𝗞𝗶𝘀𝘀 𝗺𝗲 | 𝐂𝐇𝐀𝐍𝐌𝐈𝐍

005

—¡Minnie! —habló Christopher, moviendo su mano de un lado a otro, llamando la atención del aludido en cuanto vio a su mejor amigo acercarse a él con una gran sonrisa.

—Chris —saludó sonriendo.

Ambos jóvenes habían decidido ir a la plaza que les quedaba cerca para pasar el tiempo y probar los helados de la nueva heladería que recientemente había sido abierto.

Cuando el castaño llegó junto a su amigo, emprendieron camino al local mientras charlaban de cualquier cosa, algunas veces riendo.

Al llegar se acercaron a la chica que atendía de cabellos rojizos quien mascaba chicle, parecía desinteresada en su trabajo pues su mirada lucía cansada. Pidieron los helados que comerían y se dirigieron a una mesa vacía dentro del lugar.

Algunas veces de quedaban en silencio, pues ambos comían de sus helados y en otras sacaban algún tema de plática.

—Por cierto, —comenzó Chan, mientras le daba otra lamida a su helado—. Minho me invitó a una fiesta de su amigo Jungwoo así que quería saber si quisieras ir conmigo —dejó de comer para mirar al castaño.

—No lo sé —hizo una mueca—. Sabes que no bebo y a ninguno nos gusta ir a fiestas —dijo, tratando de excusarse.

—Ya sé, tonto —rodeó los ojos divertido—. No te voy a pedir que bebas, porque ni siquiera es obligatorio pero podemos intentar algo nuevo —se encogió de hombros y mordió la galleta del helado.

Seungmin hizo una mueca. No estaba seguro si fuese una buena idea.

—De acuerdo.

Christopher sonrió y le agradeció.

[♡︎]

Esa misma noche, un amigo de Minho los había llevado hasta la casa de Jungwoo. Chris no recordaba el nombre del chico pero lo había visto antes, pues a veces iba con ellos en el recreo a charlar un poco con el azabache.

El camino a la casa de Jungwoo, fue algo largo, sin embargo hablaron un poco y ni siquiera se dieron cuenta del trayecto a su destino.

Al llegar, todos bajaron de la furgoneta, y notaron que en realidad no era una gran fiesta. No se escuchaba la música tan alto y no había gente fuera de la casa. Suponieron que el dueño había invitado sólo a algunos amigos.

Entraron y no se equivocaron, pues en realidad no había mucha gente.

Chan y Seungmin no conocían a muchas personas ahí en realidad. Por lo que decidieron que se quedarían juntos.

Ambos amigos se dirigieron a la cocina a robar un poco de comida y algo de tomar. Incluso se quedaron ahí un largo rato hasta que Hyunjin les habló.

Se habían reunido todos en la sala de estar, estaban sentados formando un círculo.

—¿Tenemos que quedarnos aquí? —susurró Seung a su rubio amigo.

—Juguemos un rato —contestó mirando al menor, este le dio una mirada asesina pero aceptó.

Estaban jugando a la botella.

Dio incontables vueltas, tenías que cumplir el reto o debías tomar un shot. Seungmin había pedido la cuenta de cuántos llevaba.

—Podemos irnos si quieres —sugirió Chris, hablándole al oído.

—Estoy bien —mintió, pues la cabeza comenzaba a darle vueltas pero no importaba.