LA VISITA DE HELEN

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"Está bien Lori, ¿qué quieres hacer ahora?" Alex le pregunta al niño de 7 años, mientras salen de L-Corp, tomados de la mano.

"No sé." Lori responde, con voz triste.

Alex nota la voz triste de Lori y adivina que se debe a que la joven está triste por dejar a Lena y no está muy segura de cuándo la verá la próxima vez.

"Oye, pronto volverás a ver a Lena. No estés triste por eso." Alex dice, en voz baja.

"Si, vale...." Lori asiente, mordiéndose el labio ligeramente, todavía con un poco de voz triste.

"Vamos. Vamos a divertirnos un poco más para que puedas olvidarte de las cosas". Alex dice: "Podemos ir a la sala de juegos o jugar a los bolos".

Lori se queda en silencio por un rato, antes de que finalmente mire a Alex de nuevo.

"Nunca he jugado bolos.... No sé cómo hacerlo. Lori admite.

"Oh...", dice Alex, sorprendida, pero se da cuenta de que probablemente no debería estarlo, ya que es probable que Lori no pudiera hacer muchas cosas por ser una niña de acogida. "Bueno... estaría feliz de enseñarte.... Más.... muchos lugares de bolos también tienen algunas pequeñas salas de juego.... Entonces, incluso si no te gusta jugar a los bolos, aún podemos jugar en la sala de juegos después".

"Bueno.... Entonces podemos ir a jugar a los bolos. Lori responde, con un movimiento de cabeza.

"¡Perfecto!" Alex sonríe, feliz.

Luego, Lori y Alex caminan de la mano varias cuadras hasta que finalmente llegan a una bolera. Una vez que están dentro, caminan hacia la recepción, con Lori mirando a su alrededor, observando todas las vistas de la sala de juegos y todo, mientras escucha el ruido de los bolos en el fondo. Después de que llegan a la recepción, Alex paga para que tengan dos juegos, antes de darle a la persona su número de zapatos.

Aquí están tus zapatos. Dice la persona en la recepción, entregándole a Alex sus zapatos de bolos.

"Gracias." Alex le devuelve la sonrisa, tomando los zapatos.

"¿Qué talla de zapatos necesita su hija?" La persona en la recepción le pregunta a Alex.

"Oh... uhh... ella no es mi hija". Alex dice, con un poco de voz nerviosa.

"Oh, mis disculpas". Dice el recepcionista.

Luego, Alex mira a Lori y se da cuenta de que no tiene idea del tamaño de los zapatos de Lori.

"Uhhh... ¿sabes cuál es tu talla de zapatos?" —pregunta Alex—.

"No." Lori responde, sacudiendo la cabeza.

"Bueno." Alex asiente y luego se agacha: "Déjame quitarte uno de tus zapatos, así puedo ver el tamaño y verificar".

"Bueno." Lori dice.

Luego, Alex desabrocha uno de los zapatos de Lori y lee el tamaño, antes de levantarse para mirar a la persona en la recepción nuevamente.

"Uhhh..... sus zapatos aquí dicen que tiene 13 y medio. Así que.... lo que creas que sea mejor para ella? Dice Alex.

La persona en la recepción asiente con la cabeza y luego se da la vuelta para recuperar algunos zapatos para Lori, antes de volver a colocarlos sobre el escritorio.

"Puedes probar estos". La persona en la recepción dice: "Los zapatos de boliche tienden a ser un poco grandes, así que estos son para una niña de 13 años, así que espero que le queden bien".

UNA NIÑA LLAMADA LORYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora