Yo estoy aquí para ti (Itanaru)

Capítulo 3

-¿Qué demonios es demografía? -escuchó un leve susurro, apretó sus párpados, ¿qué demonios pasaba?, ¿no se suponía había muerto?, la luz comenzó a calar sus ojos a través de sus párpados, apretó su ceño comenzando a abrir lentamente sus onix, parpadeó en repetidas ocasiones tratando de adaptar la luz a sus ojos, cuando lo logró se sintió confundido, podía ver claramente, recordaba que su vista era casi nula, después del combate con su hermano no había más que manchas leves y oscuras, después todo se había hecho negro, recordaba haber sido revivido por el Edo-tensei, recordó pelear con Nagato, Kabuto y las últimas palabras que le dedicó a su hermano -no entiendo nada ttebayo -reconoció la muletilla, sus onix giraron con velocidad a su derecha, levantó con sorpresa sus cejas al darse cuenta de quién se encontraba en la cama continúa y reparar en que se encontraba en un hospital, observó levemente al rubio, tenía un enorme puchero mientras leía un libro, el cual estaba colocado sobre su rostro en un soporte al no poder moverse, afiló su mirada entendiendo que su vista estaba completamente sana "Población y su crecimiento" había alcanzado a leer el título en la página del libro que leía el Uzumaki, lo vio atrapar con sus labios una pequeña palanca y con ella cambiar de página.

Naruto giró sus gemas hacia su izquierda, podía sentir como alguien lo observaba, los azules se encontraron con unos serios onix que lo veían con cuidado -por fin despiertas ttebayo -el azabache lo vio con su rostro en blanco tratando de entender lo que sucedía -debería estar muerto -el rubio sonrió enorme totalmente inmovilizado, sólo su cabeza podía mover -lo sé, cuando vi que entraron contigo en una camilla casi me desmayo ttebayo, la abuela dice que te encontraron casi muerto en la cueva donde era la guarida de Obito -Itachi abrió sus ojos demasiado con terror -¿Obito? -Naruto asintió -era ese falso Madara, el de la máscara naranja, en la guerra revivieron al verdadero Madara, ambos se unieron para despertar al juubi, reflejaron un genjutsu supremo llamado Tsukuyumi infinito en la luna y metieron a casi todo el mundo en él, Sasuke nos salvó con su susanoo, con el Tsukuyumi revivieron a la diosa kaguya quien asesinó a ambos Madaras, fue demasiado, el teme y yo terminamos por sellarla con ayuda del equipo, Obito a su muerte le prestó el poder de sus ojos a Kakashi-sensei quien logró activar su susanoo y gracias a kami todo salió bien, estamos de regreso y todos fueron liberados del genjutsu -Itachi abrió sus ojos con sorpresa escuchando al rubio, negó con tristeza -debió ser algo duro para Kakashi -Naruto asintió -al final Obito recapacitó, salvó la vida de Sasuke, es algo lamentable como terminó -Itachi agradeció mentalmente por ese sacrificio a Obito, aunque aún le tenía odio, el bastardo había hecho demasiado.

-¿Sasuke? -Naruto respiró con cansancio -pasara un año en la cárcel por abandonar la aldea, fue uno de los héroes de la guerra, el Raikage sólo pidió un año por el ataque a su hermano y su brazo -Itachi recordó lo que el rubio le contó cuando era un revivido, asintió agradecido -deberías estar contento, ha cambiado, nos costaron muchos golpes y un brazo a cada uno, pero ya es el mismo de antes -Itachi abrió sus ojos demasiado al ver al rubio vendado, un muñón en su lado derecho sobresalía, sonrió con tristeza -gracias, lo lamento -Naruto negó con una sonrisa -valió la pena, el teme regresó, mi amigo volvió, cumplí mi promesa, no me arrepiento, así que no te sientas mal, además, la abuela nos está haciendo un brazo nuevo -Itachi levantó una ceja con sorpresa, sonrió ligeramente.

Un silencio cubrió el lugar, Naruto comenzó a leer nuevamente, Itachi pensaba en que el rubio a su lado era una gran persona, las dudas comenzaron a llegar, respiró con cansancio, al soltar el aire abrió sus ojos con sorpresa, podía respirar bien, nuevamente respiró hondo, sacó el aire lentamente, la acción se repitió dos o tres veces más, ¿qué sucedía? -la abuela y Sakura-chan sacaron el cáncer de tus pulmones, también realizaron un transplante de tus ojos con sharingans que encontraron en la cueva de Obito, dijeron que te mantendrían en vigilancia para que no regrese el cáncer, mi amigo dice que en la calle piensan que eres un milagro -el Uchiha abrió demasiado sus ojos, sonrió levemente -cuando salga Sasuke, podrán ser nuevamente una familia -Itachi asintió levemente se dio cuenta que tampoco podía moverse, las operaciones y el chakra debían ser la causa.

Naruto observó la ilusión en sus ojos, sonrió levemente, su corazón dolió un poco, él no tenía una familia a la cual regresar, nadie lo esperaba en su oscuro departamento, mordió sus labios reprimiendo sus emociones, tratando de ocultar su tristeza, recordó a su adorado Neji, ¿cómo se encontraría?, tal vez algún día podrían estar juntos sin ocultarse de nadie, podrían ser libres de amarse y vivir su vida, una lágrima recorrió su sien, al estar acostado, habían pasado quince días y ambos estaban recluídos en una cama, sonrió al imaginar que Neji deseaba verlo tanto como él deseaba estar con él, un sonrojo cubrió sus mejillas, sus gemas brillaron con cariño.

Itachi lo observaba con cuidado, no pudo evitar ver la tristeza en su mirada y la soledad que reflejaba, era la misma que por años reflejó él, estaba seguro que ahora con su otouto podía volver a formar su familia, era un milagro lo que le había sucedido, quería salir para reencontrarse con su pequeño otouto, nuevamente reparó en la mirada del rubio, levantó una ceja al ver su sonrojo y esa mirada llena de amor, se perdió en la vista que le regalaban los azules del rubio.