Sergio sonrió y asintió con la cabeza. "Eso es correcto. Sabiendo que la señorita Vanderbilt había regresado a Vaenna Jewelry, esperaba tener la oportunidad de colaborar, con usted, específicamente".
Willow se burló de él.
Sergio Baldwin tenía 49 años y cumpliría los 50 años pronto. El hijo que tuvo con su exmujer acababa de cumplir 18 años. Se rumorea que nunca aprendió a guardarlo en sus pantalones y que tenía demasiadas mujeres a un lado. Eventualmente, su exesposa se había enterado y pidió el divorcio.Sergio había conocido a Maisie durante el banquete de cumpleaños de Stephen hace unos años, y desde entonces, no ha podido sacarla de su mente. Incluso le preguntaba a Willow sobre ella de vez en cuando. Debido a eso, Willow hizo que Maisie se drogara la última vez solo para darle al Sr. Baldwin la oportunidad de tenerla. Fue una pena que dejara pasar esa oportunidad.
"¿Por mí?" Maisie ríe. "Sr. Baldwin, escucharle decir eso me halaga".
"Zee, el Sr. Baldwin admira tu talento", explicó Willow mientras le servía al Sr. Baldwin una copa de vino y luego se la pasó. "Sr. Baldwin, por su generosidad de proporcionar a Vaenna una plataforma publicitaria e invertir en la empresa, como directora de Vaenna, me gustaría brindar por usted".
"Bueno, cuando lo pones así, ¡salud!" El Sr. Baldwin se sentía festivo. De tomó toda la copa de vino en un suspiro.
Willow miró a Maisie. "Zee, sé que no bebes, así que pedí un zumo para ti en su lugar". Sosteniendo los dos vasos de jugo, entregó el de su derecha a Maisie.
El señor Baldwin había preparado los jugos y le dijo específicamente que el vaso de la izquierda estaba "limpio". Maisie tomó el jugo de la mano de Willow y levantó el vaso contra sus labios, inclinándolo suavemente hacia abajo. Pero antes de que el jugo le tocara los labios, una ola de náuseas de repente la atacó y casi vomita. Sergio y Willow estaban sorprendidos por su reacción.
Maisie se dio palmadas en el pecho, puso el jugo en la mesa, sonrió y dijo: "Lo siento, no he comido todavía y mi estómago está algo delicado. ¿No les importa si pedimos algo para comer?.
Sergio se sorprendió por un momento, luego asintió con la cabeza comprensivo. "Claro, sin problemas. Willow llama a la camarera.
A Willow le irritó se mandada, pero ella lo retuvo. Obedientemente, ella fue a llamar a la camarera.
Maisie miró a Sergio. "Sr. Baldwin, ¿podría elegir una canción para mí? ¿Qué tal Sweet Dreams?
"Claro, como quieras".
Después de todo el cordero estaba en la guarida del león. No había manera de que ella pudiera escapar. Cuando el Sr. Baldwin se levantó a la máquina de karaoke, Maisie cambió rápidamente su jugo con el de Willow.
Segundos después que ella intercambió las bebidas, Willow entró.
Cuando Willow vio a Maisie dando sorbos del jugo, sus ojos se iluminaron con triunfo.
"Zee, he ordenado algo de comer para ti. ¿Por qué no te tomas el jugo después de comer?, después de todo, una bebida fría en un estómago vacío es malo para ti." Maisie puso el vaso en la mesa y dijo. "Claro"
Una hora más tarde, sus vasos estaban vacíos, y casi habían terminado de comer.
El teléfono de Maisie sonó de repente. Se paró con el teléfono en la mano. "Disculpen, tengo que atender esta llamada fuera, vuelvo en unos minutos."
Willow vio a Maisie irse y se puso de pie para seguirla. Sin embargo, Sergio la tiró hacia él. "¿A dónde crees que vas?"
"No puedo dejar que se escape".
"Ella bebió el jugo. ¿A dónde podría huir? Además, incluso si ella se va, todavía te tengo a ti , ¿verdad? Sergio Baldwin la miró y dejó salir una risa siniestra.
Después de haber terminado su propio vaso de jugo, la estupefacta Willow dio la vuelta a su cabeza "¿Tú...? ¿Qué se supone que significa eso?"
"¿Crees que soy un idiota? Obviamente, puse droga en las dos bebidas. En caso de que ella corra, te tendré a ti para compensarlo". Sergio la metió en sus brazos.
Willow luchó con todas sus fuerzas. "¡No sabes que estoy con Nolan Goldmann!"
"¿Y qué? Nolan nunca se va a casar con una hija bastarda como tú. Además, no es como si nunca nos hubieramos acostado juntos. Cuando viniste a mí pidiendo dinero en ese entonces, ¿no pasaste la noche conmigo?
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Los tres pequeños ángeles guardianes
RomanceEn una conspiración despiadada, Maisie Vanderbilt perdió su virginidad y se vio obligada a mudarse de su casa. Seis años más tarde, regresó al país con tres pequeños rugrats acompañándola, listos para vengarse. Para su sorpresa, sus adorables ángele...