The Football Melody

12

Ángel de la guarda,

¿eres tú?

-No es asunto tuyo MALDITO, FUERA-

-Que ruidoso que eres-

Yo solo podía llorar, el coraje me engulló por completo. No me importaba que él estuviera presente. Que él me defendiera.

Rin me salvó

-Largo estúpido, y como me enteré que lo vuelves a molestar te mato-

Desde la pared me deslice al suelo encontrando la cruda realidad. Encontrando a Rin parado frente mío.

No paro de llorar y temblar y dudo poder levantarme para caminar hasta mi habitación.

-De nada-

¿Eh como que de nada? Yo no le pedí que me salvará, y ahora quiere que le dé las gracias por algo que no he pedido.

Eso le quiero decir pero mi cerebro no reacciona bien y menos mi cuerpo como yo quiero.

-No-

-¿No que?-

-N-no te pedí que m-me ayudarás-

Solo me miro, no me vio muy convencido de mis palabras.

-Y a mí me da igual lo que elijas- dicho eso me cargo a fuerza a mi habitación.

Temblaba mucho y su agarre era fuerte para que no me cayera, por más que pataleara no me soltaría.

-¡Rin suéltame!-

Ni caso, seguía caminando hasta mi cuarto.

-¡ITOSHI!- dios soy yo de nuevo, no creo mucho en ti pero te rezo a partir de ahora.

Me estampó en mi puerta, no me dejó tocar el suelo, me sostenía de las axilas y su mirada era de rabia.

-¿Que demonios te pasa?-

-Duele..- no comprendo nada, por lo menos relajo su fuerza aún sin soltarme -¿No entiendo de qué hablas Itoshi-

-No me llames así, ¿te recuerdo a Sae cierto?-

-No me metas en esto Rin- la confusión y los repentinos sentimientos me hacen llorar más

-Quiero hablar contigo- se relajó, su mirada seguía intensa con una clara decisión -¿Podemos, puedo pasar?-

-Snff, si es para hacer más daño, snff ni te molestes en entrar- entré a mi cuarto sobando con mis mangas mis ojos.

Me senté en mi cama sin mirar cómo entraba y se sentaba en la silla quedando frente a mi.

-Mirame-

-Snff-

-Tch, te gusta ser terco. Misaki mirame por favor-

Levante mi vista y mis ojos se encontraron con ese turquesa tan hermoso. Estaría mal decirlo pero ahora mismo pienso en Sae, si lo digo en alto seguro me mata.