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Shikamaru cuando salió de la oficina del Hokage luego de haberse enterado del embarazo de Suki sabía que se estaba metiendo en un problema, era flojo pero no tonto, sabía que si alguien llegara a sospechar el sería el punto de mira principal para esa persona al ser uno de los amigos más cercanos de Naruto, y aquí se encontraba el, en la situación que esperaba nunca encontrarse.

Por otro lado la cabeza de Hinata se encontraba a mil por hora, su corazón latía con fuerza, tenía que sacarle información y sabía que no sería nada fácil

- Buenas noches Shikamaru  ¿como estás? - Habló una serena Hinata

- Buenas noches igualmente Hinata, la verdad es que me encuentro cansado, el trabajo en la torre del Hokage es muy duro, ahora mismo solo quiero dormir -

- Me imagino lo duro que debe ser  ¿Naruto todavía está en la oficina? No quiero que se desvele mucho, la última vez se durmió en su escritorio y tuvo dolores musculares por la posición incomoda en la que se durmió -

- Si, Naruto se quedó firmando el papeleo, me aseguré de recordarle que se vaya a casa -

- Muchas gracias por eso, trabaja tan duro que aveces me llega a preocupar -

- Tranquila, ya sabes como es, lleva trabajando duro desde que era un niño para llegar hasta donde está -

- Aveces me pregunto si valió la pena, sé que es su sueño desde que era un niño pero ya no pasa tiempo casi con los niños, si no está en la oficina se va a entrenar con Suki -

- Si bueno, ya sabes como es, no quiere perder la forma, sabe que en cualquier momento puede llegar un enemigo igual o peor que Kaguya y quiere estar listo por si algo llega a pasar y la única que puede seguirle el paso es Suki -

- Hablando se Suki aveces me pregunto si realmente fue una sabía decisión que Naruto le haya dado su esperma para que Suki se haga una inseminación -

- Te entiendo, cuando me comentó el tema yo también pensé que era una locura -

- ¿Te habló de ello antes de hacerlo? -

- Si, dijo que sería una gran oportunidad para revivir al clan Uchiha con el tiempo, así Konoha no perdería el Sharingan y Suki tendría algo que la amarre a la aldea ¿A ti no te lo comentó? -

- La verdad es que no, me lo dijo cuando Suki ya se había hecho la inseminación, lo cual me parece raro -

- ¿Raro por qué? - (Si lo descubre estamos muertos, tengo que pensar en algo rápido) pensaba furiosamente Shikamaru

- Porque la decisión parece haber sido tomada muy repentinamente, si hubiera sido algo que pensó me lo hubiera comentado mucho antes -

- Bueno, ya sabes como es, es un idiota olvidadizo, quizás con tanto papeleo se le olvidó, a mi me pasa y no tengo ni la mitad del papeleo que tiene Naruto -

- Si, quizás sea eso, ser Hokage es un trabajo complicado, debió tener muchísimas cosas en la cabeza y simplemente se le olvidó -

- Así es, pero bueno, yo tengo ganas de dormir, que disfrutes tu noche, por favor no dejes que Temari se emborrache mucho, aveces se pasa un poco -

- Está bien, buenas noches Shikamaru -

Cuando Hinata salió de la casa desvaneció el pequeño e imperceptible Genjutsu que tenía tenía rededor de sus ojos para ocultar las venas ahora visibles al rededor de sus ojos

Su Chackra tuvo leves cambios, me mintió... Era lo que pensaba Hinata mientras caminaba por la calle solitaria calle alumbrada por la luz de la luna

Casi no salgo de esa. Eran los últimos pensamientos de Shikamaru mientras cerraba sus ojos para dormir

Mientras tanto Naruto levantó a una Suki dormida en estilo nupcial, dejó a un clon con el suficiente chackra para durar un par de días, el ahora solo quería descansar al lado de su amada. Usando un Hiraishin llegó a la habitación que compartía con Suki, la recostó en la cama para taparla con las sábanas, el se recostó a su lado y se durmió abrazando a su amada mientras acariciaba su estómago visiblemente hinchado por el embarazo.

La noche en el bar para las chicas había ocurrido con normalidad, las risas y anécdotas era lo que más se escuchaba en el grupo de Kunoichis

Una Ino se estaba riendo cuando vio a Hinata entrar por la puerta, se veía pensativa, mordiéndose el labio quitó la vista, desde que se enteró de la infidelidad de Naruto no podía mirar a Hinata a los ojos sabiendo que le ocultaba un secreto que podía arruinar no solo su matrimonio si no que también su vida y la de sus hijos.

Hinata notando esto se sentó al lado de una Ino visiblemente incómoda

- ¿Recuerdas Ino? Los exámenes Chunin en el bosque de la muerte, tenía tanto miedo pero logramos pasar, después pasó lo de Neji y como Naruto me defendió, lo recuerdo como si hubiese sido ayer -

- Si, lo recuerdo, él siempre fue así, defendió al indefenso aun sabiendo que tenía todas las de perder - Respondió Ino que miraba su copa, sin mirar hacia Hinata a los ojos

- ¿Estás bien Ino? Luces angustiada por algo - Preguntó inocentemente Hinata

- Si, estoy bien, solo que tuve una discusión con Sai -

- Entiendo, yo he tenido varias con Naruto pero siempre hemos podido solucionar las cosas - (Me está mintiendo y ni siquiera tengo la necesidad de usar mi Byakugan para verlo, voy a llegar al fondo de esto, y ya tengo una buena idea de como hacerlo)

Ino se puso visiblemente más incomoda por la mención del esposo de la Hyuga

La noche transcurrió con normalidad hasta que todas se fueron a casa, Hinata subió a su cuarto para ver a un Naruto acostado y profundamente dormido, ella simplemente se puso el pijama y se acostó a su lado - Tengo miedo de que hayas hecho lo que creo que hiciste, por favor Naruto, dime que no hiciste lo que creo que hiciste, que simplemente sean paranoias mías - Fueron los susurros de Hinata quien casi se ahoga con el nudo que se estaba formando en su garganta, las lágrimas empezaban a caer de sus mejillas, y sin más, se durmió, inconsciente de que el Naruto al que estaba abrazando no era el original.

Embarazo Inesperado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora