P.D.V Charlotte.
¿Qué me está pasando?...
—¿Charlotte te encuentras bien?— salí de mis pensamientos al escuchar a Rosalie.
—De maravilla... ¿Dónde me que de? A sí mi maravilloso matrimonio que no duró mucho la verdad, unos tres meses, ah~ el tiempo pasada tan lento— reí sin gracia y dirijo mi mirada a Benjamín evitando las miradas de lastimas de los demás, me perdí en sus ojos unos momentos buscando fuerza y tranquila, cosa que él me ofreció gustoso ante su mirada carmesí.
Éso era tan extraño... Odiaba depender de los demás o sentirme débil ante alguien, incluso cuando estaba en mi relación con Edward no me permitía mostrar mis debilidades he inseguridades, aunque el ya las conocía, por miedo de que con el tiempo dependiera tanto de él y terminará herida, cosa que pasó de la peor manera...
—Lo siento— lo escuché decir y fruncí el ceño y lo volteó a ver, sal de mi cabeza si no quieres ver las consecuencias, amenacé con frialdad sin importarme la mirada de lastima y culpa que me dedicaba.
—Resulta que mi “querido” esposo no era tan rico como lo hacía parecer, había tomado prestado a personas para nada buenas para poder comprarme, y mi madrastra como era tan codiciosa pidió una gran cantidad de dinero por mí... Al momento de que ésas personas fueron a cobrar su dinero él idiota de mi marido me ofreció a mi a cambió de su vida...
»Claro que aún así lo mataron, pero me hubiera gustado arrancarle la cabeza yo misma... Me hicieron cosas en contra de mi voluntad y cuando ya no pude más escape, aunque sin nada de éxito pelié con todas mis fuerzas pero solo era una adolescente de dieciséis años así que no logré mucho, me golpearon hasta dejarme gravemente herida para después dejarme tirada en un sucio callejón«
Se escuchó un lloriqueo y todos volteamos hacía la pequeña niña la cuál se aferrada a su madre, a veces me apenada; a veces no siempre, ser tan fría en situación en las que las personas necesitan consolación, pero el tacto y la sutileza no entraba en la lista de mi perfecta personalidad.
—Te advertí que no era un cuanto pará niños, Pero no te preocupes niña hay viene la mejor parte para mi y la fastidiosa pará tu madre— dije divertida ganando algunas miradas de reproché, levanté los hombros y colocó mi atención en el apuesto vampiro.
—Ah~ solo espero que no mueras, sería un desperdició no poder probarte— dije con picardía logrando que apartará la mirada nervioso, reí a carcajadas e ignore las miradas hacía mí persona, no podía culparlos era imposible que no llamará tanto la atención.
—¿Podrías por favor continuar? Ésto se está volviendo un poco incómodo— dijo... Creo que se llamada Eleazar.
—Oh claro mil disculpas, bueno ya llega la mejor parte de la historia... Para algunos, mi padre solía decir que el tiempo siempre está de mi lado, algo que al principio pensé que era ridículo, pero supe que era verdad en el momento que estaba a punto de desmayarme en aquel callejón lista para perder la vida, y justo a tiempo llegó mi querida Esme, fué lo último que supe antes de perder el conocimiento.
»Cuando desperté ya no sentía dolor o cansancio, pero si una sed inexplicable y no de precisamente de agua, cuando me levanté de dónde sea que estaba recostado me encontré con tres personas observar me fijamente. Lo recuerdo cómo si fuera sido ayer— dije y sonríe ante el recuerdo.
—Resultaba que la pareja Cullen y su hijo estaban de viaje por Paris, Carlisle me contó que Esme cumplía un mes de ser convertida que podría decirse que aún estaba en proceso de adaptación, por lo que ella y yo creamos una conexión de madre y hija de inmediato— dije y miré a Eme con cariño, ella me la devolvió y ambas sonreímos.
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•°| Time with you |°• ~Benjamin~
VampiroLos Cullen buscan testigos para hacer razonar a los Vulturis, y a esos testigos de les unirá Charlotte una vampira con un gran don.