Dónde Missa está resignado a no tener un equipo y permanecer solo sin querer termina siendo el favorito del chico más peligroso.
O donde Spreen no puede creer que una persona como Missa exista en ese mundo lleno de mierda y está dispuesto a hacerle...
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My days and nights are filled with disappointment I've been so good, why am I feeling empty? I've been so good but, It's still getting harder I've been so good, where the hell is the karma? I've been so good, still, I'm lonely and stressed out
Cuando abrió los ojos, no podía ver mucho, la oscuridad en aquel lugar le hizo sentir miedo, lo último que recordaba era estar en una habitación y el sonido de un teléfono...algo se había acercado a él y después oscuridad.
No había nada más, hasta ese momento en el que despertó ahí.
Se sentó, mientras sus ojos vagaban por los alrededores observando cada detalle que la oscuridad le permitía, otras personas también comenzaban a despertar, ¿Estarían sus amigos por ahí? Esperaba que sí, no quería estar solo, no parecía que todas las personas fueran amables y tranquilas.
-¿¡Hola!? -se escuchó. Missa abrió los ojos al reconocer esa voz. Reborn.
-¡Reborn! -chilló, antes de poder si quiera pensarlo y se levantó torpemente para ir hacia la voz.
El mayor lo observó llegar y Missa no dudo en aferrarse a él. Tembló al sentir que un peso se iba de sus hombros. Conocía a alguien que estaba ahí, eso serviría para mantenerlo cuerdo.
-¿Estás bien Missa? -preguntó el de traje.
Missa asintió.
-Estoy bien papá Reborn. -dijo en un susurro.
El mayor se tensó cuando aquellas dos últimas palabras salieron, Missa temió que lo apartará, pero el trajeado no lo hizo, solo lo acercó un poco más a él, y Missa se dejó proteger.
-¿Sabes por qué estamos aquí? -cuestionó Missa. Reborn negó mientras miraba alrededor.
-No. No lo sé...
-Pero...--se vio interrumpido por una voz.
-Bienvenidos, jugadores...tal vez os estéis preguntando qué hacéis aquí...tengo la respuesta a vuestra pregunta...estáis aquí para sobrevivir, o intentar hacerlo, bienvenidos a Minecraft Extremo...esta es vuestra oportunidad de vivir.
Missa dejo de escuchar.
Algo en él había comenzado a doler, su cuerpo comenzó a arder, como si estuviera recordando algo que el no.
Fingió lo mejor que pudo que estaba escuchando. Pero, esa horrible sensación estaba nublando sus sentidos.
Quería correr, salir de esa oscuridad lo más pronto posible. ¡No quería participar en lo que sea que se trate este lugar!
Solo quiere vivir tranquilo, feliz, hacer una casa, una pequeña choza y cantar mientras toca la guitarra.
