Agradecimientos especiales a Gimme de Sam Smith, I Wanna be Yours de Artic Monkeys, Love de Monsta X y Lavander Haze de Taylor Swift por la facilidad con la que salió este capítulo.
Este capítulo contiene escenas sexuales y exceso de azúcar.
Cayó la medianoche en la villa mientras los amantes se abrazan bajo las sábanas. Mingyu se toma el atrevimiento de acariciar a su pareja en su lugar más sensible bajo su cintura al mismo tiempo en el que besa y chupetea su cuello como el dulce que más necesita. Wonwoo es su chute de energía, la razón por la que sonríe cada mañana a la hora de despertar, el único capaz de calmar su ansiedad cuando se presenta en el peor momento... Wonwoo se ha convertido en su todo en poco tiempo y no quiere perder esa sensación.
Wonwoo arquea su espalda hacia atrás para que Mingyu explore más. Llega al borde de su trasero, a la entrada de su paraíso, palpando y disfrutando de los suspiros entrecortados que le saca a Wonwoo. El pelinegro se gira y atrapa los labios contrarios en un beso ardiente que corta su respiración. Besarse es como tocar fuego y quemarse lentamente pero, le encanta que ese deseo caliente le queme y le recorra por todo el cuerpo.
Mingyu sabe que esa noche empujará un poco mas sus propios límites. Quiere sumergirse en el cuerpo de su amante suavemente y llevarlos hasta el otro extremo. Wonwoo sabe sus intenciones y lo guía paso por paso hasta que el moreno decide bajar el mismo hacia su entrada y probarle. Es su primera vez haciendo esto pero lo domina. Lame e introduce su lengua relajando a un Wonwoo que se arquea y se abre como la más preciosa flor. Duda mucho poder contenerse con Mingyu y su lengua y sus dedos yendo tan profudo en su interior. El moreno tiene dos dedos jugando con él, girándolos hasta encontrar su dulce lugar. Y lo encuentra al tercer intento y con tres dedos en su interior. Wonwoo grita de placer sin poder contenerse con la piel sudorosa y la respiración entrecortada. El nombre de su amante de piel canela sale como una plegaria a toda voz y el moreno entiende que es hora de saltarse el resto de los pasos.
Las pupilas de Wonwoo están dilatadas, su cuerpo está húmedo y su entrada reluce por la saliva invitando a Mingyu a enterrarse con todas sus fuerzas. Ecuentra el condón en el borde de la mesita y se lo pone con cuidado. Es un momento especial para ambos y, aún más para él. Se va a entregar al pelinegro de ojos gatunos en cuerpo y alma. Manos entrelazadas y alientos compartidos con las piernas de Wonwoo en su cintura, Mingyu reclama el cuerpo de Wonwoo para él. Gimen al mismo tiempo y se besan. El moreno va lento tratando de acostumbrarse a lo apretado que está Wonwoo a su alrededor y lo bien que se siente ese calor. Comienza entonces un baile sensual entre ambos con los gemidos como música de fondo. Wonwoo no puede evitar morder el labio de Mingyu pidiendo que acelere el ritmo, que lo bese, que lo muerda. Es imposible sentir a alguien en todas partes al mismo tiempo, sin embargo, con Mingyu es así. El moreno aprieta la frente con la suya compartiendo suspiros y acelera sus embestidas.
Certero contra el punto de Wonwoo que lo hace gritar desesperado sin dejar de mirarle a los ojos. El placer se construye en la base de su cuerpo y siente que le falta poco para dejarlos caer por el barranco del intenso placer. En pocos minutos el pelinegro grita su nombre y se derrama entre ambos, mientras Mingyu se deja ir al mismo tiempo. Alarga el placer de ambos un poco y se deja caer sin aliento encima de su amante tratando de que el aire llegue a sus pulmones como debe. La piel de la espalda le arde, su cuello está lleno de mordidas y Wonwoo tiene una sonrisa satsifecha. Mingyu se retira de su nueva casa y después de sacarse el condón y lanzarlo por alguna parte de la habitación toma el cuerpo sudado de Wonwoo entre sus brazos. Deja cortos besos en frente y su cuello hasta que llega a sus labios y se sumerge en ellos más tiempo.
- Hey – susurra el pelinegro en sus labios – Toalla.
Mingyu asiente y va al baño. Toma una de las toallas pulcras y la humedece para limpiar su obra de arte encima de Wonwoo suavemente para no causarle daño.
- Creo que no voy a poder caminar mañana – dice Wonwoo tomando la mano del moreno y echándolo encima suyo otra vez – Me rompiste.
- ¿Será? - lanza la toalla al suelo y se sube al lado de Wonwoo en la cama - ¿Cómo te sientes?
- Déjame pensar – sonríe acercándose peligrosamente a los labios del moreno que se deja hacer. Le gusta verle travieso, descubriendole como páginas de un libro sexy de romance como los que suelen leer juntos.
- Quiero quedarme así por el resto de mi vida – pone la mano de su novio encima de su corazón para que sienta como sus latidos corren por esa mirada azabache – Quiero tantas cosas contigo que no sé si las aceptes.
- Si incluyen que me toques y me beses y me hagas tuyo todo el maldito tiempo como hace un rato, siéntete libre de decirme.
- Ay cariño – lo besa sin dar pie a más – Eres mío hasta que desees irte.
- ¿Y si eso nunca pasa?
- Entonces nunca te irás.
Afuera, la luna era testigo de aquella hermosa declaración. Wonwoo era suyo hasta que la vida interrumpiese su momento o hasta que la realidad decidiera romper la hermosa burbuja color lavanda a su alrededor. Durmieron acurrucados como cada noche y se despertaron en la misma posición. Hicieron su rutina diaria bañándose juntos y tocándose un poco más en la ducha. Decir que se habían vueltos adictos al toque contrario era contar poco. Roces en la habitación, besos en la ducha, y abrazos por la espalda ya eran tema diario.
Mingyu aseguraba que nadie podía decirle como viviría su romance y Wonwoo se sentía obsesivamente enamorado. El mundo podía irse a la mierda siempre que se encontrasen a la medianoche para regar su amor y su pasión por las paredes de su habitación.
Excepto que olvidaron que no estaban solos en la casa.
¿Me creerían si les dijera que en 6 horas escribí cuatro capítulos de esto y que ya tengo idea de quién es el villano y como debuta?
Ni yo misma se cómo se hace. Pero les aseguro que es así. Si sigo con esta racha creo terminar rápido.
ESTÁS LEYENDO
Llámalo Como Quieras: Meanie Version (Finished)
Fanfiction"Llámalo como quieras pero ese hombre fue mi salvación" La primavera llegó justo cuando el mundo le dió la espalda por ser honesto, y solo una persona convirtió sus brazos en el oasis en el medio del desierto que necesitaba. Kim Mingyu era la prome...