Ella se fue

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-Porque? Porque lo hizo!? *Llora*

La pilar se interno en el bosque, hasta que se canso y se desplomó en el suelo debajo de un árbol....la luna brillaba como nunca y las estrellas resplandecia a la par, era una hermosa noche, si, pero no para todos..

-Giyuu, tú no, tu nunca *se seca las lágrimas*

-no tiene sentido, ella siempre lo molesta, se burla de el, dice que todos lo odian y ahora? *Cierra los ojos* me dijiste que me amabas

Su vista se nubló, las lágrimas descendían de sus ojos y mejillas, y se mezclaban y eran absorbidas por su haori, su corazón había sido destrozado como si de vidrio se tratase y le costaría mucho unir cada pedazo, lo haría.....

-porque? No hay explicación....

La chica lloraba y en su mente se repetía la horrorosa escena una y otra vez

-abuelo, te n-necesito....te extraño*seca sus lágrimas*

-necesito tu apoyo...

Shu quien había estando buscándola desde hace un rato, la encontro y se posó en el regazo de la pobre chica

-T/n-sama?

La joven posó sus ojos rojos por tanto llorar sobre el animal y luego lo abrazo

-Shu, no entiendo nada *derrama lágrimas* no se porque Giyuu

Al oír ese nombre el cuervo se molestó, nunca le cayó bien el pilar pero porque ambos chocaban era porque ambos querían la atención de ella, pero cuando conoció a Kyojurou aunque tampoco le caía bien al principio luego de ver cómo hacía de feliz a la chica y también le dejaba su espacio con ella, le agrado, le agrado como hacía sonreír a la pilar

Ella siguió con Shu un rato pero el ambiente se volvía tenso, frío y....sangriento

-ese olor....*se pone de pie*

-shu, vete de aquí

Ella se seco su rostro con la manga de su haori, pero el cuervo no se movía. El ambiente lo tenso, y no reaccionaba

-shu, tienes que irte!!

Entre las sombras una figura espeluznante se acercaba a la pilar, su respiración se acortó y su sangre se heló

-Pero mira que tenemos aquí

-Eh?

La Pilar levantó la mirada y se encontró con esos ojos color sangre observándola, pareciera que esos ojos le llegaban hasta el alma se sentía tan aterrorizada no creía que fuera real era un demonio muy fuerte desgraciadamente no volvería a ver ninguno de sus seres queridos pues los que se encontraban con él no salían vivos ella no lo sabía pero no era más ni menos que el rey de los demonios Muzan Kibutsuji.

La chica a pesar que tenía todo el miedo encima pudo lograr ponerse de pie y desenvainar su katana, se secó las lágrimas que caían de sus mejillas y se puso en posición de pelea, si bien estaba que se moría del miedo por el aura tan aterradora que desprendía el demonio no se daría por vencida tan fácilmente no sabía quién era pero tenía que pelear después de todo era una pilar, era una persona que tendría que defender a todos los humanos y aunque sabía que tal vez no iba a salir viva de ahí tenía que hacer algo, tenía que ser valiente

-Pero qué tenemos aquí? esta flor se está marchitando *te mira las lágrimas* parece que estuviste llorando *sonríe*

-Últimas palabras Pilar

-Ya no me importa pero no te dejare irte tan fácilmente

La Pilar Se movió lo más rápido posible detrás del demonio pero de este desprendieron varios tentáculos fueron dirigiéndose a la chica pudo esquivar dos y cortar otros dos con su katana pero eso no fue suficiente pues la velocidad de este demonio era distinta a otros, era el demonio muy fuerte con el cual se había enfrentado si bien no sabía ni cómo se llama pero sin duda no había que tomarlo a la ligera se estaba metiendo en problemas unos grandes pero no había escapatorias de estos la muerte estaba delante de sus ojos

contigo? siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora