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No importa en que rincón estuviéramos o que los olores de los demás fueran más intensos o deliciosos
Su olor era incomparable, embriagándome de él queriendo que el momento se quede así, era más profundo y ahogador que la vez pasada
Lo que me daba indicios de que estaba borracho, sus labios me lo confirmaron
Indeciso de si apartarlo de mi o seguir su juego teniendo en la conciencia que él no es consciente de todo lo que hace, era algo tortuoso por qué ponía en juego a mi corazón y sentimientos en contra de mis impulsos y "naturaleza"
Sus labios se separaron de los míos solo para volver tomar oxígeno y volver a devorar los míos, con más calma y no tan desesperados como hace unos momentos atrás, quería disfrutar, pero lo único que pude hacer es estar estático
No por la persona, si no por el momento y la condición en la que estaba, pose una mano en su mejilla para separarlo de mí, con educación le dije
— Gavi estás borracho, lo mejor sería que dejes de tomar y llevarte fuera de aqui —
Recibo una queja de parte del español, junto con unos murmullos inaudibles por todo el ruido
Ayudándolo a caminar, por miedo a que se cayera pero para mí sorpresa este podía caminar a la perfección
O bueno eso hasta que salimos del lugar, tambaleó casi cayéndose, lo cual se me hizo raros
— podrías cargarme... por favor —
Acepte de todas formas el hotel no queda tan lejos y a estas horas no hay casi nadie afuera
Tan pronto como lo cargue, él se acurrucó en mi pecho, lo cual me dio una alegría inexplicable
Camine hasta llegar a su cuarto, dónde le pedí las llaves, pero no entendí si las dejo a dentro o si se las dio a su amigo
— y si te quedas en mi cuarto en los que se te baja, digo si tú quieres, si no veo como le hago, pero le marcamos a alguien del hotel o a tu amigo—
Este solo asintió, suspire un poco por lo rojo que me estaba poniendo de la vergüenza, rezando que ninguno de mis padres entre a mi cuarto o esté en mi cuarto sin aviso y piensen cosas que no son
¿Me gusta Gavi? Esa misma pregunta se planteaba mi corazón cada noche
Por qué me ponía muy nervioso cuando se trataba de el
Lo recosté en la cama de Hirving, la mía estaba con poco espacio por culpa del ya mencionado, que literal puso toda mi ropa en esta con el fin de buscar un conjunto mejor de lo que tenía planeado usar
Para mí suertes Gavi ya se encontraba dormido, me senté en la cama al lado de el para cuidarlo, con el miedo de que no se fuera a ahogar por el alcohol, no sé cuánto tomo o cuánto de resistencia tenga, pero era mejor prevenir a lamentar
Después de unas horas su aroma se sentía cálido y tranquilo, sintiéndome con la libertad de dejarlo ahí, con el plan de dejarlo dormir tranquilo, pero sentí unas manos aferrarse a mi camisa
Fue ahí donde un adormilado Gavi, me miró con esos ojos de súplica, su aroma se volvió más dulce y menos aprisionador que en antro
— puedes dormir junto a mi Kevin —
Se le escuchaba sobrio, por lo que accedí, con un poco de inseguridad
Mientras me acostaba al lado de él, mi mente se repetía lo mismo
¿Me gustas, Gavi?
Inesperadamente, sentí un pequeño peso en mi pecho y unos brazos que me rodeaban la cintura...
Me tense al tenerlo tan cerca, mis hormonas me delataban al intensificarse el olor, pero las del extrañamente me tranquilizaban, casi como si me dijeran que no me preocupe y que disfrute
Aun así, eran más grande mi vergüenza y pánico que solo cerré mis ojos para dormir
Mirándolo de vez en cuando de reojo, teniendo de vista la expresión de tranquilidad de Gavi o para tranquilizarlo por los bruscos movimiento que hacía por aparentes pesadillas que estaba teniendo
Teniendo que tragarme mi vergüenza y abrazarlo, no me agradaba verlo en ese estado, en un futuro quisiera preguntarle por qué o que pesadillas tiene
Su agarre al principio fue muy fuerte hacia mí, pero conforme soltaba mis hormonas, se iba tranquilizado, fue ahí donde voltee a verlo, dormido en mis brazos
¿Me gustas?
Si respiración tranquila y una expresión relajada, así como un aroma más refrescante, mirando como sus pómulos conservan un poco ese tinte de color rodado
Si, si me gustas
No había notado antes, que sus labios estaban mas rojos que de lo común, como las cerezas, le sentaba muy bien el rojo,
desde antes
Cambie la dirección de mi mirada, hacia sus ojos, los cuales me ponían nervioso cuando me veían o cuando por accidente chocábamos miradas, ahora solo podía visualizar esas largas pestañas, ligeramente onduladas
pero ahora es más real
Sin que me mirara mi corazón parecía no detener ese ritmo, era todo tan irreal, tanto que, si mañana amaneciera solo, creería que realmente fue producto de mi mente
y sincero ese sentimiento
relamí mis labios mientras cerraba mis ojos, dejando caer lentamente mi cara mas cerca de su cabello, relajándome por el aroma tan singular a vino de naranja
Ya no platónico por el Golden boy
Tal y como lo esperaba, sabe a cereza, sonreí, una alegría inexplicable, que me hacia querer preguntarme si era normal, pero ahora solo quería descansar y no saber nada, solo disfrutar lo que mi corazón y mente me pedían