I don't want to lose them

979 63 5
                                    

Finney Blake:

Mi mejor amigo siempre ha sido Robin, aunque estoy consciente de que somos muy diferentes. Recuerdo que cuando lo conocí, estaba solo en un columpio del patio de nuestra escuela, apenas teníamos seis, me senté en el columpio de al lado y hay fue como comenzamos a charlar...ya después conocimos a Megan y todo eso.

Ahora me encontraba con él en la banca de un parque de por ahí, conmigo tratando de hablar seriamente con él de la chica antes mencionada, Megan Jacobson, ella es una gran chica, pero por desgracia, ella...no es muy buena con los sentimientos, es alguien que podría lastimar a Robin, lo hace sin querer, claro, ella jamás haría algo así apropósito, pero no quiero que ninguno de ellos dos, mis amigos, terminen lastimados o enfadados con ellos mismos por no saber manejar su corazón.

-Hablas enserio? - Preguntó algo incrédulo mientras trataba de hablar sin que él mal interpretara las cosas y pensara que yo no quiero que sienta nada por ella porque me atrae o algo, ya saben como es Robin, se altera por todo.

-Robin, estoy hablando enserio, no quiero que ninguno de los dos salga lastimado por esta situación.

-Por favor, no es para tanto, sé lo que hago, no soy tan idiota.

-Ya lo sé Robin-Comenzaba a desesperarme-solo-solo quiero conservar a los únicos amigos que tengo...felices.

-Esta bien, gracias por preocuparte, te aseguro que esto no arruinara nuestra amistad.

Lo mire en silencio y suspiré, sé que tal vez es algo que no me incumbe, pero enserio me preocupo por ellos, que haría yo sin mis amigos? No soy nada sin ellos, son mi única vida social después de mi hermana.

Llegué a mi casa, mi padre estaba pasado de copas, como de costumbre, le quité la botella de cerveza que tenía en la mano, quite la música del toca discos y apagué la luz, esa es mi rutina diaria de los viernes por la noche desde hace unos años.

Encendí la televisión, buscando un programa que no fuera de terror, los pasan demasiado en la programación nocturna, encontré una película aceptable y comencé a mirarla. Al cabo de un momento, mis bostezos eran más frecuentes, por lo que decidí irme a dormir; apagué la televisión y fui a mi habitación, pronto me quedé en un sueño profundo, como la mayoría de las noches.

Lunes, estaba con Donna conversando del mismo tema, a los dos nos preocupa eso, nos conocemos desde niños, ella fue amiga de Megan mucho antes que Robin y yo, podría asegurar que la conoce mejor que su propia madre.

-Como te digo, ella quiere a Robin, pero crea sus propias barreras y obstáculos para no decirle las cosas, por qué son así? Simplemente se gustan, ¡aceptenlo por Dios!

-Exacto! Lo mismo con Robin, él es una persona muy sentimental, pero creó un escudo para no mostrar debilidad ante nadie, a menos que sea Megan.

-Pero bueno, solamente ellos se entienden, total, solo somos sus amigos, no podemos interferir mucho que digamos...Cambiando de tema, como has estado? Desde que llegamos hemos estado hablando de nuestros amigos, quiero conocerte más, se ve que eres un chico amable.

Mis emociones se juntaron y una explosión estaba ahora mismo en mi corazón- Ehh, bien, he estado bien...y tú?

-me alegro, bien...-Un silencio nos invadió, no teníamos de que hablar, a menos que criticaramos a Meg y Rob otra vez, fue un momento algo incómodo, es como si quisiera decir algo más, pero no sé qué.

¡Oh sorpresa!, no vino el profesor de la siguiente clase, el señor Nate, siempre está enfermo, no es una novedad que no viniera a dar su clase, pero tenía una oportunidad para ver a Megan y Robin. La primera que encontré fue a Megan, quien no estaba de muy buen humor que digamos.

-Hola Meg...tienes un momento?- Parecía desesperada metiendo cosas en su casillero, se percató de mí presencia y cerró la puerta de golpe.

-Ahora no Finn.

-Estas bien? Te ves algo...nerviosa.

-Estoy bien, no te preocupes- no pude establecer una conversación decente con ella, se fue caminando apresuradamente por los pasillos, parecía que huía de alguien.

Después de eso, no tuve más opción que sentarme en una de las bancas de los pasillos y comenzar a leer, deseando con el alma que no vinieran a molestarme o golpearme, como de costumbre.

Sí, mi vida es algo aburrida, ¡pero oigan! Soy un adolescente de 13 años que depende emocionalmente de sus calificaciones, tiene 2 amigos y le hace bullying, que esperaban? Soy Finney Blake!

𝐌𝐘 𝐀𝐑𝐄𝐋𝐋𝐀𝐍𝐎 || 𝑹𝒐𝒃𝒊𝒏 𝑨𝒓𝒆𝒍𝒍𝒂𝒏𝒐 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora