35

2.4K 287 17
                                    


Los días en la isla pasaban muy rápido pero Jeff y Barcode aprovechaban cada minuto al máximo.

La pareja paseó, nadó, navegó y comió toda clase de delicias del lugar y en las noches llenaban de pasión cada rincón de su habitación, entregándose a la lujuria y pasión, hasta quedar exhaustos.

Mientras, en Bangkok, Mile y Apo también seguían disfrutando de su amor mutuo, aunque su felicidad estaba teñida de un leve halo de amargura pues aunque estaban muy dichosos por su próxima paternidad, el omega no era plenamente feliz.

...-Cariño, deja de pensar en tu padre. Nada puedes hacer si él no cede en su terquedad-habló el joven alfa tras llegar a la habitación y encontrarse a su novio tirado en la cama, envuelto en lágrimas.

-Si, lo sé pero no puedo evitar sentirme mal. Nuestro bebé querrá conocer a su abuelo, estar con él sin embargo no podrá hacerlo.

-Hey cariño, vamos tranquilo. Eso no es definitivo, tu padre terminará aceptando que nos amamos.

El omega negó.

-No, no lo hará. Él te odia, odia a tu madre y me odia a mi.

Mile se subió a la cama y lo abrazó.

-Tu padre no te odia, no digas eso. Simplemente está asustado y cree que te haré daño.

Apo levantó su humedecida cara y lo miró con miedo.

-Nunca lo harás ¿Verdad?, nunca me dejarás

Este le dio un tierno beso en la frente y acto o seguido lo abrazó más fuerte.

-Claro que no, cariño...nunca te dejaré, siempre estaré contigo.

El omega asintió en un suspiro, aunque no muy seguro.

-Ojalá así sea.

Luego de eso, la pareja se besó tiernamente pero poco a poco los besos se fueron intensificando y pronto la pasión y la lujuria encendió su deseo carnal.

...-Te necesito cariño, necesito poseerte una vez más...necesito sentirte mío-susurró Mile ya muy excitado.

-Yo también lo deseo, tómame mi alfa....soy tuyo....soy tuyo.

La ropa de ambos salió disparada hacia el suelo en cuestión de segundos pues la pareja quiso sentir cuanto antes el exquisito roce de sus encendidos cuerpos, así como el de sus abultados miembros.

El omega se deshacía en gemidos al sentir la boca de su alfa sobre su piel y estos se intensificaron cuando Mile comenzó a chupar y saborear su lubricada entrada, la cual era tan dulce y tierna como él.

-Mi alfa, por fa-vor hazlo ya...te nece-sito ya.

Sin hacerlo esperar más, el alfa cogió su miembro endurecido y se introdujo en la entrada de este poco a poco y a continuación se contuvo hasta que el onega se acostumbró a su grosor.

-Follame, quiero sentirte dentro.

Lentamente, el alfa comenzó asestándole suaves estocadas que pronto tornaron en fuertes y salvajes.

-Oh joder siii..., sigue... sigue... aaaah...

Mile besaba y mordía la piel de su omega al compás de sus estoques, los cuales golpeaban una y otra vez la próstata de este haciéndolo rozar el cielo.

-Masss....massss....

Después de varias penetraciones más, Apo se corrió en su vientre, produciendo fuertes espasmos que contrajeron su entrada e hicieron que el alfa sintiese apretar su erección, por lo que provocó que su nudo se hinchara al momento.

Los colmillos de Mile crecieron y rápidamente se abalanzó sobre el cuello del exhausto omega, mordiendo al mismo tiempo que su nudo explotó y soltó su semilla.

-Oooooh... jodeeeeerrrrr....a
aaaaah...

Acto seguido, este lamió la marca del su precioso y agitado Apo, el cual sonreía muy satisfecho por la sesión de sexo que habían tenido.

Minutos después, cuando su nudo ya bajó, el alfa salió del interior de éste y se tumbó al otro lado de la cama para así recuperar el aliento.

-Te amo, pequeño. Duerme tranquilo.

-Y yo te amo a ti.

Minutos después, tras acomodarse y besarse nuevamente, ambos se quedaron inmersos en los apacibles brazos de Morfeo hasta la mañana siguiente.

(...)

Mile abrió los ojos y contempló ensimismado a su hermoso omega, a la par que le acarició el vientre de este.

-Cachorrito-le habló-...he tenido un sueño muy hermoso. Soñé que tú papá y yo nos casábamos en un lugar hermoso llenos de flores y vivíamos muy felices para siempre junto a ti, bebé.

En ese momento Apo se despertó y sonrió.

-¿Qué me dices pequeño?

El omega lo miró con confusión

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El omega lo miró con confusión.

-¿Qué te digo sobre qué?

-Sobre mi sueño, sobre lo de casarnos.

Los ojos del omega se humedecieron.

-¿Casarnos?, ¿Hablas en serio?

El joven alfa asintió.

-Por supuesto. Nos amamos y pronto nuestro pequeño bebé nacerá. Creo que sería bueno de dar el paso ¿No crees?

-Oh Mile te amo...te amo tanto...si, casémonos-el omega respondió muy feliz.

-Te amo pequeño y te haré el omega más dichoso de este mundo.

-Y yo te haré el alfa más dichoso...el más dichoso de todos.

Mile sonrió y acto seguido lo besó.

-Ya lo soy, cariño...ya me haces ser el más afortunado de todos.

................

¡¡¡¡¡Aaaaaaaaaaaahhh....!!!!

No sé vosotros pero yo estoy escupiendo arcoiris
😍😍😍😍😍😍😍😍

6. JeffBarcode: Matrimonio forzado  -Omegaverse Terminada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora