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-acciones-
*pensamientos*
(Aclaraciones mias)
~susurros~
"Leyendo o Algo entre comillas"
_Traducciones_
Así hablan en otro idiomaNarra la autora
Una nueva mañana llegaba al palacio de Topkapi y una sultana despertaba lista para que su fiel compañera la fuera a ayudar a bañarse
Fadila: Su majestad se quedó dormida leyendo otra vez?
Zahira: Es un mal hábito que trato de dejar, deja dolores de cuello... Has visto a Daye? No he sabido de ella, espero la veamos este día, ha sido como una madre para mí
Fadila: No su majestad, descuide le diré a Gül Ağa que la busque
La sultana fue vestida al poco rato, su amiga la ayudo a elegir un vestido blanco que llevaba encima kaftan color crema con un patrón de líneas, sus hombros eran algo abultados y a partir de los codos colgaba una tela tipo til transparente, llevaba un tocado sencillo de plata con incrustaciones de diamantes y un collar del mismo estilo
Al acabar de arreglarse salió de inmediato a caminar por los jardines, era su parte favorita del día, claro luego de pasar tiempo con sus adorados hijos, caminaba sin rumbo por el jardín, admiraba todas las flores que habían, sus formas, colores y olores la llamaban a estar cerca. Al final se sentó en el pasto justo al lado de un rosal y comenzó a leer con calma. Siempre metida en los libros, eso la hacía una de las sultanas más cultas e inteligentes, había llegado al palacio con esa hambre por los libros y no pensaba dejarla con facilidad.
Fadila: Su majestad, la sultana madre ha mandado a llamarla, parecía algo urgente
Zahira: Ya mismo voy, mmm será otra ocasión en la que acabe este libro
Dijo la sultana para si misma y luego procedió a caminar a la habitación de su suegra, no le preocupaba tanto sin embargo sentía aquel nerviosismo de que ese llamado fuera tan repentino. Al llegar a la habitación fue anunciada por los eunucos y entró con su querida compañera, hicieron la clásica reverencia para después besar el dobladillo de la madre sultana
Zahira: Me mando a llamar?
Ayşe: Me había asustado, me dijeron que Mahidevran fue a buscarte anoche y al no venir a darme los buenos días pensé que te había hecho algo
Zahira: Descuida madre, la sultana Mahidevran no tiene el poder que necesita para hacerme daño
Ayşe: Y dime, te sientes cómoda aquí?
Zahira: La verdad extraño mucho Manisa pero... Nada se comprara con el regreso al calor del hogar donde crecí madre, estar aquí me trae tantos recuerdos de mi infancia, siempre estaba a tu lado o con el sultán, nos metimos en muchos problemas igual, éramos unos niños
Ayşe: Y ahora... El es el sultán del mundo y tu... Una sultana digna de estar a su lado y gobernar con el
Zahira: Espero serlo su majestad, amo al sultán tanto como a nuestros hijos, solo espero ser digna para estar a su lado
Ayşe: Y se bien que lo serás, no cabe duda
Zahira: Si me permite madre, me gustaría respirar un poco de aire fresco
Ayşe: Claro querida, te veré más tarde
La joven hizo una reverencia y salió del cuarto siendo seguida por su dama, camino hasta los jardines encontrando a su hijo con su padre, ambos caminando y charlando. En ese momento deseo poder dibujar esa tierna escena, Osman tenía similitudes a su padre pero más bien era su carácter lo que había heredado ya que muchos rasgos le pertenecían a su madre al igual que sus hijas.
Osman: Madre! -se acercó a ella y beso su mano- Mi padre y yo esperábamos ir a cabalgar, no gustas acompañarnos
Zahira: Es mejor que vayan ustedes, deben recuperar el tiempo perdido padre e hijo
Osman: Estás segura madre?
Suleiman: Sabes que eres bienvenida mi sultana
Zahira: Estoy totalmente segura mi sultán, este es un momento para ustedes dos, luego seguro podré unirme, por ahora diviértanse
La joven abrazo a su hijo y después recibió un beso en su mano por parte del sultán como despedida para verlos irse a los establos, eran los dos hombres más especiales de su vida y los amaba con todo el corazon, eso ya lo estaba confirmando y era seguro.
Tomo su libro y siguió con su lectura oculta del mundo hasta que escucho el sonido de un bastón chocando contra el piso constantemente, levanto la mirada encontrando a aquella mujer que habla sido como su madre
Zahira: Daye! Es un verdadero gusto verte de nuevo, te extrañe en todo el tiempo que estuve en Manisa
Daye: Es un gusto verla sultana, igual se extrañaba verla escondida leyendo, siempre fue para usted un deleite hacernos buscarla por todo el palacio hasta encontrarla
Zahira: Jamás he sido alguien de convivir, y mis libros son toda mi salvación
La joven y la mujer siguieron hablando hasta que llegó la hora de que cada una retomará sus actividades, se dieron un cálido abrazo para luego despedirse y caminar por lugares distintos
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Recuperar su amor (Sultán Suleiman y tú)
FanfictionLa primera mujer del sultán, la sultana olvidada por culpa de sus otras mujeres y la madre del legitimo príncipe de la corona, mandada a llamar por la madre sultana debido a lo mucho que la extrañaba a ella y a sus nietos. Acaso esa joven de raíces...