✨️7✨️

52 12 21
                                    

Jurandose y repitiéndose una y mil veces que todo lo que sentía ahora mismo solo era por culpa del maldito celo.
.
.
.
.
.

Horacio no se hizo esperar más, pues si no se apuraba, cederia ante la tentacion teniendo tan cerca aquella bella imagen del Omega.

Con sus ojitos cerrados, sus mejias sonrojadas y esos rosados labios tan hermosos y tentadores ante a el.

Mientras tiritaba un poco, dejando inundar aquel cuarto de baño con su exquisito aroma tan dulce y embriagador que lo estaba volviendo loco.

Tomando asi rapidamente estilo princesa a Gustabo metiendolo con delicadeza en la bañera.

Para luego salir del cuarto de baño y dirigirse a la habitación de invitados, para arreglar todo y sacar de su cabeza muchas imágenes no cristianas que habían pasado por su mente en ese instante.

Quedando asi un muy sonrojado Gustabo,con sus ojitos cerrados, y su corazon a mil, tratando con todas sus fuerzas de no perder la compostura.

Mientras no paraba de repetirse una y mil veces en su mente, que todo lo que sentía en ese momento era por culpa del maldito celo,y que pronto acabaría.
.
.
.
.
.
.
.
.
Luego de varios minutos, Gustabo se sentía como nunca.

Relajado y con un sueño tan agradable, al parecer los supresores le habían llegado y el baño tibio con lavanda y sales minerales que preparo Horacio le habían ayudado a relájarse bastante.

También sentía que le había regresado un poco de fuerza, por lo cual opto por salir de la bañera.

Empezando así a dar un pequeño vistazo por aquel hermoso cuarto de baño.

Donde pudo observar una toalla y una muda de ropa cerca de un hermoso taburete frente a un espejo, que al parecer Horacio ya le había dejado preparado.

Gustabo se acercó y se seco con la toalla, para luego tomar el cambio de ropa, la cual constaba con una enorme camiseta rosa y unos pantalones de pijama celeste con caritas de gatitos kawaii.

Pero estos a simple vista se miraban que le quedaban enormes a Gustabo.

Por lo cual Gustabo opto por dejarse solo la camiseta a modo de vestido, la cual le quedaba a unos 4 dedos antes de llegarle a las rodillas.

Aunque siempre sintiendose un poco incomodo pues su ropa interior estaba mojada y debía quitársela para lavarla.
.
.
.

Cuando tenía ya puesta la camiseta, pudo sentir un leve aroma a Chocolate impregnado en ella, a lo cual inconscientemente empezó a abrazarse asi mismo y olfatear con una tierna y tonta sonrisa la camisa.

Pero rápidamente recapacito en lo que estaba asiendo, moviendo la cabeza de lado a lado, para salir del pequeño letargo y continuar con lo que estaba asiendo.

Pero unos golpes en la puerta lo asustaron un poco.

-Gus?, bb, ya esta todo listo, cuando salgas, me avisas y deja el resto de tu ropa por ahí, no te preocupes yo la lavare mientras descansas, dijo Horacio con un tono dulce detrás de la puerta.

Asiendo que Gustabo se tensara un poco, pero sus mejias se sonrojaran inconsientemente, asiendose preguntar como lograba este chico para sorprenderlo cada vez más.

Pero no le hizo esperar, pues ahí no más se acercó a la puerta para abrir, quedando de frente a aquel imponente y hermoso Alfa, con exquisito aroma,quien lo miraba con cierto toque de ternura.

-Vaya bb, ya te miro mejor, espero que te haya servido para relajarte mi viejo truco de lavanda y sales minerales, es un pequeño secreto de familia, dijo Horacio dulcemente mientras guiñaba un ojo y hacia una señal con su dedo índice en sus labios, de que guardará confisialidad.

✨✨EL CONTRATO✨✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora