Las memorias, son cosas importantes al parecer de todos, pero también puedes engañar tu mente por mucho tiempo sin un daño a largo plazo?
Sinceramente el guión es muy improvisado debido a que no tenía planeado publicar esta historia
Estoy editando...
Había pasado tiempo ya desde aquel incidente, pero, por que le dolía tanto?
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Era una mañana tranquila, almenos eso parecía de no ser por los fuertes ruidos de afuera, aveces el híbrido no entendía como todos podían dormir tranquilos, todavía no se acostumbraba, con los gritos del rubio resonando por la casa.
Escuchó como su puerta era abierta de un portazo y como un peso extra saltaba a la cama, ya sabía lo que le esperaba, desde hace días el rubio estaba muy hiperactivo por que hoy se iban a volver a ver con Tubbo, aunque solo fueron algunos meses en los que estuvieron en contacto por medio telefónico, el rubio siempre decía que extrañaba a su amigo, aunque luego se lo negará al contrario, por eso cuando llegó la noticia de su visita no pudo hacer más que saltar de la alegría.
- Ranboob! - gritó el rubio prácticamente en su oído lo que le hizo taparse la oreja con su almohada, pero esta fue rápidamente apartada por el contrario que aprovechó y le pegó con esta.
-Ya estoy despiero - dijo cansado, no había podido dormir bien por tres días debido a que el rubio no lo dejaba, aveces se quedaba dormido en medio de las charlas interminables de este, recibiendo gritos o golpes leves del contrario que lo hacían despertarse.
- pues no parece - dijo el contrario molesto - nunca estas despierto, apuesto a que te vas a volver a dormir - decía mientras fulminaba al otro con la mirada.
- mm - fue lo único que salió de la boca del mitad Enderman, junto con un suspiro resignado - ya me levantó.
- así es como debe de ser - dijo levantandose rápidamente - para cuando vuelva espero no encontrarte dormido - dijo para luego salir y continuar levantando a los demás habitantes de la casa.
Se rindió por que sabía que no había remedio, nadie podía llevarle la contraria al rubio excepto Philza y algunas veces Techno, se había vuelto una costumbre que siempre lo molestará de primeras, llevaba ya dos años en esa casa y sabía de lo que era capaz el rubio, sus anotaciones por otro lado seguían igual, escribía lo que pasaba diario y luego guardaba el diario en la mesita, le servía para acordarse de cosas que le decían como eventos u ocasiones especiales.
Podía escuchar como todos se iban levantando, pudo escuchar algunos resoplidos en contra de Techno, pero pareció importarle poco al rubio, al parecer nada ni nadie lo iba a detener hoy.
Salió de su habitación dejando todo acomodado, no iba a mentir, estaba feliz de volver a ver a Tubbo, le alegraba verlo aunque no pasaba desapercibido que este aveces se perdía en sus pensamientos o se veía deprimido, pero, solo hacía falta que viera a Tommy o a Ranboo para que su ánimo volviera como si nada hubiera pasado.
