Capítulo 11

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-Vamos Itaaaaa, quiero uno de esos jardines de las películas ttebayo -el pequeño empujaba al Uchiha por la calle, el azabache se dejaba hacer divertido molestando al rubio -¿me dedicarás alguna de las flores que plantes?, sólo así ayudaré -Naruto soltó una carcajada -¿cuál quieres que plante para ti? -el azabache sonrió con picardía -muchos narcisos, nuevos comienzos e ilusión -el rubio sonrió divertido, sabía que también significaba un nuevo amor -es verdad, ahora seremos algo así como una familia con el teme -Itachi sonrió feliz por sus palabras, el pequeño se detuvo en seco, delante de ellos Neji y su equipo caminaban, acababan de llegar de misión, Lee negó hacia a su amigo, apretó su hombro evitando una escena -Naruto ¿podemos hablar? -el Uzumaki lamió sus labios con ansiedad, sus gemas brillaron con miedo, asintió para no armar una escena, estaban en medio de la calle -ahora vengo Itachi -el azabache asintió no muy seguro -aquí te espero bonito -Naruto se sonrojó, caminó tras Neji, Itachi estaba molesto, pero entendía que no quería armar revuelo, aunque estaba celoso, tenía miedo.

La ex pareja se alejó de sus amigos, Itachi se recargó en una barda con los brazos y ojos cerrados, estaba molesto, no soportaba al Hyuga. Neji y Naruto entraron a un callejón, Neji estaba irritado por la presencia del Uchiha y como se refirió a su rubio -¿qué quieres Neji? -el Hyuga se acercó al rubio invadiendo su espacio personal -sólo quiero que me des una oportunidad, sabes que te amo pequeño, te amo demasiado, yo también sufrí todos estos meses sin ti, creí lo peor, fui un idiota, creí que ya no te importaba -los ojos del Uzumaki brillaban con miedo de volver a creer y ser lastimado nuevamente, estaba confundido, ya no sabía qué sentía por el castaño, Itachi había llegado como un huracán a su vida -yo te amaba demasiado -Neji abrió sus ojos con terror al escucharlo referirse en pasado -lloré por meses Neji, diario esperé en esa cama de hospital sin poder moverme, esperé por ti, diario me despertaba con la ilusión de verte atravesar esa puerta blanca y nunca llegaste -un pequeño golpe en el pecho del Hyuga dio el rubio quién lloraba con tristeza, los brazos del castaño lo envolvieron en un abrazo -perdóname, perdóname amor, te prometo que no volveré a dudar de ti, sólo dame una oportunidad, las cosas volverán a ser lo que eran antes -el rubio lloraba quedito sin saber que responder, podía sentir el chakra cálido de Itachi algo inquieto, molesto y con miedo, de igual forma el de Neji expresaba algo similar, se separó lentamente limpiando con su chamarra sus gemas azules y sus mejillas humedas -ya nada es como antes Neji -el portador del byakugan lo vio con duda -¿lo dices por el Uchiha? -el rubio asintió tímido -le permití comenzar a cortejarme -el castaño negó con molestia, apretó sus puños con coraje -no dejaré que te robe de mi lado -el Uzumaki mordió sus labios suavemente -la situación es, estoy confundido Neji, sé que sigo sintiendo amor por ti, pero también estoy seguro, que en mi corazón ahora también está Itachi, lo lamento-

El Hyuga peinó su cabello con frustración, levantó sus manos, tomó el rostro de Naruto tomándolo por sorpresa, comenzó a besarlo con desesperación siendo tosco con él, el rubio abrió sus ojos demasiado, hasta que reaccionó, lo separó de golpe -te dije que estaba confundido, no me vuelvas a besar sin mi consentimiento, después hablamos -el pequeño lo vio con molestia, le dio la espalda saliendo del callejón -no te dejaré Naruto, te amo y te voy a recuperar -el rubio lo escuchó antes de salir del callejón, se detuvo un poco, continuó su camino, salió del lugar algo avergonzado despidiéndose de sus amigos con una sonrisa bastante fingida.

Itachi comenzó a avanzar en cuanto lo vio salir, el Uzumaki le dio alcance, un silencio cubría la atmósfera entre ambos, el Uchiha visiblemente estaba molesto y estaba lleno de celos, pero no podía reclamar nada, no era su pareja. Naruto lo observaba con cuidado, mordió sus labios. El azabache con el filo de su mirada había visto los labios hinchados del pequeño, apretó el ceño y sus puños, entraron a la florería Yamanaka, gracias a kami Ino no estaba, no quería dar explicaciones de nada -Naruto, que milagro que vienes -el pequeño sonrió a la madre de Ino -he estado en el hospital, pero vendré constantemente señora -la Yamanaka sonrió agradable -¿te puedo ayudar? -el pequeño asintió emocionado -busco Narcisos rojos -Itachi abrió sus onix sorprendido, sonrió al darse cuenta que su rubio lo escuchó y estaba de acuerdo en el significado, un sonrojo cubrió sus mejillas.

La señora comenzó a guiarlos al área, el rubio escogía una tras otra, llevaba cinco Narcisos y muchas más flores distintas, sonrió divertido al ver como Itachi las guardaba en los pergaminos, el pequeño tomó un kit de herramientas de jardinería y ambos salieron del lugar. Al llegar a casa el Uzumaki no perdió más tiempo, comenzó a cavar emocionado, Itachi sacó las pequeñas plantas y Naruto las acomodó siendo cuidadoso, al final sonreía feliz -se ve hermoso -el Uchiha no perdía de vista al pequeño -es verdad, quedó increíble, se lo enseñaré a Sakura-chan y a Shika, el teme es un amargado, no valorará nuestro esfuerzo ttebayo  -Itachi sonrió divertido negando por su distracción, el cumplido era para el pequeño, se acercó un poco, besó su mejilla rozando sus labios con cariño, sonrió divertido por su reacción -eres hermoso -se levantó quitado de la pena dejando a un muy sonrojado uzumaki -ba… bakaaaa-

Yo estoy aquí para ti (Itanaru)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora