ᴱⁿˡᵃᶻᵃᵈᵒˢ 🖇 (Prussia X Alemania)

Remedios

2 días habían pasado, aquel joven aleman estaba indeciso de que elegir para acabar con su embarazo. No pudo contactarse con su amigo argentino, motivo? Simplemente no respondía a sus llamadas y mensajes, le preocupaba pero... no podía hacer nada aunque quisiera.

Vio tantos pero tantos remedios pero ninguno le aseguraba un bienestar a su cuerpo o que siquiera funcionara, aun no conseguía dinero para las pastillas y tampoco para realizar un aborto. Su única opción estaba tan limitada qué provocaba un gran estrés en el y dolores más fuertes en el abdomen que cada vez eran más y más molestos y agudos.

Después de unas 3 horas de búsqueda, encontró un remedio perfecto! Consistía en consumir una combinación de ciertos alimentos y boom! Expulsaba lo que apenas se estaba generando dentro de él.
Aquel remedio hizo brillar los ojos del alemán, todo lo necesario lo tenía en casa y si le cuestionaban de que estaba haciendo, podía decir que era una receta nueva que quería probar, no había ningún fallo en aquel plan y remedio.

Apuntó los ingredientes y procedimiento en su celular para después salir de su cuarto y cerrarlo con llave. Se dirigió a la cocina y estando ahí comenzó a agarrar los ingredientes necesarios, comenzó picando unas hierbas las cuales tenían un olor bastante fuerte cosa la cual irritó la nariz del contrario sin más tenía que soportar eso con tal de no tener molestias mayores en el futuro. Pasó de cortar hierbas a cortar chocolate y otros ingredientes los cuales eran algún tipo de especias.

Vuala! Por fin quedó aquella bebida la cual tenía un sabor delicioso pues apenas al primer sorbo, Ale quedó encantado, el chocolate hizo una función bastante buena en el sabor de aquella bebida.
Aquel Alemán iba a dar otro pequeño trago sin más un gran manotazo en el vaso ajeno provocó que aquella bebida "magica" se derramada por todo el piso. Ale vio donde dirección del golpe y apenas toparse la cara ajena sintió una punzada en su pecho, era el prussiano.

— Oh~ El pequeño Ale está tomando un remedio casero? Para qué será?~

Dijo mientras dirigía su mirada donde el vientre de Ale, una sonrisa se marcó en su rostro para después dirigir su mirada donde aquel joven alemán.
Ale se había quedado en silencio e intento huir de la habitación donde se encontraba pero obvio, con nulo exito al momento de intentarlo.
Prussia agarró el brazo ajeno, veía que aquel brazo estaba poniéndose rojo donde el agarre.

— ¿Por qué quieres matar a mi cachorro? Eso es de muy mala educación Ale.

Mencionó para después aventar al alemán menor, vio como se golpeó en seco contra la mesa, su mirada pronto se convirtió en desprecio pues nunca fue capaz de decirle que estaba esperando un bebé de parte de él. Aquella mirada fulminante estaba puesta sobre el alemán más pequeño, aquel joven comenzó a llorar e intentar gatear para escapar pero obvio no tuvo exito ya que su cuerpo estaba bastante adolorido ante el impacto ocasionado por aquel golpe seco. Prussia al ver aquel intento de escape, comenzó a reír a carcajadas pues se veía tan miserable... no pensaba tener compasión con él y menos por lo que planeaba hacer.

Ale se había desmayado, Prussia simplemente agarró al menor y lo llevó de nuevo a su habitación, lo tumbó en la cama y descubrio su vientre para después tocarlo y presionarlo de forma suave, se sentía algo.. algo duro cosa la cual era normal en las primeras semanas de un "embarazo"... Prussia se sentía orgulloso de lo que había provocado pero algo no le cuadraba dentro de su cabeza... Ale era recesivo y que el recodase no tuvo sexo con el en su ciclo de calor. No se detuvo mucho a analizar las cosas pues ahora tenia aquel alemán junto a el por siempre... o no? Bueno, técnicamente no ya que el más joven no tenía aquella marca que tanto caracteriza a un omega que ya está enlazado.

Prussia quería estar junto a su pequeña estrella, junto al amor de su vida, no quería que nadie más lo tocará, el le pertenecía y siempre le pertenecera.
Es obvio que aquel Prussiano no estaba tan bien qué digamos, tenía una fuerte obsesión y necesidad de marcar al alemán más joven para que este fuera suyo y de nadie más. Pero él no quería que simplemente tuviera su marca, el quería hijos con él... no se pensaba conformar con 1,2,3 o 4, el quería dejar un recuerdo plasmado en el más joven, quería hacerlo sufrir pero... también quería amarlo.

Ante aquellos pensamientos, el mayor procedió a encadenar al más pequeño en la cabecera de la cama, no lo iba a dejar ir durante su embarazo, lo iba a dejar "libre" hasta que pariera a su pequeño cachorro... No tenía problemas de que su padre se preocupara por su pequeño pues al ser el Prussiano la mayor autoridad en casa, podría mandar al padre del ajeno a que lo dejara con el... o tendría graves problemas si es que intervenia en las ordenes por parte del más grande.

Ale despertó, su cabeza estallaba de dolor y su cuerpo ardía, no estaba nada bien. Intentó siquiera pararse pero le fue imposible pues su cuerpo dolía y... estaba encadenado?!
Ale comenzó a preocuparse e intentar safarse de aquellas cadenas pero obvio, no logró nada. Gritó por ayuda pero nadie le prestaba atención, lo escuchaban pero por ordenes de Prussia, nadie le ayudaba o siquiera se interesaban en ir a verlo, su padre sentía un gran nudo en la garganta al escuchar los gritos de su hijo pero... no podía hacer nada, se sentía muy culpable.

Prussia escuchó aquellos gritos y fue a ver donde provenían los mismos. Entró para simplemente acercarse al menor y darle una fuerte bofetada la cual provocó un color rojo en la piel del más pequeño. Ale aguanto las ganas de gritar del dolor y agachó su mirada, sabía que ya no podía salir de ahí.
I
Desearía qué aunque sea lo poco de remedio que tomo, expulsara aquel ser que se genera dentro de él.
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