「Capítulo 12.」

814 107 16
                                    

Desperté un poco antes de que el reloj en mi muñeca marcara las 6, Jimin respiraba de manera pausada en mi cuello, lo que indicaba que seguía dormido. Voltee mi cuerpo para que nuestras caras estuvieran frente a frente y pudiera verlo mejor. Jimin era muy guapo, pero cuando dormía reflejaba mucha dulzura, me gustaba mucho verlo dormir. Este era un sentimiento extraño, pero es como si recordara cada noche y despertar a su lado, no había imágenes, era mas como una sensación, como cuando pasas mucho tiempo en el agua y cuando sales aún sientes que estas flotando, así era como me sentía justo ahora. Quería tanto quedarme aquí tumbado a su lado, exigirle que me explicara lo que sucedía y preguntarle tantas cosas. Pero lo que paso ayer me hizo saber que no esperaba mi regreso, ni si quiera lo deseaba, sin mencionar lo nervioso que se puso cuando Taehyung toco el tema sobre mi declaración. Me sentía estúpido, tuve que sospechar cuando nadie toco el tema, lo único que sabía era gracias a los medios, nada de profundidad y por preocuparme mas por mi matrimonia había ignorado por completo lo que me paso. Y si la persona que me había hecho esto estaba por ahí, suelta, observándome, sí realmente fue mi culpa, la del dinero o la de viejos rencores... tenía que averiguarlo. Me levante con mucho cuidado de no despertar a Jimin pero con nuevos ánimos. Me di una ducha rápida y me puse ropa que encontré en el vestidor, un traje sin corbata, baje las escales y me hice un café bien cargado, hoy tendría un día muy largo, tenia que averiguar que paso, tiene que haber una razón por la cual nadie quiere hablarme de ello, tal vez eso también me daría respuestas sobre la actitud de Jimin.

Tomé las llaves que estaban en el jarrón y salí a paso apresurado de la casa para luego subir al coche, y de ahí en fuera me sentí como en modo automático, sabía a ciencia cierta que coche era el mío, un Mercedes Benz AMG T2, el cuál había sido un regalo de cumpleaños, también mi trayecto hacía la oficina, dónde aparcar y conocía a todas las personas en recepción. Era raro, si, pero se sentía bien saber dónde estaba parado.

Me acerque a recepción donde una mujer muy guapa me recibió con una sonrisa perfectamente ensayada para cualquiera que se acercará, porque claro, está era una empresa altamente exitosa, que le pagaba a mujeres por sonreír y verse hermosas. Nada nuevo, toda empresa siempre maneja el mismo sistema, porque oh sorpresa, así funciona el mundo.

—Buenos días, en qué puedo ayudarlo. — No sé que me sorprendió más, el hecho de que no me haya reconocido o que esté mostrando más de lo que debería de su escote.

—Soy Jeon Jungkook, vine a ver a Kim Taehyung. —Sonó más presuntuoso de lo que quise.

—Claro, señor Jeon, ¿Tiene alguna cita con el señor Kim?

Yo por supuesto no era una celebridad, pero era bien sabido quien era yo y mi relación con Taehyung, fue más que nada cortesía el hecho de haber pasado antes a recepción.

—No la necesito, dígale por favor que estoy aquí.

—Cl-Claro señor, permítame un momento —dijo con una sonrisa tensa mientras se acercaba al teléfono para hacer lo que le pedí.

No me gustaba hacer sentir a las personas de esta manera solo por mi estatus, pero mis nervios estaban empeorando, todo el camino acá he estado preocupado ya que mi mente no para y miles de escenarios empiezan a jugar con mi mente, y eso aumento con las incesantes llamadas de Jimin a las que no conteste por obvias razones.

Necesito saber lo que Taehyung sabe, porque Jimin no me dirá toda la verdad, cuando le pregunte quiero por lo menos tener una certeza de que no me está mintiendo.

No pasaron ni cinco minutos cuando el ascensor sonó, y de el un Taehyung a paso apresurado se acercó a mi, si cara de asombro al verme cambio por una ligera sonrisa, me gustaba cuando alguien se alegraba de verme, estos días esa pequeña parte de había vuelto muy importante para mí.

Piezas De Tu Amor (Jikook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora