Miraculous: Lady Fairy

6 - Cupido oscuro

6 - Cupido oscuro

Adrien estaba concentrado en su cuaderno, absorto en su poema. Cuando la señora Bustier dio por finalizada la clase al sonar la campana, el tomo sus cosas.

— ¿Listo amigo? — pregunto Nino.

Adrien asintió y se levantó, pero justo en ese momento llego Chloé.

— Adrienikis. — dijo con aquel tono agudo, un escalofrío recorrió la espalda de Adrien. — Firma aquí por favor.

Sabrina sostenía un enorme póster, mismo que Chloé quería que el firmara.

— Sabes que odio firmar autógrafos.

Chloé soltó algunas tonterías con respecto a crueldad contra los hámsteres, Adrien con ganas de salir de clases para así terminar su poema, decidió simplemente firmar el afiche.

— ¡Gracias, Adrienikis!

Adrien observó cómo Nino lo esperaba en la salida, así que paso al lado de Chloé y Sabrina y se dispuso a irse, sin embargo, no contó que Chloé notará el papel que apretaba en su mano con recelo.

— ¿Qué es esto? — pregunto Chloé.

De un rápido movimiento, Chloé arrebato el papel de las manos de Adrien. Este se alarmó.

— ¡Devuélvemelo!

Todo el que estaba ahí se paró al escuchar el grito de Adrien, observando la escena. Chloé comenzó a leer el poema.

— Adrien, querido. Te equivocaste, mi cabello no es oscuro, es rubio.

— No es para ti, ¡Dámelo!

Antes de alcanzar el papel, Chloé dio un paso atrás y oculto el poema tras su espalda.

— ¡Dime ahora mismo de quién se trata! — exigió saber Chloé.

El público había aumentado, Nino, Max, Alya, Kim y más importante, Marinette se habían quedado para ser testigos de la escena.

Los nervios comenzaron a apoderarse de Adrien, los colores subieron a su rostro y las manos comenzaron a sudarle. Cada neurona en el cerebro de Adrien comenzó a trabajar.

— (¡No puedo dejar que Marinette se entere que gusto de ella!) —

Escarbó en sus memorias alguien que pudiera encajar en la descripción de Marinette, la encontró. No lo dudo.

— ¡Es para Lady Fairy!

Adrien ya al límite de su paciencia, paso al lado de Chloé, le arrebato el poema y comenzó a salir corriendo. Toda la clase había sido testigo.

(...)

Marinette estaba en su casa, caminando de un lado para el otro de su cuarto, ofuscada por sus pensamientos.

— ¿Que se supone que haga, Nooroo?

Su fiel kwami la observaba sentado desde su almohadón. Este no sabía cómo responder, estaba igual de perdido que su maestra.

— Ciertamente es un dilema. El joven Adrien Agreste gusta de Lady Fairy, supongo que el haber aparecido en su fiesta de cumpleaños para salvarlos a todos dejo un fuerte impacto en el.

Marinette se dejó caer sobre sus rodillas y se agarró el rostro con preocupación.

— ¡Mira lo que he hecho! — grito frustrada — ¡Hice que el pobre de Adrien se enamorara de mi otra yo! ¡Soy de lo peor! ¡No quiero romperle el corazón!

Nooroo observo cómo su maestra caía cada vez más en la desesperación. Era increíble cómo le afligía tanto los sentimientos de los demás.

— (Realmente es una persona muy empática) — pensó para sí mismo.