★ : O9 !

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Soobin se encontró comiéndose un plato de frutas con su mirada perdida en la televisión

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Soobin se encontró comiéndose un plato de frutas con su mirada perdida en la televisión.

Ni siquiera podía estar prestándole atención al programa que se estaba reproduciendo, se sentía miserable al pensar que significaba tan poca cosa para Yeonjun, tanto asi, que se planteó echarlo de su propio apartamento.

Era tan claro como el agua, parece que Yeonjun no planeaba mostrarlo al mundo como siempre lo quiso, se lo había demostrado hoy. Tan poquito le importaba que ni habia ido a su habitación para disculparse por su comportamiento, Soobin estaba destrozado.

-Tu madre te lo advirtió, Soobin- se dijo a si mismo. Ella siempre tuvo la razón, no podía esperar pura felicidad al lado de un hombre enclosetado que a veces fingía ser heterosexual.

Y le dolía.

Con un suspiro de lastima, tomo el tenedor y llevo un mango hacia su boca, intentando disfrutar del dulzón de la fruta aunque no tuviera ni el más mínimo ánimo. Queria largarse a llorar, pero estaba harto de hacerlo.

Pero...

¿Y si era él quien realmente estaba siendo injusto con Yeonjun?. Tal vez solamente debía ser comprensivo y aceptar su propuesta ¿no? como lo hacia siempre. Uno de sus grandes problemas es su incondicional amor por su novio, a veces lo cegaba o intentaba hacerlo, como justo estaba pasando en este momento.

Su cabeza dio un click cuando escucho la puerta del recibidor siendo abierta, al igual que una nueva voz que no oía comúnmente.

Frunció el ceño y se levanto de la cama como pudo, acercándose a la puerta y pegando el oído lo mas que pudo a la misma.

Escucho la conversación.

- Perdona, me quede dormido y no tuve tiempo de limpiar - escucho la voz de su novio desde lejos, después una risa aguda que fue corta.

-No te preocupes, no estoy aqui para juzgar tu hogar - hubo unos segundos de silencio -que por cierto, es muy lindo.

Obviamente, él se habia encargado de las decoraciones y los muebles, pensó Soobin.

-Puedes pasar por aqui, deja tus cosas en el sofa.

Y luego fueron pasos

Él pelirrojo se despegó de la puerta. Podría quedarse en la habitación y esperar a que Yeji se fuera, no era una tarea tan difícil.

Pero esta vez no se dejaría ocultar, de ningún modo.

Asi que inflando su pecho de valentía, tomo el picaporte de la puerta y lo giro con su mano temblorosa ya que no le quitaba el terror de la situación. Tenia un poco de miedo, si, pero estaba seguro de que su novio no formaría un escándalo con ella ahi.

La puerta se abrió.

Lo primero que sus ojos captaron fue a la bonita mujer sentada sobre uno de los muebles con la mirada fija sobre su teléfono, que luego levanto para mirarlo a él. Tenia el cabello lacio y oscuro, sus ojos eran negros y rasgados, sus labios eran delgados y rosas, tan finos como su rostro.

Si bien Soobin ya habia visto he incluso hablado con Yeji por su club, nunca se detuvo a observarla detalladamente.

Su cuerpo era delgado al igual que su rostro, sus pómulos estaban levemente marcados y tenia una suave capa de maquillaje sobre su rostro.

Ella era tan perfecta, que Soobin se sintió mal al instante.

-Uh, ¿hola? - soltó ella al ver que no habia dicho palabra alguna, confundida debido a que no sabía que se encontraba otra persona en la casa.

-Um... -estuvo a punto de contestar si no fuera por Yeonjun que se encontraba viniendo de la cocina.

Su novio lo miro sorprendido, pero lo oculto de inmediato al saber que se podría dejar en "evidencia".

- Soobin - pronuncia el mayor en un murmullo.

-¡Ah, Soobin! -Yeji se levantó de su asiento y le tendió una bonita sonrisa, acercándose hacia él -lamentó mis malos modales, estoy algo tonta últimamente.

Soobin fingió una sonrisa, poniendo sus manos detrás de su espalda.

-No te preocupes -hablo por fin -estoy igual, es un gusto verte, Yeji.

La pelinegra le dio un asentimiento, pero luego volvió a cambiar su expresión a una dudosa.

-Oh, ¿pero que haces aquí?- ladeó la cabeza -no sabia que conocías a Yeonjun.

Soobin apretó sus dientes, evitando darle una mala mirada al moreno que habia estado callado hasta el momento.

-Yo vivo aqui -casi espeto.

-Ya veo, ¿son roomies o algo asi?

No, eran n-o-v-i-o-s

-En realidad...-

-¡Si, lo somos! - le interrumpió Yeonjun, poniendose al frente del menor -los dos pagamos la renta y bueno, tenemos muy buena convivencia.

Soobin cerro la boca de inmediato. Por supuesto.

¿Que podía esperar? Yeonjun no le contaría la verdad a nadie, en ningún momento y siempre haría lo posible por ocultarlo. Dios mio, por que siquiera paso por su cabeza algo como eso

-Eso es tan genial - dijo la pelinegra con una chispa de entusiasmo -también pensaba en tenerlo, es una buena forma de no gastar tanto dinero.

-Lo es -asintió Yeonjun -solamente olvide hablarte de esto, lo lamento.

-Um, um, no te preocupes -nego con su cabeza - Soobin y yo nos llevamos muy bien ¿verdad, soo?

Él pelirrojo la miro desorientado, con su corazón a punto de caerse al piso.

-S-si, claro.

-Espero nos podamos encontrar más seguido- Yeji solto una risita -puede que venga por aqui con mas frecuencia.

Yeonjun no lo nego y eso fue un doble golpe en su pecho.

Sintió ganas de vomitar de repente, asi que forzo uno de sus brazos en su estómago. Su cabeza era todo un lío, ¿por que tenia que ser tan exagerado?

Queria irse, desaparecer si es posible.

-Pero bien- Soobin limpio con el dorso de su mano una lágrima que intento escapar de su orbe - creo que les estoy quitando el tiempo aqui ¿no?-dijo en un tono divertido, claramente, fingido.

-Que dices, claro que no.

-Claro que si - soltó un suspiro tembloroso-y-yo volveré a mi habitación, ustedes sigan con lo suyo.

Pudo ver un quiebre en los ojos del moreno cuando por fin de digno a verlo, pero eso ni logro inmutarlo.Y sin esperar mas, volvio a caminar a su habitación y cerro la puerta sin mirar atrás.

Le dolía tanto saber que Yeji era la viva imagen de la mujer que los padres de Yeonjun siempre quisieron para su hijo.

Le dolía tanto saber que Yeji era la viva imagen de la mujer que los padres de Yeonjun siempre quisieron para su hijo

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꒰ bitter : yeonbin !!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora