Scarlett Thompson esta a días de su cumpleaños número 15 y ella estaba emocionada ya que junto a su madre había planeado todo para hacer de ese día un momento único aunque no contaba con la sorpresa que le tenían preparada sus padres
¿Qué será?
Si...
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No podía creerlo, hoy era el día en que cumplía 15 años y la emoción me invadía desde que desperté. Siempre había imaginado este día, y lo que más me emocionaba era mi fiesta. Sabía que todos mis familiares vendrían, e incluso algunos de mis amigos. Pero antes de sumergirme en la celebración, tenía que comenzar el día de la mejor manera.
"Feliz cumpleaños", dijeron mis padres mientras entraban en mi habitación. Los abracé con fuerza y las lágrimas de emoción comenzaron a brotar. Siempre me ponía sentimental en mi cumpleaños, y no podía evitarlo. "Gracias a los dos, los quiero", les dije sinceramente.
Me vestí rápidamente y bajé a desayunar. Como era costumbre, mi madre había preparado un desayuno especial para mí. Me sentía increíble, pero al mismo tiempo, tenía un presentimiento en el fondo de mi ser. Era como si esto fuera la calma antes de la tormenta. Me senté al lado de mi hermana menor, quien me dio un cálido abrazo y me entregó un dibujo que había hecho. Era un retrato de mí junto a mis padres. No podía imaginar un mejor comienzo para este día tan especial.
"¡Aquí tiene su desayuno especial, hermosa cumpluañera!", dijo mi madre con una sonrisa. Agradecí emocionada y observé cómo mi padre sacaba su celular para tomar una foto. "¡Ahora todos sonrían!", exclamó.
Todo esto había sucedido y aún era solo el desayuno. Estaba ansiosa por ver mi fiesta y disfrutar de cada momento. Sabía que sería un día inolvidable y estaba lista para vivirlo al máximo.
