Hwang Hyunjin, un apuesto hombre de veintiséis años dueño de una editorial de libros, mujeriego y para nada creyente en el amor.
Kim Seungmin, un precioso chico, escritor recién graduado y con un hermoso hijo de cinco años, quien es su mayor motivac...
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― Chiquitín, tienes que terminar toda tu cena, incluso las verduras ― le dijo a su sobrino.
― Está bien, tío Channie.
El mayor sonrió satisfecho.
―¿Cómo te fue hoy, Seungmin? ―preguntó.
Los cuatro se encontraban en el comedor consumiendo la deliciosa comida que Jeongin había preparado.
― Bueno... digamos que bien —rodó los ojos recordando lo sucedido— El Señor Hwang… siempre me da montañas de currículums y al final no acepta a ningún escritor y, también, me invitó a comer…
― ¿Tú jefe? ―cuestionó Chan, antes que el contrario respondiera siguió hablando― Hablé con Yeonjun, me dijo que tú jefe podrá ser su mejor amigo, pero no niega que aparte de imbécil es un mujeriego.
― Si es mujeriego o no, me da igual— bufó —Además no acepté.
― Ya te está echando el ojo ―dijo Jeongin― por lo que me has contado le interesas a ese tipo... Te diría que te alejaras, pero Minnie, desde hace mucho no sales con ningún chico... Yo opino que deberías pasar solo un buen rato con tu jefe.
Cuando terminó de hablar chilló al sentir un pellizco, era Chan, había olvidado por un momento que el pequeño Jisunggie también se encontraba con ellos.
―Eso dolió— susurró.
―Ya lo sé, pero yo no le eché el ojo a él... Además, es mi jefe, no quiero problemas. La otra vez una de sus conquistas me llamó su puta ¡Y solo llevaba un día ahí!
― Vamos Seungmin, eres muy lindo, estás soltero y joven, debes disfrutar un poco. Aunque duela decirlo... Jisung ya no es un bebé y sabes que yo con gusto puedo cuidarlo, así puedes dedicar un poco de tiempo para ti mismo.
Seungmin quedó pensativo unos segundos en las palabras de Jeongin y sí, tal vez tenía un poco de razón. Desde que nació su pequeño no había salido con ndie más, ese tiempo lo dedicó a sus estudios y a lo más importante, su hijo. Hizo de todo para sacar adelante a su pequeño, con la ayuda de su hermano y sus padres, que aunque viven en otra ciudad y casi no se ven ahora, siempre fueron un apoyo para él.
Pero ¿encontraría a alguien que lo acepte a él y a su hijo? podrá estar soltero, pero eso no significa que iría a acostarse con su jefe.
Hyunjin no era una opción.
Apartó un poco sus pensamientos y volvió a la charla, mientras comían.
― Bien... me daré algo de tiempo.
― ¡Me parece genial! ¿Sabes también quién es genial en esto? ―dijo Jeongin― ¡Félix! tú y él están solteros, con él podrás salir a dónde sea ya sabes que conoce buenos lugares, por este pequeñín no te preocupes tu hermano y yo lo cuidaremos.
Los tres se habían conocido en la universidad, Jeongin estudiaba gastronomía, mientras Félix y él estudiaban Lengua y Literatura. En un principio le asustó la idea de contarles sobre su hijo, pero en cuanto lo supieron le dieron palabras cálidas y no lo juzgaron, eso lo alivió mucho.
Mientras vivía con Chan, este era quien cuidaba al pequeño Jisung, cuando tenía solo un año, Jeongin y Félix amaron al bebé, además, Seungmin se dio cuenta rápidamente de que entre Chan y Jeongin había una gran atracción, desde que su amigo pisó la casa su hermano le miró embobado.
Luego empezaron a salir y cuando cumplieron tres años de relación Chan decidió dar un gran paso, le pidió matrimonio a Jeongin.
Seungmin fue un testigo del inmenso amor que hay entre su cuñado y Chan. solo basta con ver sus miradas para saberlo. Le tenía un poco envidia a su hermano, él también quería algo así de hermoso como lo que tenían ellos.
Su hermano lo tranquilizaba diciéndole que llegaría la persona indicada, aún así con el amor que le da su pequeño bebé le basta y no miente del todo. Mientras tenga a su hijo y su amor, con eso vive feliz.
― ¿Tío Felixie será el novio de papi?― preguntó Jisung.
Él aprendió lo que significaba el amor en las personas y también sabía que no importaba el género. Amor es amor. Así se lo enseñó su papi.
― No pequeñín, tío Félix y tú papi solo son amigos ―explicó Chan ―papi saldrá a pasear con él.
― Y tal vez papi consiga un novio... ― dijo Jeongin, tratando de ignorar la mirada hostil que su esposo le dirigía.― ¿Qué?
― No quiero que papi tenga novio... Papi ya no me amara más.
― Eso jamás sucederá Sunggie. Siempre serás mi más grande amor, mi más grande prioridad. Te amo y no lo dudes bebé. ― besó las lindas y regordetas mejillas de su hijo.
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Capítulo cortito y en el próximo "Félix en acción" jakjajja
