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Seungmin tuvo que despertar muy temprano puesto que tenía que ir a una cita con su futuro jefe, aun así debía preparar algunas cosas para su bebé

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Seungmin tuvo que despertar muy temprano puesto que tenía que ir a una cita con su futuro jefe, aun así debía preparar algunas cosas para su bebé.

Se dirigió a la ducha durante unos veinte minutos, se colocó su ropa interior y la bata de baño. Se dirigió a la habitación de su bebé, todavía se encontraba durmiendo plácidamente, dejó un beso en su frente y salió de su habitación hacia la cocina para preparar el desayuno. Cuando se vistió, termino escogiendo una camisa de vestir blanca, unos pantalones negros igual de vestir y sus zapatos negros. Arregló su cabello y peinó de la manera más decente que pudo y se fue a la sala a esperar a su hermano y cuñado, los cuales después de algunos minutos llegaron.

— ¿Jisung sigue dormido? — preguntó Bangchan.

— Sí, sigue dormido. Les preparé el desayuno.

— Oh, Seungmin, no te hubieras molestado —dijo Jeongin.

— No es ninguna molestia, además, cuidarás a mi bebé y te despertaste temprano solo para ello, no saben lo mucho que les agradezco su ayuda.

— Sabes que adoro a Jisunguie, para mí es todo un placer cuidarlo.

Sin más los adultos procedieron a desayunar, eran las 7:35 y Seungmin tenía que estar a las 8:00am en su trabajo así que se apresuró. Lavó sus dientes y se dirigió a la habitación de su bebé el cual aún dormida como un angelito. Lo arropó bien y dejó un último besito en su frente para salir ahí.

— Minnie— le habló Chan — La editorial no queda lejos de mi trabajo, vamos, te llevo.

— ¿Seguro?

— Sí, anda, tengo tiempo.

— Está bien, muchas gracias.

Se despidió de su cuñado para subirse al auto de su hermano, luego de unos veinte minutos aproximadamente llegaron.

— ¡Te deseo mucha suerte, Seungminnie! — deseó Chan con una linda sonrisa.

— Gracias, te quiero, ve con cuidado al trabajo.

Observó cómo el carro de su hermano se alejaba, dio un respiro y decidió entrar al enorme edificio. Una vez dentro observo lo lindo y elegante que era el interior. Se iba a dirigir a la recepcionista, pero escucho que le llamaban.

— ¡Seungmin!

— Yeonjun, hola — saludó amablemente.

— Te estaba esperando.

— ¿A mí?

— Si, bueno el dueño de esta editorial es mi mejor amigo y verás, yo sabía que necesitabas un trabajo y te recomendé.

— Soobin me contó sobre ello, de verdad muchas gracias. — agradeció

— No es nada, ¿Cómo está Jisung?

— Mi pequeño está muy bien, gracias por preguntar.

— Me alegro. Bien, vamos.

— Vamos...

Solo esperaba ser contratado.

Claro que Hyunjin necesitaba un asistente

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Claro que Hyunjin necesitaba un asistente. Necesitaba organizarse y a penas le daba tiempo de informarse sobre sus juntas con otras editoriales.

— Hyunjini — era Yeonjun.

— Dime — respondió sin mirarlo, se encontraba leyendo currículums de escritores y editores para contratar.

— El chico del cual te hablé está aquí.

— Dile que pase — escucho salir a su amigo para escuchar pasos de nuevo en su oficina y la puerta cerrarse, aún sin mirar le preguntó su nombre.

— ¿Cómo te llamas?

— Kim Seungmin, señor— Hyunjin podía notar un ligero temblor en la voz del chico.

Pero debía admitir que la voz del chico era muy hipnotizante... Dulce... Así que con curiosidad alzó su mirada y se sorprendio de lo jodidamente tentador y lindo que era el portador de la dulce voz. Portaba una linda y castaña cabellera. Su piel era tan acaramelada, tersa y aparentemente suave. Rasgos suaves, facciones delicadas y una mandíbula perfectamente marcada.

Si, definitivamente no debió subestimar a su mejor amigo.

— Toma asiento — le indico aún embobado — Bien Seungmin ¿Entiendes de qué trata este trabajo?

— S-Sí, asistente... — le respondió algo intimidado por la intensa mirada del hombre frente a él.

— Exacto. Por lo que Yeonjun me contó te graduaste como escritor ¿No es así?

— Sí...

— ¿Estás de acuerdo trabajar como mi asistente? Estudiaste por algo y como mi asistente no podrás llevar a cabo tu carrera de escritor.

— Lo sé... Pero en verdad necesito este empleo, señor Hwang— Hyunjin sonrió de lado y se levantó de su asiento.

Se acercó peligrosamente a la cara del chico y este solo frunció el ceño, pero no dijo nada.

— Lindo...— le susurro al oído y después se alejó de él — Bien. Tiene el empleo.

— ¿De verdad? ¡Muchas gracias, señor Hwang! ¡Juro que no se arrepentirá!

Oh... Por supuesto que no.

Hyunjin definitivamente se comerá a su lindo asistente.

Aun así, teniendo que romper su regla de no meterse con sus empleados.

Por qué Kim Seungmin sería su única excepción.

Por qué Kim Seungmin sería su única excepción

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Los preciosos gráficos de esta adaptación fueron realizados por ttekoolv


★̸̲ Boss ⨳ HyunMin 𖥔࣪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora