Realidad II (Imperio)

Cap 11

Lancé una silla de madera al fuego - QUE TODO ARDA

-Patrona, encontramos a unos que estaban escondidos bajo el piso

-Tráiganlos ante mí - Ordené, lancé otra silla y una mesa, avivando aún más el fuego 

Con las manos en la nuca, 5 híbridos de búfalo entraron y se arrodillaron. Me lancé encima de uno y lo acuchillé tantas veces, que la carne de su pecho parecía carne molida

Me levanté y limpié mis manos con un trapo que estaba en el piso - ¿Con que escondiéndose no? - Temblaban y tartamudeaban - A ver hijos de su puta madre, no se asusten, haré unas preguntas y ustedes van a responderme ¿Entendieron? - No me respondieron, solo miraban al piso, ya había interrogado a 3, pero no habían dado suficiente información - A ver vaquitas ¿Para quién trabajan? -Puse una varilla al fuego y luego rocié los ojos del más joven spray pimienta  -PARA QUIÉN TRABAJAN

Elan me jaló del pantalón, me enseñó un palito y señaló al fuego, encendí la punta del palito y se lo regresé. Catra había estado cansada y mi suegro había tenido que ir a una audiencia con el Rey, por lo que tuve que traer a mis hijos, por supuesto, todos con pasamontañas y uniforme táctico para evitar ser reconocidos 

Corté las orejas del más grande, dos ríos de sangre escurrían  - ¿Para quién trabajan?

-Para "Los antiguos"

-¿Antiguos? ¿Quién los lidera? - Elan volvió a jalarme del pantalón - ¿Que pasa mi amor? - Me mostró su palito y el fuego, Volvía encenderlo y se lo di - ¿Quién los lidera? - Continué con mi interrogatorio

-No sabemos como se llama, pero en unos días, se supone que...

-Ma... - Elan volvió interrumpir

Aaaawwww me dijo mamá - ¿Que pasa amor? - Me dio otra vez su palito, lo encendí y se lo di - Bien, continúa, se supone que ¿Que?

 -Que entregaremos una carga de metanfetamina en el bar Demonio Azul y ahí, la patrona nos pagaría lo de un mes 

-Entiendo

-Ma... - Otra vez interrumpió

-¡¡ GATO 2, VEN ACÁ !! - Nombre por el que llamo a Derick

-¿Si?

-Cuida a Bebé 1 y enciéndele su palito

Continué con el interrogatorio - ¿Cual es tu nombre ? - Le pregunté

- Antonio 

-Bien Antonio, dime ¿Quieres vivir?

-Si señora

-MALDITO COBARDE - Gritó su compañero

- ¡¡MAMÁ!! - Gato 2 llegó molesto - Bebé 1 no deja de apagar su palito, yo ya no juego

Gato 2 salió por la puerta dejándome a su hermana - NO HUYAS COBARDE, LE DIRÉ A TÚ MAMÁ - Volví a encender el palito y la seguí para ver qué es lo que hacía. Mi pequeña se dirigía a uno de los cadáveres y con la punta encendida del palito, lo apagaba en la piel - Estoy tan orgullosa de ti - Abracé a mi pequeña - Pero te enseñaré como se debe hacer - La llevé con los capturados, le ayudé a sostener la varilla metálica que ya estaba al rojo vivo y guie para que clavara la punta incandescente en el cuerpo de uno de ellos, el cual, aguantó el dolor y ahogó su grito 

Elan rió de manera malvada, haciéndome sentir aún más orgullosa, pero el imbécil le gruñó a mi niña, borrando esa linda sonrisa, PUTA MADRE, esa sensación como la de una patada en los testículos

En lugar de llorar o asustarse, Elan le gruñó con la ferocidad de un bebé de 3 años, y ella tenía menos de 2 - ¡¡JA!! EN TU CARA HORRIBLE ANIMAL - Saqué mi arma y le disparé en el entrecejo -Muy bien Antonio, ahora trabajarás para mí, pero hablaremos luego, LLEVENSELO y maten a los demás- Alcé a mi hija y retiré a mi equipo