El encuentro (Steddie y Ronance)

Confesión.

Steve se levantó de la cama, su primer pensamiento al despertarse fue Eddie, hoy se verían, sin pelearse, estaba feliz. Se bañó, vistió y arregló, se subió a su auto y pasó por Dustin, para luego conducir en dirección al parque.

Estaba en el parque con Dustin, ya llevaban un buen rato ahí, los esperaron minutos, esos minutos se convirtieron en una hora, esa hora se convirtió en tres. Eddie no vendría.

Mientras tanto Steve y Dustin habían estado conversando y Steve le había contado un poco sobre los problemas que tenían él y Eddie, Dustin trató de aconsejarlo, mas no pudo porque nunca había tenido un problema como el que tenían Eddie y Steve.

-Oye Henderson, parece que Eddie no vendrá.-dijo con tristeza.-¿Te parece si te voy a dejar a tu casa?-preguntó Steve.

-¿Y si esperamos un poco más? Eddie normalmente se despierta tarde.-explico el niño.

-Bueno.. Solo un rato.-

Luego de ya haber esperado otra hora se convencieron de que Eddie no vendría y ambos se fueran a sus casas.

Steve al llegar a su casa dejó salir el enojo que había estado guardando por el día. Luego de un rato de estar enojandose y pateando cosas que no tenían la culpa de nada, decidió llamar a Robin, si, le había contado que se juntaría con Eddie y Dustin. Y como su amiga era una chismosa, seguro le interesaría saber que pasó en la salida.

Llamó a casa de Robin esperando escucharla, pero en cambio escuchó otra voz.

-¿Aló? ¿Robin?-dijo Steve esperando respuesta de su amiga.

-No, ella no está, ¿quién habla?-dijo una voz masculina al otro lado del teléfono.

-Aah... Soy Steve, un-Steve fue interrumpido.

-¿Steve? Ese es nombre de hombre... ¡Querida nuestra Robin por fin tiene novio!-dijo la voz al otro lado del teléfono, a este punto Steve ya sospechaba que era el padre de Robin. Y al parecer si, pues Robin no había salido del closet con sus padres.-Un gusto Steve, yo soy el padre de Robin, ¡me alegra por fin conocer al novio de mi pequeña! Ya decía yo que andaba muy distraída y hasta podría decir enamorada, tal parece que tu eres la razón de ese comportamiento. Lamento decirte otra vez que Robin no está, se encuentra en casa de su amiguita, ¿Como es que se llama? Creo que Nancy, en fin espero que pronto Robin te traiga a la casa para poder conocernos en persona, ¡Adiós!-dijo para luego colgar el teléfono.

Mierda. ¿En qué había metido a Robin? Se golpeó levemente en la frente y decidió subir a recostarse en su cama, llamaría a Robin después, pasó unos minutos mirando el techo, y cuando estaba a punto de quedarse dormido, pudo escuchar el infernal y tortuoso sonido del teléfono fijo.

-Dios, ¿Quién es ahora?-se quejó levantándose con pereza de la cama, caminó y fue directo al teléfono fijo. Atendió y recibió un montón de gritos desesperados de Robin.

-¡¡Steve, ¿qué se supone que les dijiste a mis padres? Ahora creen que tengo novio y quieren que te lleven a la casa y probablemente descubran todo por lo que me he esforzado por ocultar por años!! ¡¡Dios Steve, estoy tan asustada, ¿Qué se supone que les diré? ¿Que en verdad no tengo novio y tengo novia? ¡Ay, no, eso tu lo sabías! ¡¡Claro que no les diré eso!! ¡Seguro que me sacan de la casa!-gritaba desesperada al otro lado del teléfono.

-Robin, Robin, cálmate encontraremos una solución para esto, ¿está bien?-dijo Steve tratando de tranquilizar a su amiga.-Oye, por cierto, que piensa Nancy de todo esto, ¿Le dijiste algo?-pregunta Steve.

-¡Ese es el tema, Steve! ¡Ella respondió la llamada de mis padres y ahora cree que la engañó, y para colmo contigo! ¡Ay no! ¡Se debe de sentir fatal! ¡Debería de ir a buscarla!-exclama Robin para luego colgar e ir corriendo tras Nancy, quien había salido de la casa.