Capitulo 9

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Dylan se recostó encima de su cama. Estiró el brazo y cogió el retrato de Nicolle que el había mandado a enmarcar, que yacia sobre su mesita de noche. Sintió cierta ternura al verla a ella, con sus tiernos 15 años, sonriente como siempre. Acaricio con las yemas de sus dedos la textura de la fotografía, deteniéndose en los labios de Nicolle. Anhelaba besarla una vez más, y poder conservar el exquisito sabor de sus labios en su boca para siempre.
Recorrió con la mirada la fotografía de Nicolle una vez más. Aún recordando el día en que tomo esa foto. El siempre la fotografiaba, todos los días, sin excepción. Le gustaba la idea de poder conservar la belleza de Nicolle mediante una foto. Tenía fotos de ella desde que la conoció... Hasta hoy. Y joder, aunque ya no fuera nada de ella se le hacía irresistible no seguir observandola a escondidas.
Era imposible alejarse de Nicolle aún así cuando ella ya no quería verlo nunca más.
Nicolle camino y se sentó bajo la sombra de un árbol. Nico corrio hacia ella y se recostó a su lado boca arriba, Nicolle empezó a acariciarle la pansita mientras el se retorcía en el césped, juguetón. El perrito se incorporó mejor y se acurrucó a su lado, mientras ella lo envolvía en sus brazos y lo empezaba a acariciar.
–ey... No hagas eso... Da cosquillas– rio ella cuando Nico empezó a lamerle la mano.
Ella cerró los ojos disfrutando de la brisa del viento soplando detrás de su espalda, haciendo que las hojas de los árboles sonarán y que unos cuantos mechones de cabello cubrieran su rostro. Respiro profundamente, sintiéndose tranquila, en paz. De repente, escucho a Nico gruñir y abrió los ojos, encontrandose a Dylan al frente de ella. Levanto la mirada para verlo a los ojos.
–¿Ocurre algo?–dijo ella
Dylan no dijo nada. Se colocó en cuclillas, quedando de frente a ella y la beso. Nicolle no hizo nada. No sé aparto, pero tampoco le siguió el beso. Dylan movió sus labios, moviendo los de ella también. El la beso de una manera tierna, cariñosa. Nada exigente, que hizo a Nicolle recordar el tiempo de su adolescencia. Aquellos días que los solía comprartir con el.
Pero su orgullo, la detuvo
–te dije que no volvieras a tocarme.– dijo ella. En su rostro se mostraba una expresión de dolor.
–y yo te dije que no me importaba.– Dylan acaricio su mejilla, en un vaiven cariñoso que solia hacerle el, cuando eran mejores amigos.–¿Te he dicho que la nueva ropa te queda de lujo?–
–no, y no me interesa por parte de ti.– mintió. Claro que le importaba, ¿Pero porque? Ni ella lo sabía
Dylan se rió
–pero que mentirosa me has salido, Nicolle... No has cambiado nada.–
–eso es lo que tú crees, si he cambiado y muchísimo...–
–mmh... Bueno, en eso estoy de acuerdo.– dijo comiendosela con los ojos. Bajo la mirada hasta su escote.– oh nena...–gimio–¿Acaso quieres matarme de una erección?–
Nicolle no entendió. Hasta que se dió cuenta que el cuello de su camiseta se había bajado un poco, lo suficiente como para dejar a la vista una parte de su sostén, y algo más a la imaginación. Nicolle solo se sonrojo, sin saber que decir y se cubrió rápidamente, colocando todo en su lugar.
–te has puesto el conjunto.– dijo Dylan , y cerró los ojos por un momento, imaginándola a ella, con el conjunto puesto, el cabello alborotado, cayendo sobre sus hombros, y con unos zapatos de aguja. Perfecta.–si... ya quiero enterrar mi nariz en tu cabello para cuando te folle...–
–¡Joder, cállate!– exclamó sonrojadisima hasta no poder más con la vergüenza.–no conocía ese lado tuyo, Dylan. ¿Que te ha pasado?.–
–Creci, madure... Supongo.–
–A propósito, no me has dicho nada sobre ti, y me gustaría saber que has echo en todos estos años.– dijo, interesada en saber más de el.–¿Que hiciste después de salir de la escuela?–
–¿Que te puedo decir? Mi vida no ha Sido muy interesante después que te fuiste.– admitió, y Nicolle se sorprendió con la facilidad que usaba para hablar... Sobre ese tema.– He tenido una que otra aventura, pero nada fuera de lo normal.–
Dylan recordó los días en que después de espiar a Nicolle, salía de fiesta con sus amigos a beber para luego conseguirse a alguien para follar hasta más no poder. Era su manera de desquitarse después de ver a Nicolle con sus novios, que el mismo se había encargado de eliminar. Los espantaba, amenazándolos mediante cartas y llamadas. En resúmen, Nicolle había tenido unos cuantos novios, en cuántos la relación que más duro fue de cuatro meses, ya que los demás abandonaban a la semana siguiente, al enterarse que un psicópata estaba detrás de ella. Dylan siempre conseguía lo que quería: mantenerla alejada de los hombres, mientras que Nicolle seguía con el corazón roto.
–hay algo que no entiendo.– dijo ella frunciendo el ceño.–¿Jamás estuviste en la universidad?.–
Dylan se encogió de hombros, desinteresado.
–No, jamás me ha llamado la atención.–
–¿Porque? En la escuela siempre tuviste buenas notas, incluso tuviste mejor promedio que yo.–dijo un poco cabreada por que a Dylan no le importara demasiado.– pudiste haber tenido un buen futuro, dylan.–
–¿De que me sirve pensar en el futuro, si no te tengo a ti?–

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⏰ Última actualización: Jan 15, 2023 ⏰

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Acosada por un mafiosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora