3- Lo que hace uno por amor.

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Seis y media de la mañana. El cuidador de la princesa Momobami se encontraba de lo más tranquilo regando un cactus de su vivero personal

El sol estaba en lo más alto y una pequeña brisa se colaba por la ventana entre abierta de su habitación, todo era simplemente hermosamente tranquilo

Hasta que el grito más agudo que había escuchado se colo por toda la mansión Bami sacándole un respingo

Un sonoro suspiro salió de sus labios y con pesar dejo la pequeña regadera de cristal en su lugar encaminandose por la mansión, el sabía perfectamente a quien le pertenecía ese grito agudo y aún peor el tenía que hacerse responsable.

Hikaru sabía que no era la mejor persona, había asesinado, robado, mentido. Había cometido muchos pecados a sus escasos 26 años y no se arrepentía de ninguno de ellos pero, había momentos donde se preguntaba si todo lo que le pasaba era un karma por sus malas acciones; si todo era sencillamente una forma en que la vida le devolvía todo lo malo que había hecho.

-Nee... ¿Sucede algo Melissa-Sama?

La mencionada se encontraba mirando su celular incrédula, su larga cabellera negra era un nudo digno de un profesional, sus afilados ojos verdes se encontraban entrecerrados mirando con dificultad la pantalla por la luz que emitía, su pijama roja estaba mal acomodada y solo había dormido.

La princesa que se veía realmente pequeña en esa extensa cama le miro con vergüenza y timidez

-Hikaru-Nee... ¿Hasta donde llega tu lealtad por mi?

-Daría mi vida por usted sin dudarlo Hime

-¿Puedes hakear camaras de seguridad para que las pueda ver cuando se me plazca?

Ah, dios que estás en los cielos, no te pido que perdones mis pecados, pero por favor, brinda un poco de paz a mi vida, amén.

miro con aburrimiento a la princesa que le hacía una seña con su pequeña y delicada mano para que se acercase a ella, no quedo más remedio que hacer lo que ella pedía y sentarse a su lado

Ella le mostró su celular -Quiero ver las cámaras de la secundaria mizo, de la calle norte de shibuya, del restaurante de ramen que está al lado de la central y quiero al menos diez puntos de vista diferentes de el templo Shibuya y si no hay cámaras, ponlas.

-...- aveces Hikaru solo quería ser una planta, recibir el sol, el aire, los nutrientes, hacer la fotosíntesis y poder ser parte del proceso de dar vida a las personas y animales, pero la vida no es tan bonita como el quisiera y la oji verde frente suyo no era tan madura como él alguna vez pensó que lo era, ¿Realmente ella es sucesora del linaje Bami? -Mañana mismo tendrá lo que desea Melissa-Sama

-Y por cierto, quiero desayunar crepas rellenas de chocolate, las que comimos en nuestro último viaje.

El se giro y miro con las cejas levantadas a la menor -¿Las mismas que probó el día que visitó la casa del señor Masayoshi? Eso es en otro país Melissa-Sama.

-Si quiero eso, ahora sal de mi recamara quiero darme un baño, vuelve a tiempo para cepillar mi cabello.

Inhala; exhala, inhala, exhala, recuerda
Hikaru, inhala, exhala.

Inhala; exhala, inhala, exhala, recuerda Hikaru, inhala, exhala

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Es cosa de tres [Souta Kawata x Oc's]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora