Enamorada de mi Abogada (SuperCorp)

Capítulo 8: Secretos

En aquella habitación se hallaban 3 personas, la reunión había llegado estando presente el juez, la abogada y su cliente. Las preguntas no se hicieron de esperar.

"Dígame señora Danvers ¿Cómo se comportó su esposo cuando estaban casados? ¿Alguna vez le alzó la mano?"

"Nunca me golpeó, sin embargo me fue infiel desde antes del matrimonio". Respondió de manera seria sorprendiendo al juez y a Lena.

Se sabe que para tratar un caso el abogado debe de estar al tanto de todo sin embargo ese pequeño detalle de la infidelidad antes del matrimonio olvidó ser contado.

"Bien". Habló el Juez aún sorprendido. "Tengo entendido que tuvo una hija con él, que actualmente tiene 5 años ¿cierto?"

"Correcto".

"Tengo en mi poder fotos de su hija donde se evidencia que fue golpeada". El juez sacó las fotos que les fue entregada por la abogada y las mostró. "¿Fue su ex esposo quien la golpeó?".

"No, lo hizo su pareja".

"¿Podría darme su nombre y contarme todo lo que sabe de ellos?". Las fotos fueron guardadas y le dio el permiso de hablar a la omega quien seguía sin expresión en el rostro.

"Iris West, era la secretaria de mi ex pareja, se presentó en la boda que tuvimos como invitada de mi esposo. Tengo entendido que desde ese año ellos mantenían una relación". Con la mirada perdida tomó algo de aire para continuar con su narración. "¿Cómo lo descubrí?, los vi a ambos en una cafetería besándose cuando se lo dije admitió todo. Días después se llevó a mi hija para que viviera con ellos cuando fui a verla para tratar de arreglar las cosas y llegar a un acuerdo sin llegar a esto vi a Iris levantarle la mano a mi hija".

"Tomaré en cuenta todo lo que me está diciendo, necesitaré hablar con ellos también, eso es todo". Los tres presentes se despidieron entre sí.

Lena salió detrás de Kara quién ahora se veía preocupada, tocó el hombro de la rubia con una de sus manos obteniendo por completo su atención. 

"No debes preocuparte, el juez J'onn es el más honesto aunque quieran sobornarlo no lo lograrán, es más sumarán soborno y lo condenarán un tiempo en prisión".

La tranquilidad que le transmitía la sonrisa que la alfa le mostró era simplemente hermosa, su loba se sentía en calma aún preocupada por el estado de su cachorra. 

"Gracias, por todo". Respondió la omega con una sonrisa.

Ambas pidieron un taxi y fueron a la casa de la omega, la alfa fue invitada a almorzar y a quedarse conversando como últimamente lo estaban haciendo logrando entablar una confianza especial que poco a poco se iba profundizando.

Una bonita amistad había surgido entre ellas dos una amistad que probablemente terminaría en una relación soñada por ambos lobos siendo ignorados por sus humanos.

"Gracias por todo Kara pero ya tengo que irme". Habló la pelinegra con una sonrisa.

"No creo que sea buena idea". La lluvia comenzó a verse por la ventana cuando la omega se asomó a ella. "Deberías quedarte".

"No quiero molestarte".

"No lo haces, te prestaré algo de ropa dormirás en mi habitación".

"¿Con ella? ¿Vamos a dormir con ella? Estoy más feliz que antes". Al lobo de la alfa no le desagradó para nada la idea.

"Está bien".

La omega mostró una sonrisa al ver que la alfa no se opuso ante la idea, fue a la habitación en la cual se encontraba una cama matrimonial. Fue hacia su armario y sacó una pijama algo grande y se la dio a Lena.

Lena salió del baño cambiada viendo a la omega acostada cómodamente en la cama con los ojos cerrados, tomó asiento del otro lado y se quitó el anillo, giró a ver a la rubia, era una escena hermosa para ella y su lobo.

Tomó la colcha y la tapó copiando el mismo acto, se acostó en la cama viendo hacia Kara. "Buenas noches". Susurró y cerró los ojos tratando de dormir y seamos sinceros el abrazo que la omega le estaba dando ahora le ayudó a conciliar el sueño.
 
 
 
 
 
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