Winifred en su mano mientras se acercaba

-Primero; ella jamás será mi cuñada. Y segundo, debes prestar más atención sokoviano insoportable- respondió ella antes de que Natasha lo barriera y lo dejara en el piso

-¿Cuñada?- preguntó ella con una sonrisa pícara alzando las cejas

-Callate. Solo ve a buscar a Clint o algo- contesto Winifred mientras escuchaba los quejidos de Pietro

En cuanto Natasha se fue, Winifred extendió su mano para ayudar a Pietro mientras que con la otra agarraba nuevamente su flecha. Al sentir el contacto de sus manos Winifred sinro como sus mejillas tomaban color.

-No quiero hacerte daño. Ni a vos ni a tu hermana. Solo dejenos matar a Ultron- hablo ella mirando sus manos aun unidas

-La idea de que mi hermana sea tu cuñada suena cada vez más posible- contestó Pietro acercándose a ella mirando fijamente sus ojos

La mirada de Winifred dejó sus ojos y bajó a los labios de Pietro. Jamas habia besado a nadie, y aun no quería hacerlo. Los ojos de Pietro también observaron los labios de Winifred, tan delicados y rosados, lucían perfectos.

-Lo siento- dijo Pietro antes de alejarse de ella

-¿Por qué?- pregunto pero ya estaba muy lejos

Winifred frunció el ceño sin entender que había pasado cuando sintió a Wanda Maximoff detrás de ella. Winifred se agacho impidiendo que use su poder en ella y clavó la flecha en su cuello. Antes de que el líquido haga efecto, la gemela movió su mano y de sus dedos salió una luz roja.

Clint llegó a tiempo para sostener a Winifred, quien casi se cae. Al mismo tiempo que Pietro llegaba para sostener a Wanda.

Todo lo que había a su alrededor cambió, se encontraba en un ala médica. Se oía el llanto de varios bebés en las diferentes salas.

-¿Que mierda esta pasando?- se preguntó a sí misma mientras caminaba por los pasillos del hospital

Se detuvo frente a la sala 85. De esta no se escuchaba ningún llanto solo había una luz demasiado brillante que penetraba el lugar.

Empujó las puertas para poder entrar. Se encontró con una bebé brillante, que tenía una runa de protección en su pecho, y a su lado, una mujer que acababa de parir. De un segundo a otro el brillo se intensificó y los ojos de la mujer explotaron.

Esa era su madre. Esa era ella. Un grito de dolor se escapó de su boca, pero nadie pareció oírla.

-No puede ser- susurro Winifred mientras veía como la sangre caía de los ojos de su madre

Salió corriendo de ese lugar. Sus piernas temblaban, al igual que sus brazos. Al llegar a la sala principal, dos ancianos abrazados y emocionados tuvieron el mismo destino que su madre. Primero los ojos de su abuela estallaron dejando que la sangre se esparsa a su alrededor. Luego sucedió- lo mismo con su abuelo.

La gente a su alrededor empezó a gritar y correr, mientras la enfermera de la sala 85 salía con la bebé brillante en brazos y la tiraba en medio del pasillo antes de correr hacia la salida. 

En la cabeza de Winifred no paraba de sonar el ruido de la explosión cada vez que cerraba los ojos. La sangre de su madre y abuelos comenzó a aparecer en sus manos a la vez que su pecho dolía.

La runa de protección en su pecho había desaparecido cuando era una niña, pero de alguna manera esta volvió a aparecer y empezó a arder. Winifred miraba sus manos temblando cuando comenzó a faltarle el aire. 

La runa en su pecho se sentía como fuego, la estaba quemando. Las voces de espíritus muertos volvieron a aparecer causando que caiga al suelo cansada. Sentía que iba a morir. 

Su cuerpo temblaba.

¡PUM!

Sus manos estaban llenas de sangre.

¡PUM! 

Su pecho ardía.

¡PUM!

Su respiración perdía fuerza.

-Winifred, estoy aquí- dijo una voz cálida y familiar

Los ojos de Winifred se abrieron con fuerza y se alejó completamente del hombre arrodillado junto a ella. Su respiración era acelerada, su vista estaba nublada y no paraba de temblar.

-Tranquila, estas bien- volvió a hablar la voz

En cuanto la vista de Winifred se aclaró vio a Clint dándole una sonrisa tranquilizadora. Se encontraba en el jet rodeada de los Avengers todos lucían derrotados y cansados (excepto Barton).

Winifred junto sus rodillas y las acercó a su cara. Comenzó a llorar silenciosamente sin dejar de escuchar como los ojos de sus familiares explotaban. Parecía una niña pequeña, pero eso no le importaba en este momento.

-¿Estas bien?- preguntó Clint una vez que Winifred se hubiese calmado

-Voy a matar a Wanda Maximoff- dijo con determinación mientras lagrimas caían por sus mejillas