En este libro encontrarás una valoración amable pero sincera de aquellas historias que ganaron alguno de nuestros concursos o el derecho a obtener una crítica nuestra.
Eres bienvenido a echarle un vistazo a su contenido y ¿quién sabe? Quizá encuent...
El género vampírico ha sido explotado en muchas ocasiones. El aura de misterio, romance y sangre que los rodea atrae a todo tipo de lectores: desde los más aventureros hasta los que buscan un historia de amor prohibido. La eternidad nos fascina, no podemos evitarlo, y soy la primera en disfrutar de cada historia que me encuentro de este género. Porque Luna de Sangre es una novela para disfrutar e introducirse en sus páginas para descubrir los oscuros secretos que guardan todos los personajes. No solo es una historia de vampiros contra monstruos temibles, es contemplar la batalla que libran contra ellos mismos.
Lo primero que llama la atención es el título que, al contrario de lo que pueda parecer, la familiaridad que inspira este hace que el lector se interese más en la historia. El misticismo asociado a este termino nos atrapa como la luna a las mareas y no podemos evitar sumergirnos en la novela. Lo acompaña una portada demasiado genérica donde una gran luna roja destaca junto al castillo que nos encontraremos en sus páginas.
Acompaña a la historia una ortografía y gramática bastante cuidada, con solo algunos errores de dedo que serán fácilmente salvables en futuras revisiones. Entre ellas se encuentran la falta de algunas tildes y comas en varios momentos, así como algunos laísmos. Además, convendría tener en cuenta los adverbios, que son excesivos en algunos momentos. Todo esto no influye en la lectura, que es fluida y entendible para disfrute del lector.
El detalle que más se puede detectar a la hora de revisar la edición está en los diálogos. La puntuación de estos no es correcta, no teniendo en cuenta cuándo un verbo de las acotaciones es dicendi o no dicendi. Además, los espacios entre rayas y palabras no están bien colocados y faltan algunos puntos finales en los párrafos. Todo esto convendría ser revisado, pues es importante para hacer que la historia destaque entre todas las que se pueden encontrar en la plataforma. Puede resultar un poco lioso cuando hablan más de dos personajes, pero las conversaciones son coherentes y aportan mucho al desarrollo de la trama y a la creación de la personalidad de los personajes.
Su trama engancha desde el primer capítulo. No solo por la temática vampírica, sino por su ambientación en una época antigua y pueblos recónditos. El grupo de vampiros, causantes en otros momentos del pánico a su alrededor, tendrán que luchar contra fuerzas más poderosas que ellos para salvar a su especie y a los humanos de las masacres que los Suguinem están dispuestos a realizar. Este concepto da una vuelta de tuerca al concepto que tienen los vampiros de su superioridad, al estar en la cima de la cadena alimenticia hasta la aparición de estos seres. Unido a la sutil explicación del pasado de los protagonistas, plantea un viaje donde nos será muy difícil intentar juzgar con la moralidad actual los actos que han realizado. También es cierto que los saltos temporales pueden ser demasiado bruscos y todo va muy rápido en ciertos momentos, además que los diálogos que aparecen durante varias líneas sin narración entre ellos pueden restar fluidez, pero son detalles que pueden ser revisados y no impiden apreciar los aspectos esenciales de la trama.
La autora ha creado un mundo maravilloso, partiendo del misticismo que rodea a los vampiros, añade detalles de su propia cosecha muy acertados. La introducción de los clanes y su estructura, el detalle de cómo afecta la luz a sus personajes y las mordeduras de los Suguinem, entre otras cosas, hacen que la historia sea fresca y muy entretenida. Destacan las descripciones, que introducen a los lectores en el universo con mucha facilidad. Un detalle con el que no estoy muy familiarizada es con la introducción de varios narradores en un mismo capítulo, más cuando no es necesario por estar en la misma escena durante la narración, pero entiendo que una elección de este tipo ha sido tomada a conciencia para poder llegar al resultado final. Y, por último, me gustaría señalar lo entretenido que es el toque de humor que aparece de vez en cuando.
La novela tiene como punto fuerte sus personajes, pues todos aportan algo a la trama para su perfecto desarrollo. Marian está construida con especial cariño, haciendo que destaque sobre todos los demás. El aura que la rodea es tan intrigante que no puedes evitar pensar, en todo momento, que está escondiendo más de lo que podemos ver a simple vista. No solo ella, todos los del grupo están tan bien elaborados que el lector podrá sentirse identificado con cualquiera de ellos, a pesar de las diferencias morales que nos separan de los vampiros. Además, los relatos sobre sus pasados son excelentes. Destacar la aparición de Drácula, pues es una elección acertada, poniendo en la palestra un personaje conocido para llamar la atención de futuros lectores.
Esta es una historia perfecta para todo aquel que esté buscando una novela corta de vampiros y quiera disfrutar de sangre, aventuras e historias personales que nos llevarán a un desenlace del que no será fácil olvidarse. Eso sí, a no ser que seas una persona valiente, es mejor evitar leerla cuando se acerca la luna de sangre.
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