Maekty'ri

5

>) >) >)

Me levanto de mi cama con el pulso acelerado, mi cuerpo sudoroso y la cara llena de lágrimas. Tapo mi boca temblando al recordar mi sueño.

Raápidamente me aserco a mis padres que al sentir como los muevo se levantan apresurados.

-¿Que tienes Mae, que pasa?-pregunta rápidamente mi madre.

-Es Roa, ella y la cría-le digo con las manos temblorosas, sin poder dejar de llorar al recordar lo que vi.

Ella pone una expresión de dolor al imaginar a lo que me refiero.

-¿Ya sucedió o está por suceder?-pregunta padre haciendo que centre mi atención en él.

-Ya sucedió-contesto llorando aun más fuerte.

Tsireya y Aonung que se levantaron hace un momento por el ruido ven a madre comenzar a llorar en su lugar. Todos en casa tenemos lágrimas en los ojos.

-Vamos a buscarla-se pone de pie Madre con una mirada seria.

De madrugada, toda la aldea está despierta y en sus Ilu, buscando a la hermana espiritual de mi madre y su cría. También asegurandoce que los demas Tulkun estén bien.

Yo decidí quedarme al igual que mis hermanos, no podía ver en persona lo que vi en mi sueño y ellos se quedaron para que no esté sola. Los menores Sully también se quedaron y vinieron en nuestra búsqueda sin entender bien lo que pasaba.

No podía dejar de llorar al recordar claramente lo que pasó en mi sueño. Sentí en carne propia el miedo que ella sintió, la preocupación por su cría y el dolor que le ocasionaron antes de matarla cruelmente. Sentí como entraban dentro de mis entrañas y sacaban algo.

Mi hermano Aonung me abrazaba tratando de calmarme. No podía imaginar lo destrozada que estaría Madre al ver su cuerpo sin vida y a su cría igual. La cría por la que Roa tanto esperó.

-¿Que sucede?-pregunta Kiri al ver el acelero de la aldea y a mí llorar sin para mientras Aonung sigue tratando de calmarme.

-Es Roa, la hermana espiritual de mi madre. Esta muerta-contesta Tsireya con tristeza.

-Pero escuche que aún la están buscando-pregunta Loak.

-Mae lo vió-contesta Tsireya dudosa de hablar sobre el tema-Es solo que no a dicho nada más-termina sin dar detalles específicos.

No puedo mover mis manos, mi cuerpo solo se convulciona levemente en mi lugar entre los brazos de Aonung. Me sujeto con ambas manos a sus brazos, trato de seguir su abrazo pero me siento tan débil por no parar de llorar.

-Mae, respira. Respira profundo-escucho como Neteyam se aserca a mis espaldas, siento como su mano toca mi espalda suavemente-Mírame un momento linda-volteo a mirar su cara como puedo. Mis ojos llorosos e inchados hacen que vea borrosa la imagen-Eso, concéntrate en mi; inhala, exhala. De nuevo, inhala y exhala-sigo su ritmo lo mejor que puedo, sintiendo como me calmo despacio.

-Cuando se pone así, es dificil que se calme-menciona Aonung con extrañesa.

-¿Le a pasado antes?- pregunta Neteyam a lo que asiento yo en respuesta.

-Te resultó fácil calmarla Neteyam-se burla inocentemente Kiri.

Okey pero por favor ya no hablemos sobre esto, es vergonzoso.

¡No puede ser!

Tapo mi cara con mis manos rápidamente. Devo tener una apariencia horrible al estar tan llorosa e inchada, tengo la misma pinta que cuando me levanté en la madrugada.