𝐄𝐥 𝐑𝐨𝐛𝐨

22

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El ambiente estaba bastante tenso, más cuando tenías la mirada de un oso encima de ti, una mirada que no era para nada amigable.

Y es que, Juan acaba de golpear lo que le pertenece, lastimo a betra ... Su novio.

Juan estaba algo asustado y digo algo para no decir que estaba estaba aterrado, él sabía que ya la había cagado.

Spreen se separó de betra y camino a paso lento hacia el hechicero, cuando quedó frente a frente con él, si las miradas matarán Juan estaría ahora mismo 10 metros bajo tierra.

- spreen ... Yo ... Puedo explicarlo -

No le fue para nada difícil agarrar al hechicero del cuello de su traje y levantarlo, escuchaba como este pedía que lo bajara, algo que obviamente no iba a pasar.

Planeaba golpearlo, dejarlo inconsciente, llevarlo a la pollería y torturarlo de tal manera que ...

- spreen, bajalo -

Sus orejas se levantaron al escuchar la voz de su novio, estaba a su lado así que le fue fácil verlo, su expresión sería más lo que le había dicho le dió la idea de que estaba enojado.

Se resigno y bajo al hechicero de una manera para nada delicada, llevo toda su atención a betra, pero este lo ignoro y se fue.

- ¿Betra? ... ¡Betra! -

El hibrido lo siguió, no sabía porque betra se veía tan enojado ... ¿Hizo algo mal?

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Betra entro en la oficina de spreen a paso rápido, ahora que no tenía su máscara se podía notar lo enojado que estaba.

Spreen estaba detrás de él, llamándolo una y otra vez ... Algo que lo termino hartando.

- ¡Ya cállate! -

Le gritó, así es, ese grito hizo que el híbrido se asustara un poco y se quedará callado ...

- no necesitaba tu ayuda Spreen, puedo defenderme yo solo -

- pero, te veías en problemas ... -

- ¡No lo estaba! ¡Estaba perfectamente bien! ¡Yo puedo ganarle a un mago estúpido no necesito que me defiendas! -

Si, betra estaba enojado porque spreen lo tuvo que defender de un idiota que apenas sabe pelear, betra sabía que él no era débil y podía solucionar sus propios problemas, no necesitaba que alguien lo ayudara

La verdad, se sentía algo inutil cuando alguien tenía que defenderlo y ni hablemos ahora ...

Es novio de spreen, el patrón el mafioso del pueblo naranja, nadie puede decirle nada y eso solo lo hacía sentirse aún más inútil, ya que si no fuera por eso cualquiera podría burlarse de él.

Miro al oso otra vez, este miraba al suelo mientras jugaba con sus manos, sus orejas estaban bajas ... Se veía triste.

Betra no quería hablar con él ahora mismo, solo estaba ahí por trabajo, asi que tomo los planos del escritorio del híbrido y se fue sin decirle nada.

Eso solo rompió el corazón del pobre oso, no sabía que había hecho mal, pero sea lo que sea que haya hecho molesto a betra ...

Se sentía mal ... Y no pudo evitar llorar.

Pobre oso, no sabe lo que su corazón quiere, se siente confundido ...

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