Who si he? (Quackity y Tu)

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Una risa sonó por todo el casino, el guapo futuro esposo no perdía el tiempo al demostrar que esa situación no le importaba en lo más mínimo, en cambio, la chica tenia una mirada intranquila al borde del llanto, su padre había llegado y se veía que no planeaba irse sin ella.

—¿de qué te ríes animal de granja? — mencionó Rubius con la misma sonrisa tranquila del contrario, no planeaba dejarlo ganar

—¿quién mierda eres?— preguntó Quackity cambiando su rostro a uno un poco más molesto— no te había visto por aquí y si crees que puedes llevarte a mi esposa estas mal — hizo un chasquido con su lengua demostrando su molestia a la situación, llevó sus manos en un puño a sus ojos para tallarlos — oh, no es una broma, aquí sigues

—suelta a mi hija — mencionó con voz tranquila

Al recibir de nuevo una risa por parte del futuro esposo, su tranquilidad cayó y apretó el arma amenazante con disparar aquel gatillo y soltar la bala que esta contenía.

—así que es tu papá — su rostro no reflejaba nada, la chica comenzó a llorar, las maquillistas hicieron un increíble trabajo, su maquillaje no caía ni por un momento, sin embargo, el precioso vestido blanco se llenaba de lagrimas, su hermano la veía desde la primera fila con preocupación y su padre no paraba de ver a Quackity con odio — hola suegro, es una extraña forma de conocernos

—papá— susurró T/N con una voz rota y el corazón entre sus manos — por favor vete — advirtió al ver las señas realizadas por su futuro marido, conocía de primera mano de lo que este era capaz y no le importaba mancharse las manos de rojo carmín

—suéltala, ultima advertencia, imbecil— pero no contaba con que su padre jamás dejaría de lado a su pequeña niña

Un disparo sonó, T/N cerró los ojos, no quería saber que estaba sucediendo, tenía miedo, estaba cansada de fingir ser fuerte en estos momentos, ya no quería ser fuerte, quería llorar y esperar a que todo se calmara , que todo terminara y si su felicidad le daba la tranquilidad que los demás merecían, entonces la daría, estaba harta de ser la razón por la que comenzaban estas disputas, se fue y apresaron a su hermano, se fue y amenazaron a la familia de Alex, se fue y su padre tuvo que buscarla.

T/N abrió los ojos lentamente al sentir una presión en su cuello y un ardor acompañando a esta.

—intenta disparar de nuevo, se valiente y termina lo que empezaste — Quackity apretaba una daga contra su cuello mientras su padre aún sostenía el arma entre sus manos, sintió algo húmedo caer sobre su hombro, el color carmín característico de la sangre, el olor a hierro inundaba el lugar, sus manos temblaban, su pecho subía y bajaba dolorosamente intentando tomar todo el aire que sus pulmones pudieran obtener — vuelve a disparar, si muero ella se va conmigo.

— ¡mierda! ¿Podrías dejar de ser un estupido por una vez en tu maldita y podrida existencia? — la voz venia de una de las entradas traseras al casino, Quackity armado acompañado de un arrepentido Sapnap. — acepta que eres un estupido, hermano y pierdes en numero

—¿son dos?— se levantó Wilbur desconcertado— solo quería arruinar la boda del chico con el que me metí teniendo novia, pero estoy confundido

La declaración hizo que algunos presentes se rieran, otros seguían asustados por la cantidad de armas apuntadas al podio y la daga en el cuello de la chica y algunos otros si prestaban atención al hecho de que eran gemelos que, de alguna forma, lograron omitir el hecho de serlo durante mas de 20 años.

Un rápido disparo hizo caer a Alex sosteniéndose el estomago con ambas manos y dejando caer lagrimas de dolor, arrepentimiento, el dolor era moral, no sentía nada, sabía que algo acababa de atravesar su estómago pero no podía sentirlo, lentamente perdía calor mientras sentía que hervía, a su lado Sapnap acariciaba su cabello con ternura y rabia.