Boys don't cry (Steve Rogers/Capitán América)

Capítulo 3

-¿Qué dices, cap? -me dijo Thor cuando me vio acercarme a la mesa- ¿Revancha o te rajas? -Todos hicieron el típico "uuuh!" que hacen las personas cuando desafían a alguien.
-¿Crees que me rajo? ¡Obvio, la revancha! -mi voz ya se escuchaba rara. Se notaba en todo que estaba bastante borracho.
-Le apuesto a Thor -dijo Stark. No sé si lo dijo para motivarme, enfurecerme, o no sé, pero yo lo tomé de la forma motivante. No iba a dejar que me ganaran en mi tierra. Tal vez en Asgard me digne a perder contra él, pero esto es la Tierra, Midgard para él, y no iba a dejar que me ganaran en mi propia casa.

Me volví a sentar, Coulson y Clint llenaron los tarros con cerveza para mi y para Thor. Mientras ellos hacían eso, yo miraba a la chica pelirrosada. A pesar de estar de espaldas, se veía muy hermosa. Ella se levantó y al parecer, sintió mi mirada, ya que dirigió su mirada a mi y mi guiñó un ojo.
Era muy hermosa. Su nariz tan fina, delgada... es perfecta, sus labios me provocaban levantarme e ir a besarla, sus ojos... no los pude ver muy bien, pero estoy seguro de que son hermosos.
Me llamaron la atención para comenzar con la revancha, Banner contó de cinco a dos pero sin mencionar el uno, nunca he entendido por qué excluyen al uno, lo discriminan.
Thor y yo tomamos nuestros tarros y comenzamos a beber como locos. La cerveza nos escurría por las comisuras de los labios, ya que bebíamos muy aceleradamente.
Era imposible que alguno de los dos ganara, bebíamos igual de rápido, lo cual me desesperaba, no quería emborracharme tanto, y sabíamos que habría revancha.
Pero viendo al tarro de Thor, parecía que me estaba dejando ganar, ya que comenzó a beber lentamente cuando yo ya casi acababa.
Y así fue, gané. Le gané al dios del trueno. Todos gritaban y aplaudían a la épica revancha entre Thor y yo, fua cuando volví a ver a la chica, ella me veía con una mirada traviesa y una sonrisa pícara; ahora fui yo quien le devolvió el guiño y su sonrisa se hizo mas amplia, traía una botella de cerveza en la mano y con la otra se acercó un cigarrillo a la boca.

-¿Qué me dan -hable para todos y golpeé la mesa con ambas manos para llamar su atención- si me acerco a la chica pelirrosada -continué. Volví a golpear la mesa con las palmas de mis manos- y la invito a salir.
-¿Qué dices? -se asombró Clint- ¿De verdad vas a hablarle? Creí que...
-Decidí arriesgarme, si no, moriré solo y amargado, y mi trasero se quedara arrugado y sin un azote -Stark recordó la llamada de madrugada que me hizo para avisarme del compromiso de Thor.
-Yo digo que sería un buen regalo para Thor -habló Fury.
-Hazlo de una vez, Steve, -dijo el dios nórdico- Fury tiene razón, sería un buen regalo verte interactuando con una chica que no sea Natasha

Todos gritaban "hazlo, hazlo, hazlo" al unísono mientras yo me levantaba y me dirigia a la chica, la cual estaba sentada en su lugar, expulsaba el humo del cigarro haciendo círculos con éste.
Cuando estuve lo suficientemente cerca de ella, le toqué el hombro y ella volteó a verme. Ahora sí pude ver sus ojos, eran de un hermoso color verde esmeralda, delineados con una linea delgada negra para que su labial carmesí no se viera mal con unos ojos completamente maquillados de negro, se vería como un personaje de terror.

-Mama mía -¿Italiana?
-¿Eres de Italia? -mi voz se escuchó completamente estúpida y ronca. Todas parecieron entender lo que dije, no por nada se echaron a reír fuertemente.
-Nueva York, querido -dijo ella, al parecer estaba entrando en los efectos del alcohol, no se escuchaba como yo.- Dije "mama mía" por ver quién eres.
-Estúpido y sensual Capitán América -dijo ahora una amiga suya de cabellera rubia, para después reírse fuertemente como hace rato lo hicieron todas.
-¿Qué hace por aquí, un hombre tan fuerte, correcto y guapo como usted? -dijo otra de ellas, ésta tenia un tatuaje de sol en el cuello y un lado de su cabello rapado, haciendo que el tatuaje se luciera mucho mejor.
-Despedida de soltero de Thor y...
-¡Oh no puede ser! ¡Todos los vengadores están aquí! -chilló la rubia de hace rato. Todas las chicas comenzaron a gritar de emoción, la pelirrosada solo las veía sin decir nada, se veía harta.
-¡Cierren el hocico malditas perras! -gritó. Su cabello rosa se alborotó un poco por su movimiento inesperado.- Dejen que el capi precioso termine de hablar -con su mano libre tocó mi abdomen, y la paseo de arriba para abajo sintiendolo con gusto- continúa, querido -me dirigió una sonrisita dulce de niña inocente. Luego se volvió al frente para escuchar atenta lo que yo estaba a punto de decir.
-Yo decía que vine por usted, señorita pelirrosada -todas comenzaron a murmurar y reír, pero no eran risas tan fuertes como las de hace rato.- ¿Le gustaría venir conmigo?
-Para usted, señorito Capitán América, -dijo. Me miro de nuevo volviendo a pasear su mano por mi abdomen- soy Viky Crimson continuó- y sí, acepto su invitación a donde sea que me quiera llevar.

Una amplia sonrisa se dibujó en nuestros rostros al mismo tiempo. Ella se fue acercando a mi rostro poco a poco y sin miedo para poco a poco darme un apasionado beso. Dios. Nunca antes me habían besado así. Se sentía como mi primer beso y no quería que se terminara, pero se terminó y ella se acercó a mi oído para susurrarme algo.

-Estoy a sus órdenes, Capitán -besó mi mejilla y le dio una pequeña mordida.

La tomé de la mano. Me puse nervioso, pero traté de ser valiente y la llevé conmigo para avisar a los chicos que me iría con Viky, pero Stark y Thor insistieron en que nos quedáramos un rato y todos conocer a la chica con la que posiblemente pierda mi virginidad, intentaba no pensar en eso para no entrar en pánico y espantar a la chica.
Ella en un bolso de su chamarra de cuero llevaba una pequeña prenda de encajes y listones, una tanga que se veía pequeña por el elástico que tenía. Se la dio a Thor como regalo por su despedida de soltero.

-¿Por qué llevas una tanga en tu chamarra? -Coulson preguntó, su voz ya se comenzaba a escuchar como la mía, ronca, lenta, atontada.
-Digamos que llevar una de esas en mi chamarra me da suerte -dijo sin miedo, me gustaba tanto que fuera tan segura.
-¿Suerte? -Stark dijo y arqueó la ceja.
-Es una larga historia -dijo con una sonrisa en su rostro, era de esas sonrisas estúpidas que nacen al recordar algo genial.
-Ooh ya entendí -su risa indicaba que era algo en doble sentido. Algo que sabían que yo no entendería.- Cuida bien de él -dijo- dile antes de que le rompas el corazón, es demasiado sensible y no lidera bien con el corazón destrozado.
-Mi querido señor Stark, no le prometo nada, pero haré mi intento -concluyó

Stark nunca había sido tan sentimental, bueno, nunca lo había visto sentimental, menos si se trataba de mi. Y su forma de hablar en clave, estaba preocupado por mi, bendito sea el alcohol en éste momento.
---------------------------------------------------------------------------------
Comenten, voten, coman frutas y verduras :v jzjz