"Codibia". [Tsukiyama] [Kagehina]

Chaper 2

Después del encuentro con Suga el rey les había dicho que no podían servirles sin comer y aclimatarse con el ambiente del castillo así que los mando a comer y seguir explorando el castillo, hasta donde la señorita Shimizu les habia indicado, Yamaguchi y Hinata se la pasaron juntos en lo que resto del día y llegaron a la conclusión de que sus amos daban mucho miedo -No me imaginaba que mi amo estuviera tan alto ¡No es justo! Que tengo que hacer para que crecer, ya intente de todo y no puedo ¡No me gusta mi estatura!- Se quejaba Hinata esperaba que fuera si quiera de la estatura de Yamaguchi pero ese tipo era enorme, y si a él le parecía alto no quería ni imaginarse lo que sería pasarse todo el dia con el hermano de su amo -Pues a mi tu estatura me parece bien, tu personalidad y carácter te complementan muy bien- le respondía su pecoso amigo, envidiaba un poco el entusiasmo de Hinata al menos el si podía decir que "no" ante ciertas situaciones, pero volviendo al tema si le pareció que el amo Tsukishima era muy alto, demasiado incluso recordando la escena del comedor se veía más alto que su propio padre -Pero tienes razón yo tampoco me esperaba que estuviera tan alto, y no hay mucho que hacer, no es como que podamos quejarnos- analizó el peliverde -Pues viendo la actitud del rey podríamos, siento que se preocupa por sus hijos y es flexible con unas cosas el al menos nos dirigió la palabra y nos miró a los ojos-habló el mas chico recordando que en el internado había una parte del año donde varios nobles y gente de alta cuna iba a observar a los niños, para ver cual querían comprar, cuando crecieran , aunque la mayoría ni siquiera los miraba a los ojos y si lo hacían era con asco o perversión cosa que incomodaba muchísimo a los dos, pero tenían que callarse por "respeto" aunque para Hinata era una completa estupidez.

-Bueno el si fue amable al fijarse en nuestra comodidad y me alegra que nos pusiera el cuarto juntos, así podemos estar más juntos después de nuestro servicio- emocionado estaba el pecoso y también aliviado se ponía nervioso si lo ponían con una persona que no conocía, no es que fuera alguien que odiara la interacción humana pero las únicas personas que conocía bien y eran cercanas a él, era porque ellas le habían hablado antes, él recordaba que en el internado cuando llegó era un niño retraído, sus maestros siempre intentaban que participara en las actividades o que hiciera algún amigo pero lo único que hacía el era resguardarse en los brazos de Suga, hasta que llegó Hinata, y como lo vio tan solo decidió hablarle. Yamaguchi se acordaba con un calor muy reconfortante en el pecho estaba muy agradecido que su mejor amigo siguiera estando ahí para el.

El cielo comenzó a pintarse de colores naranjas, la noche estaba por caer, ambos lo notaron así que decididos a que el siguiente día sería el mejor y que darían lo mejor de sí, se encaminaron por los blancos y silenciosos pasillos del castillo, sus pasos hacían eco por todo el lugar pero se tenían que acostumbrar si iban a pasar toda su vida ahí dentro, al llegar a su destino que eran los cuartos para los sirvientes notaron dos presencias ya conocidas eran los guardias de la puerta, Yamaguchi dudo en saludarles pero el anaranjado no lo dudo ni un momento.

-¡Vaya! Si son en caballero y su ecudero- exclamó Hinata

Para esto ambos chicos voltearon a ver al dueño de la voz chillona, el más chico al notar quien era y como lo habia llamado le reclamó -¡Que te dije de mi puesto! ¡Soy un caballero! ¡CA-BA-LLE-RO!- Hinata no pudo evitar soltar una pequeña risa -jaja Disculpame es que no había otra forma de llamar tu atención, también para presentarnos formalmente, solo les dijimos nuestros nombres- dijo señalandose y al pecoso -Tienes razón, bueno me presento ¡Me llamo Nishinoya Yuu! Me gusta mucho mi trabajo y el buen sexo un gustazo- lo último sorprendió a Hinata y enrojecio el rostro de Yamaguchi, era bien sabido que una de las tantas de las reputaciónes de los caballeros era que se conocían por ser "almas libres" y con mucha razón, si conocias a uno y resultaba que le gustabas de seguro solo queria tener algo de intimidad y al siguiente día haría como si nada hubiera pasado. Extendió su mano de forma energética para estrecharla con su contrario y después con el de hebras verdes, volteo a ver al pelón para señalarle como telepáticamete que el también se presentara. Tanaka asintió este era su momento de brillar y apantallar a los nuevos, así que, peinando su inexistente cabello y pavoneandose dijo - Y yo me llamo Tanaka Royunuske el mejor caballero de todos aquí, claro que me encargo de la seguridad del rey y de sus primogénitos, me gustan mucho los huevos de gallina por la mañana y en general la comida- dijo esto último con un tono de hambre, ser caballero era difícil solo comían lo necesario y no se daban el tiempo para descansar.