🏹 - OO1

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❛ Más allá de las murallas está el océano.. Y ¿que habrá más allá del océano? Eso siempre me pregunto. ❟

T/n corría con una hermosa sonrisa en su rostro mientras se escondía de Eren en su forma de titán

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T/n corría con una hermosa sonrisa en su rostro mientras se escondía de Eren en su forma de titán. Últimamente, mientras el capitán Levi no estaba, ambos se iban a pasar tiempo a solas, simplemente a jugar o darse uno que otro beso.

En ese mismo instante jugaban a las escondidas, T/n se escondió detrás de una enorme roca y esperó a que el titán la encontrara. Por otro lado, Eren yacía buscándola con cautela, cuidaba mucho el que no se escucharan sus pisadas ya que su chica podría darse cuenta.

Más adelante la encontró escondida detrás de una roca, Eren sonrió dentro del titán y se acercó con total silencio por detrás. Agachó su rostro a su altura y no pasó mucho cuando ella se dió cuenta y volteó riendo.

—¡Me encontraste, tramposo! —El titán la tomó en su mano y T/n se acercó a su rostro para abrazarle la mejilla. —Vayamos a descansar por allá. —Señaló el lugar.

Entonces, Eren se levantó y caminó con su castaña sobre su mano. Ya estando en aquel lugar, se recostó en el pasto y dejó que T/n se sentaba sobre su dedo indice.

Le causaba ternura ver a una cosa tan grande y aterradora siendo todo un bodoque obediente y juguetón. Su sonrisa no podía ser más grande al compartir momentos así con su novio, por que si, desde el día en que Eren le había dicho que le entregaba su corazón, le había pedido ser su novia y por supuesto que aceptó.

—Tengo hambre, ¿tú no? —Le miró.

El titán respondió con un asentimiento de cabeza, el estómago de T/n gruñó y ella rió, Eren sonrió dentro del gigante y esté soltó un leve rugido, era su forma de comunicarse.

—No te entiendo cuando hablas de esa forma. —Decia mientras acariciaba el dedo del titán.

—Ahí están. —Decia un pelinegro llegando con su ceño fruncido.

—Hola. —Le saludó animadamente T/n.

Sabia que los iba a regañar por andarse yendo sin avisar y más cuando tenían trabajo que hacer, como limpiar aquella cabaña.

—Tú mocosa terca, tienes trabajo que hacer, ve a ayudar a los demás a limpiar.

La castaña bufó.

—Y tú sal de ahí, Eren.. —Habló sin expresión alguna. —Deja de gastar tu energía en estupideces.

T/n bajó del dedo del titán y se acercó al capitán, este retrocedió un poco, aunque no lo pareciera, T/n le ponía nervioso.

—No te acerques más, mugrosa.

Mugrosa la tiene..

Pensó la chica.

—Quiero pasar un día a solas con mi novio, ¿que no se puede?

—Lamento decirte que no, ahora ve a hacer lo que te dije ¡Y tú sal de ahí, mocoso! —Ordenó.

𝐋𝐈𝐁𝐄𝐑𝐓𝐀𝐃 - eren j.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora