Alternate Worlds [Shots Taekook]

3) ¿Me permite esta pieza?

Jungkook: 18
TaeHyung: 20

Se mira en el espejo y suspira una vez más.

Su traje negro con corset que hace resaltar su cintura, las joyas en su cuello y manos, el ligero maquillaje en sus párpados y labios, junto con la pequeña tiara de diamantes en su cabeza lo hacen sentir bonito.

Se sonríe a si mismo frente al espejo de oro y se acomoda una última vez la tiara en su cabeza para que esté en su lugar correcto. Sus rizos negros que bajo la luz tenían un destello azul le encantaban.

Si, sin duda se sentía muy bonito.

Unos golpes en la puerta lo sobresaltaron.

"Alteza, sus padres lo requieren en el piso principal." dijo un guardia detrás de la enorme puerta de su habitación.

"E-Enseguida voy..." dice lo suficientemente alto para que el hombre del otro lado lo escuche, recibe una afirmación.

Sabe que el guardia lo está esperando para escoltarlo al piso principal, así que se da un retoque a sus labios para hacerlos ver más brillosos y rosados que antes y sale de sus aposentos.

El guardia lo espera del otro lado, él empieza a caminar, sus pasos se escuchaban como eco en los solitarios y enormes pasillos del palacio, cada cinco metros un guardia custodiando.

Antes de pasar al piso principal se detiene unos segundos para enderezarse y soltar todo el aire que retenía en el pecho.

No sabe porque se lo está tomando tan en serio cuando sabe que es un simple baile para buscar pareja a los hijos del rey, un baile para emparejarlos con hijos de otros reyes.

No debería de estar nervioso cuando sabe que todos lo van a ignorar como siempre, cómo en cada baile desde que tiene memoria.

Ser el hijo menor en la familia real no era tan divertido. Siempre ignorado hasta por sus propios padres.

Toda la atención se iba siempre a su hermana mayor, JiEun. Ella era la hija perfecta, futura reina, hermosa, elegante, con porte, una buena mujer, educada e inteligente.

Él quedaba de lado cuando estaba junto a ella, no era más que su sombra, JiEun siempre se llevó todo lo bueno desde que él tiene memoria. Él no era más que el otro hijo del rey, un chico inservible.

Todo siempre para la futura reina.

Y sabía que las personas que asistían a este baile real de cortejo no era para verlo a él y pedir su mano en matrimonio, sino para pedir la de su hermana, siendo el segundo reino más poderoso del mundo todos querían tener este poder.

Llegó al primer piso, ya habían algunos reyes, príncipes y duques en el lugar, así que fue de inmediato a los cuatro tronos de oro, el del centro siendo el más grande, dónde JiEun se encontraba sentada, los dos del otro lado eran casi tan grandes como el de ella, dónde los reyes estaban sentados con sus enormes coronas llenas de joyas.

Y el último trono siendo el más pequeño, dónde debería de ir él.

Al ver a su hermana, su cabello tan negro como la noche perfectamente peinado, dejando sus rizos caer sobre sus hombros, la corona en su cabeza más grande de diamantes y ese precioso vestido morado pálido que la hacían verse hermosa, dejó de sentirse tan bonito como hace unos minutos.

Nunca iba a ser tan bonito como ella.

Tenía la atención de todas las personas sobre ella, los nobles, duques, príncipes y reyes jóvenes se acercaban a ella, le hacían una reverencia mientras besaban su mano.

Él se sentó en su lugar, nadie se dió cuenta de que él había llegado por fin. Tan solo se quedó ahí en silencio, viendo a los elegantes hombres halagar la belleza de su hermana mayor.