Capituló 4

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Después de salir de la morgue, Kate y Castle se separaron, pero no antes de que Castle le prometiera llamarla con cualquier actualización. De vuelta en la comisaría, descubrió que Mike todavía estaba en la sala de interrogatorios con el novio de la víctima, así que le pidió a Ryan y Esposito que se pusieran al día.

-Bueno, el dinosaurio cree que lo hizo, pero el tipo está limpio.- dijo Esposito.

-Dice que llegó a casa a las siete, encendió la alarma de la casa y se quedó dormido esperando a que viniera Betania. Estamos esperando a que la compañía de alarmas confirme que la alarma estuvo encendida todo ese tiempo, pero hasta entonces Dino lo está interrogando como si fuera el principal sospechoso.-

-Por supuesto que debería serlo.- dijo Castle con un suspiro, -porque si el novio lo hizo, entonces todos llegaremos a casa a cenar. ¿Averiguamos de dónde venía? ¿Por qué estaba tan bien vestida, quiero decir?-

-La fiesta de cumpleaños de un amigo.- le dijo Ryan.

La frente del castle está fruncida. -¿Quién tiene una fiesta de cumpleaños un martes por la noche?-

-No tengo ni idea, pero hablamos con la amiga; estaba bastante conmocionada por eso. Ella vive a tres cuadras del novio, que presumiblemente es la razón por la que Bethany estaba caminando. Un amigo dijo que Bethany dejó esa fiesta alrededor de las once y media, lo que es consistente con la hora de la muerte.-

-¿Alguien vio algo?- Pregunté Castle.

-Todavía estamos tratando de derribar a todos los invitados a la fiesta, pero hasta ahora nada.- le dijo Esposito. -¿Qué tenía Lanie para ti?-

-Nada demasiado emocionante. El corte en su garganta, fue la causa de muerte, lo que ya sabíamos. No hay otros signos de lesión, por lo que ella no se defendió; él la sorprendió por detrás.- dijo, dejando de lado a propósito su pequeña sesión de lluvia de ideas sobre el esmalte de uñas que faltaba.

Esposito asintió y luego se inclinó más cerca de Castle, bajando la voz. -Y será mejor que no dejes que esa reportera este más por aquí. Dino ha estado en un camino de guerra por eso desde que te fuiste.-

Castle se burló. -¿Desde cuándo me importa lo que piense Dino?-

-Tendrás que preocuparte por lo que piense el capitán si Dino se lo dice. Además, es una mala noticia, hermano. Mantén la distancia.- le advirtió Esposito antes de irse.

De vuelta en su escritorio, Castle no pudo evitar preguntarse qué había de malo en Kate Beckett. Decidiendo que necesitaba leer su informe sobre el Partido P.D. de Boston por sí mismo, buscó su nombre en Google para ver qué saldría. Le sorprendió ver que el primer resultado fue el enlace al sitio web del Premio Pulitzer. Dos años antes, su artículo de Boston había ganado el premio.

-Guau.- se dijo a sí mismo, antes de hacer clic en el artículo.

A diferencia de Esposito, Castle ganó más respeto por Kate al leer su artículo. Estaba claro que era una reportera exhaustiva interesada en presentar la verdad. Podía ver de dónde venía Esposito, ya que no todos los policías fueron pintados bajo la luz más favorable, pero, al final del día, habían cometido crímenes y no había nada que Castle odiara más que alguien que hiciera al sulfato con su placa. Viniendo de un entorno de los narcóticos, Esposito era simplemente demasiado sensible. Era de conocimiento común que la división Narco era la más examinada tanto por el público como por la I.A. simplemente debido a la naturaleza de lo que estaban tratando. La mayoría de ellos eran buenos hombres, pero Castle apoyaba plenamente a los corruptos que eran llevados ante la justicia, sin importar quién estuviera empuñando el martillo.

TODO HA CAMBIADO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora