El portal en el santuario [dropped]

Capítulo 5: Fujinomiya Mitsuki

La comida yacía fría sobre la mesa. Ninguno de los dos había probado un bocado la noche anterior, salvo por Sakura que se había terminado el té de la botella que Sakuta le ofreció.

Ella aún estaba en la casa de Sakuta; había dormido en el sofá de la sala. Sabía que había metido la pata anoche, pero también pensaba que no toda la culpa era suya; nadie le creería a un supuesto 'desconocido' sobre la existencia de multiples universos, ni tampoco se imaginó una situación tan delicada en la que sus padres no estarían vivos en aquel mundo, de lo contrario no hubiese sido tan insensible con Sakuta.

Él aún estaba encerrado en su habitación. Sakura esperaba que ya no estuviera triste o molesto, como sea que se sintiera. Quería disculparse con él de alguna forma, así que recogió la sala, y posteriormente iba a preparar algo para que los dos desayunaran juntos cuando Sakuta estuviese listo. De alguna forma los dos debían platicar y resolver la situación, después de todo Sakuta era, de entre ellos dos, quien más sabía sobre los viajes entre universos y quizás también en cómo ella podía volver a casa, por lo que pensaba que el desayuno sería una buena forma para abrir una conversación.

Sakura abrió el refrigerador para buscar ingredientes. Había mucha comida ya preparada guardada en recipientes de vidrio y muy pocos ingredientes, pero no mucho que le sirviera para hacer el desayuno.

Sakura salió de la casa, se le ocurrió que podía ir al konbini a comprar algo para el desayuno. Durante el corto trayecto de unos pocos minutos ella pudo darse cuenta de las pequeñas diferencias de este mundo con el suyo. Cuando llegó al konbini se dio cuenta que este estaba del otro lado de la cera. Entró y buscó donde se encontraba el huevo, pensaba en hacer omelets de arroz. Después fue a donde estaban los vegetales y tomó un manojo de cebolletas. Se dirigió a la caja para pagar los artículos, saco de su monedero un billete de mil yenes que le entregó al cajero.

"Disculpe, este billete no es real" dijo el cajero.

"¿Qué? Claro que lo es".

"No lo es, parece de juguete. Mire, el color del billete y el personaje son distintos a este billete de mil yenes".

"Oh, cierto. Ha sido un error, no sé de donde salió este billete". Al parecer los billetes en ese mundo eran totalmente distintos al del suyo. Vació parte del contenido de su monedero en la palma de la mano, quizás podía pagar con tarjeta, pero si los billetes eran distintos también había la posibildad que su tarjeta fuese rechazada.

El cajero estaba impaciente. Sakura estaba pensando cómo solucionar su problema monetario sin regresar a la casa, no quería pedirle prestado dinero a Sakuta porque sabía que no se lo podría pagar, al menos no con el dinero de su mundo.

"También puede pagar con monedas" le sugirió el cajero.

Quizás tendría el mismo problema, pero decidió intentarlo. Entregó al cajero una moneda de quinientos yenes y él no pareció objetarle; las monedas eran prácticamente similares en ambos mundos. Salió del konbini con la bolsa de papel y se dirigió a la casa.

Abrió la puerta con su contraseña. Lo primero que notó fue otro par extra de zapatos en el genkan, esta vez no eran los de Sakuta, sino los de una chica.

"Tadaima (Ya regresé)" dijo para ver si Sakuta ya se había levantado, o si alguien más contestaba, pero no hubo respuesta.

Caminó hacia la cocina para dejar la bolsa con lo que había comprado, sacó las cebolletas y un paquete de huevos que puso en la mesa del centro. Un ruido que provenía de sala le llamó la atención, eran las páginas de un libro dando vuelta. Giró para ver quién era. En la mesa de la sala habían dos libros, plumas y libretas, y en el sofá estaba alguien sentada leyendo un grueso libro, pero más bien parecía que lo hojeaba como si buscara una información en concreto. Era Mitsuki.