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4:00 pm - Qatar
—¿te gusta? —
— que no! —
— que si—
Nos encontrábamos en las gradas, de la cancha de entrenamiento, Diego que quería ver el entrenamiento de la selección de Portugal
— entonces por qué no te quejaste del beso en la mejilla? —
— tal vez sea su manera de despedirse, deja de romperme las pelotas Hirving —
Susurré enojado mientras veía el entrenamiento del equipo contrario y mirando de reojo a las tres personas que se encontraban a varios asientos delante de mi
— no entiendo por qué lo sigues espiando si se nota perfectamente que él quiere contigo kevin —
— Hirving no empieces —
Le dije fingiendo que no me encontraba molesto, pero la imagen que estaba delante de mí no ayudaba a que de verdad lo este
Gavi desde hace unos dos días, en el partido de argentina que nos reunimos todos, trajo a un amigo con el
Alejandro Garnacho
Una sensación no se me ha quitado, no sé el por qué, me da algo raro de verlos tan juntos
— si sigues así tu olor va a inundar todo el estadio —
No sé lo que sea, pero es la primera vez que me pasa o que al menos recuerde
— Hirving recuérdame el ¿por qué estamos aquí y no en el hotel descansando para el partido de mañana? —
— por qué Diego se aferra a su ex el cual también está aferrado a él, tal para cual —
— ¿Joao? ¿Que no Diego lo termino por qué no lo dejaba que hablara con nosotros? —
— ni yo sé por qué le gusta hacerse tanto daño con un imbécil como el —
— ¿tanto te ciega el amor? —
Suspire del aburrimiento, estar sentado no es una de las actividades que más me gusten y menos en un lugar tan caluroso como lo es Qatar
— como sea, oye y cómo vas con la marca del dedo —
— pues durante el entrenamiento me ardía, creí que las pastillas no habían hecho su efecto, pero después se me olvidó y ahora solo queda la marca —
Recorrí mi playera y extendí mi mano para que examinara la marca del dedo anular, una carcajada me hizo voltear instantáneamente
La vista que tenía no fue agradable, ver cómo Gavi reía mientras se recargaba en el pecho del otro chico y como ambos no les incomodaba estar demasiado juntos me hizo querer irme de ese lugar, mientras sentía que me faltaba el aire por la presión el pecho