Capítulo 3: Acuerdo

998 45 89
                                    

En la siguiente noche, Ataru se encontraba esperando con paciencia a Oyuki, pero ella nunca llegó, desanimando por completo al muchacho que se alistó para irse a dormir

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

En la siguiente noche, Ataru se encontraba esperando con paciencia a Oyuki, pero ella nunca llegó, desanimando por completo al muchacho que se alistó para irse a dormir. Él era bastante testarudo, por ende, tenía esperanza de que ella viniera en la madrugada. Pero para su sorpresa, Lum entró por su ventana, irritando por completo a nuestro protagonista.

—¿Me podrías decir de una vez por todas a que vienes? Para terminar con este acoso definitivamente —Preguntó con fastidio en su voz.

—Debo borrarte la memoria, sabes demasiado sobre mí —Respondió Lum con enfado por las palabras del chico.

—Estás loca si crees que podrás lograr ese objetivo —Exclamó alterado.

—No te estoy pidiendo permiso —Mencionó la oni decidida.

Lum sacó un arma de plasma que lo pegaría al suelo o en la pared sin posibilidad de moverse y empezó a disparar; sin embargo, el joven era bastante ágil y esquivaba sin problema alguno. Al acabarse la munición, sacó varias granadas de trampas, pero él continuaba evadiendolos con éxito.

—¡Solo quédate quieto! Te juro que no va a doler —Exclamó la joven con enojo en su voz.

—Olvídalo, no tienes poder alguno para decidir qué voy a mantener entre mis recuerdos —Se defendió el muchacho.

Lum, como último intento, sacó una cuerda de quien sabe donde y se lo lanzó, solo que no cálculo que el chico la jalara al tratar de huir y la arrastraría hacia él, haciendo caer, terminando ambos atrapados. Ataru solo suspiró de fastidio.

—¿Segura que no es una excusa para besarme? Porque esto no parece un plan que tenga como objetivo borrarme la memoria —Se burló.

Lum se sonrojó un poco y se colocó algo nerviosa, por lo mismo, intentó dañar la soga con sus poderes eléctricos, pero no podía concentrarse lo suficiente para dar una descarga más potente. Ataru lo notó y sonrió, debía provocarla.

—Ya entiendo, solo querías tener una excusa para estar cerca de mí, comprendo, soy irresistible —Empezó a hablar el humano con una voz coqueta.

—Basta, eso no es cierto —Negó Lum con un leve sonrojo en su rostro, mientras chispas empezaba a salir de ella.

—Si tratas de negarlo con desespero es porque es verdad. Solo tenías que decirme que querías besarme y con gusto lo hubiese hecho —Continuó diciendo el muchacho.

Lum estaba totalmente roja, de vergüenza e ira, su poder se intensificó.

—¡Te dije que te callaras, solo vine a borrar tu memoria! —Exclamó con furia la joven mientras empezaba a electrocutar a Ataru.

El poder de ella fue lo suficiente para dañar finalmente la soga, se le había dificultado antes debido a que está diseñada con una tecnología especial que soporta su electricidad, así no la dañaba sin querer. El humano estaba chamuscado, el humo salía de él. Lum que se liberó, calmó sus emociones. El muchacho se levantó y se sacudió para mirar fijamente a la chica.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 15, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Dulce Infierno |Urusei Yatsura|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora