Ocho: Nunca
Miyeon P.O.V
Al otro día desperté más tarde de lo normal, creo que el pesar en mi pecho me mantuvo pegada a mi cama por un tiempo más largo, así mismo fue muy difícil salir de ella, era como si un ladrillo estuviera sobre mi pecho lanzándome hacia mi cama, como si la gravedad estuviera en mi contra y no hubiera forma de salir de ella.
Me hice un café para poder despertar completamente, luego de eso tomé una ducha porque ya era demasiado tarde como para salir a bañarme al mar, mis planes para hoy... eran ir a ver a Shuhua y disculparme por como actué anoche.
Luego de vestirme y hacer todo lo necesario para que mi casa se viera ordenada decidí caminar a la casa de Yoonje para encontrarme con Shuhua, toqué un par de veces, pero nadie me abrió. Decidí insistir, ya que necesitaba hablar con Shuhua para evitar malentendidos y que no se sintiera mal, sé que es una niña sensible y no quiero herir sus sentimientos tan rápido. —Oh Miyeon. — dijo Yoonje una vez que abrió la puerta. —¡Hola! ¿Esta Shuhua? — Fui directo al grano, entonces su respuesta me decepcionó. —No, de hecho pensé que estaría contigo, salió a trotar en la mañana y me dijo que luego te pasaría a ver. —Entonces mire a Yoonje extrañada. —¿A qué hora salió?— Pregunté como para calcular a qué hora debía esperar a Shuhua en mi casa. —De hecho salió a las 7 de la mañana, pensé que ya estaba en tu casa y que iban a almorzar juntas.— Miré mi reloj de muñeca, ya eran las 12:42 luego yo y Yoonje nos miramos preocupadas. —Creo que debería ir a buscarla. —La vi tomar las llaves de su auto y salir corriendo de su casa. —¡Espera, te acompaño! — Grité y ella solo asintió para que me subiera al auto junto a ella.
Recorrimos la carretera como tres veces sin encontrar pistas de donde podría estar Shuhua, si mi corazón despertó pesado por lo de anoche entonces la de ahora era una sensación inexplicable, el teléfono de Yoonje comenzó a sonar y sin saber por qué mi rostro se tensó automáticamente. — Si, con ella. —La voz de Yoonje era tranquila, pero con preocupación. — Entiendo, si. —Nunca la había escuchado tan seria. —Voy en camino, perfecto. —Apenas cortó el teléfono y aceleró el auto. —¿Qué sucede?— Pregunté. —Shuhua está en el hospital, está bien, pero no me especificaron exactamente qué sucedió.
Mi corazón comenzó a latir fuertemente, ¿Será mi culpa? ¿Le sucedió algo grave a Shuhua por mi culpa? En ese momento me comencé a arrepentir absolutamente de todo lo que hice la noche anterior, quizá si Shuhua no se hubiera sentido mal en la mañana en vez de salir a trotar se hubiera ido a mi casa me hubiera abrazado en mi cama y hubiéramos visto televisión hasta que llegara la hora de almuerzo, pero no... nada de eso sucedió y ahora Shuhua está en el hospital sola y quizá muy asustada de no tener a alguien conocido a su lado, sin darme cuenta las lágrimas caían agresivamente desde mis ojos.
—¿Qué sucede? — Preguntó Yoonje muy alterada al ver que no dejaba de llorar. —y... y... Yo. —Las palabras chocaban unas con otras. —Es mi culpa. — Logré decir.
—Ella estaba triste por mi culpa, pero yo de verdad la amo. —Al decir eso el auto se detuvo de inmediato y me di cuenta de que ya estábamos afuera del hospital, pero Yoonje solo me miraba a mi sin ninguna intención de salir del hospital hasta que yo hablara. —¿De qué estás hablando Miyeon? — Su voz sonaba seria y su mirada estaba fija en mí. —Shuhua y yo. — susurré. —Estamos juntas.— Ahora su mirada se fue directamente al frente como si no fuera capaz de mirarme a los ojos. —¿A qué te refieres con juntas? ¿Novias? — Yo solo asentí con la cabeza, no fui capaz de mirarla a la cara por qué no quería ver su expresión de decepción, odio, enojo o quizá todas juntas.
Entonces el silencio me comenzó a preocupar y finalmente la mire a los ojos. —Miyeon, tú estás comprometida. Comprometida con un hombre. —Yo sabía que diría eso, yo sabía que era un problema que debía solucionar, pero nunca nadie me lo había dicho de tal forma que sonara tan real. —Tú no puedes estar con Shuhua. —Y esa, esas palabras eran mi realidad, yo no puedo estar con Shuhua, simplemente no puedo hacerle algo así, no puedo herirla de esta forma.
—Pero yo la amo.— Una vez más me encontraba siendo una persona egoísta. —¿Qué hay de ese anillo en tu dedo uh? ¿Acaso Shuhua lo sabe? —Sus preguntas eran como dagas en mi corazón y moví mi cabeza de derecha a izquierda. —¡Por dios Miyeon! Ella solo tiene 18 años, es una niña tú ya eres una mujer grande ¿Cómo esperas que Shuhua entienda que estás comprometida con alguien?
Nada de esto era mi culpa, si tan solo hubiera conocido a Shuhua primero nada de esto estaría pasando. —Yo la amo Yoonje. —Lo dije muy decidida —La amo como nunca he amado a alguien y créeme que luchare por nosotras, estoy dispuesta a terminar todo con Jinyoung para ser feliz con Shuhua.
Muy dentro de mí, no sabía si sería capaz de hacer lo que dije ¿Seré lo suficientemente decidida como para cumplir con mis palabras? —Mira Miyeon. —Su voz era firme. —Shuhua ha sufrido mucho en su corta vida, es mi única nieta y no permitiré que la hagan sufrir una vez más... pero creo en ti, creo en que la harás feliz, pero escúchame bien, si algún día veo a Shuhua llorando por ti, yo nunca te lo perdonare. — Ambas nos mirábamos directamente a los ojos, ambas teníamos determinación en ellos, ambas queríamos una sola cosa... hacer feliz a Shuhua.
Los pasillos del hospital se sentían eternos, las instrucciones del personal nos llevaron a distintos lugares hasta que finalmente encontramos el salón donde nos encontraríamos con Shuhua.
Yoonje se acercó al mesón y le pregunto a la secretaria donde podría encontrar a Shuhua, en ese momento se acercó una enfermera. — Yeh Shuhua está en la habitación 31B, yo soy su enfermera. —Al ver a la enfermera desde la punta de los pies hasta la punta de sus cabellos me hizo algo celosa de saber que mi Shu estaba siendo tratada por una mujer con tan buen cuerpo
— ¿Cómo está? — Preguntó Yoonje seriamente. —Hace poco dimos una vuelta de rutina con el doctor, Shuhua se desmayó por cansancio, al parecer estaba trotando desde hace mucho tiempo, una pareja la encontró en la carretera y la trajo aquí, despertó hace un rato pero el doctor decidió darle algunos sedantes para que descanse mejor. Probablemente en un par de horas despierte, si gustan pueden visitarla, el doctor irá en unos minutos más y les dará un mejor diagnóstico.— Me sentí aliviada al escuchar todo eso, Shuhua no estaba tan mal después de todo. —Muchas gracias. — Dijo Yoonje y comenzamos a caminar hacia su habitación.
Su rostro angelical es lo que más amo de ella, incluso si está en una bata de hospital, con ojeras y bolsas bajo los ojos, acariciaba su pelo delicadamente. —Yeh Shuhua, no me vuelvas a preocupar de esta manera ¿Si? —El doctor había venido hace ya un rato y convencí a Yoonje de que se fuera a casa ya que yo pasaría la noche cuidando de Shuhua por decisión del doctor. Lo que tenía no era más que agotamiento y recomendó que pasara la noche en el hospital en caso de que se descompensara nuevamente.
Ya llevaba unas cuatro horas y seguía con los ojos cerrados debido a los fuertes sedantes que el doctor le había dado, poco a poco sus ojos se comenzaron a abrir dándole vida a mi rostro favorito. —Hola linda. — susurré delicadamente para que no se despertara de golpe
—¿Miyeon?— Preguntó algo perdida y desorientada, yo solo sonreí acariciando su mano para que sintiera mejor mi presencia. —Te habías desmayado, ahora estás en el hospital.
Ella se quedó en silencio y pareció entenderlo todo, nos quedamos así por un tiempo hasta que ella decidió hablar nuevamente. —Miyeon. —Llamó y mire su rostro preocupado. —¿Qué sucede?— Me asusté un poco pensando que se podría estar sintiendo mal nuevamente. —No me dejes. — Pidió con los ojos asustados, llenos de fragilidad.
—Nunca – Asegure y bese su frente para luego atraparla entre mis brazos —Nunca. —Le susurre nuevamente.
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Endless Summer (2022 ver.) MISHU.
FanfictionMiyeon entiende lo que es el amor a primera vista.