¿Sabían que cuando dicen "ser salado y el resto es cuento", es verdad?. Bueno... la broma en realidad dice "10 es nota y el resto es lujo", pero tú sabes la verdad por delante. En fin, dejando de hablar chácharas...
Hola vale, me llamo María Villalo...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Marie
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
📍1 de febrero de 2019 | Londres, Inglaterra.
Taron P.O.V.:
Dejé con Jaime por ordenes de Fabiola, la nueva bandeja de comida que contaba la número 3 de algunos bocadillos que reuníamos en la mesa.
Mis nervios aún estaban desde que dijeron que llegaría. Hoy mismo, en al menos ¿20 minutos? Estaba feliz, pero a la vez nervioso.
Había pasado mucho luego de esa fecha que me envolvía el recuerdo con felicidad y aún más de solo imaginarme la sonrisa de Marie. Se sintió tan bien verla con una sonrisa natural luego de ese momento.
Ayudando a Fabiola a arreglar el apartamento de su hermana, no pude detenerme unos segundos a ver las fotos que estaban enmarcadas y puestas en un estante. Agarré la de marco verde claro y miré la foto con detalle.
"Tiene elefecto de la juventud eterna, quizás", pensé mientras veía a una joven María Villalobos con un aura salvaje que escondía entre aquellos ojos introvertidos. Dejé ese marco, y tomé otro, llevándome la sorpresa de que se encontraba una foto de 2017, de ambos.
A primera plana no parecía nada atípico ya que fue una foto en grupo, de todo el grupo del cast de Robin Hood, aunque con más detalle la veías sonriendo a la cámara y a mi, exponiendo la escena donde yo la veía sonriente donde recordaba que había contado algo gracioso que me hizo sonreír.
—¡DEJA DE VER A MI HERMANA Y VEN A AYUDARME, TARON ALBERTINO!—exclamó Fabiola sacándome de la ensoñación, a lo que dejé el objeto donde estaba y me devolví a donde estaba ella. Se rió de mi al encontrarme viendo las fotos—Se nota mucho que la extrañas.
Me dió el par de cojines que tenía en manos asi que los tomé por ella—Es díficil no hacerlo.
Sonrio de lado—Domado, por una mujer mayor que tú. Quien te viera, Egerton.
La mire en burla, dejando los cojines regados por ambos muebles oscuros de su hermana—Y tú que andas enamorada de Dornan, pense que eres más fuerte.
