Boys don't cry (Steve Rogers/Capitán América)

Capítulo 11

Éste capítulo está narrado desde el punto de vista de Vicky, espero que les agrade :*
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Todo el día paso muy rápido, Steve no dejo de abrazarme y besarme. No sé cómo no tenía novia antes de mi y después de Peggy Carter, si él es un ángel, un caballero, el hombre más educado que pueda existir en estos tiempos de mierda. Y de verdad me siento más que afortunada por tenerlo conmigo.
Y me alegraba más la idea de que se tomara un poco de tiempo en la noche para contarme una historia antes de dormir.
Siempre lo esperaba sentada en la cama después de cepillarme los dientes, a veces llegaba justo cuando iba a comenzar mi rutina nueva de limpieza facial, la cual me recomendó Natasha, y seguro que sirve, no he visto ni un punto negro en mi rostro en mucho tiempo. En fin, Steve siempre esta ahí justo a tiempo, a veces antes, pero él no es, no ha sido, y Dios quiera que nunca sea un hombre impuntual.
Y yo, en cuanto escuche que tocaron la puerta, me dirigí a abrirla, no podía esperar ni un poco para poder verlo. Y al abrir la puerta, encontrarme con su par de ojos azules que brillan como estrellas y me quitan el sueño.

-¿Está usted lista, señorita, para ir a dormir?-Asentí sin dejar de mirarlo.
-Yo siempre, mientras seas tú quien me de las buenas noches -él rió tiernamente y beso mis labios dulcemente.
-Vamos, hoy tú decides que quieres escuchar antes de dormir.
-Perfecto, entonces, ¿yo decido?
-Se que será algo muy personal que me haya pasado en el otro siglo, pero por eso lo hago, porque lo tienes que saber.

Me acosté en la cama y Steve me abrigo con las cobijas. Él se acerco una silla para sentarse pero yo le indiqué que se acostara a lado mio para que le fuera mas cómodo al contar la historia. Y así lo hizo. Me abrazo por los hombros a mi lado en la cama y yo acariciaba su mano en mi hombro derecho.

-¿Cómo fue que perdiste a Bucky? -pregunte con inocencia, ya que desconozco la historia de su mejor amigo.
-Bucky -dijo él perdiendo su mirada en la nada, como si hablar de bucky le hiciera volver al pasado de forma literal, justo en el momento que sucedió-. Estábamos sobre un avión de HYDRA, el y yo fuimos para terminar de una vez con Schmidt...

Él me contaba esta anécdota como si de verdad la volviera a vivir, con tanta melancolía, tanta que me transmitía sus sentimientos y se veía el dolor en su mirar y sabía perfectamente que tenía un nudo en la garganta, y me daban muchas ganas de llorar como él lo hacía en el fondo de su ser. Pero él se hacía el fuerte e intentaba deshacer el nudo de su garganta. Y a pesar de que la historia fuese breve, se sentía una eternidad desde el punto de vista de Steve, y más aún porque en todo este momento no me había mirado a los ojos; su mirada seguía perdida en la nada y a mi me entristecía aún más verlo así.

-Y bueno, -dijo al momento de concluir- esa noche me embriagué por primera vez -al recordarlo rió un poco.
-Ay Steve -lo abracé en forma de consuelo, él me abrazó también y besó mi frente.
-Sé que es difícil hablar de esto pero debes saberlo.
-Por lo menos sabemos que ahora está en un mejor lugar, lejos de guerras, de peligro... -tomé una gran bocanada de aire y miré a sus ojos- Yo creo que está feliz.
-Yo también Vicky... yo también.

Me sentí muy tranquila después de la historia, no fue hasta que escuchamos unos bombardeos, balazos, no sé qué hayan sido, pero yo presentí que la tranquilidad había terminado para los dos.

-¿Qué fue eso? -le pregunte nerviosa a Steve.

-No estoy seguro, -dijo mientras se levantaba de la cama- pero no puede ser nada bueno.
-¿A dónde vas, Steve?
-A asegurarme de que eso no nos separe.

Yo presentía que era Verónica, presentía que entraría de alguna forma y me arrastraría del cabello hasta la mierda en la que me obliga a trabajar. Y yo no quería volver a vivir esa vida tan fría y vacía de mierda.
Steve salió corriendo de mi dormitorio y yo sólo cerré la puerta para vestirme con ropa de entrenamiento y me hice una cola de caballo, no dejaría que se desperdiciara mi esfuerzo escondiendome en las cobijas. Así que salí de ahí corriendo en busca de algún arma para no gastarme la energía golpeando, pateando y esas cosas.
Fui corriendo al gym donde entreno con Steve y busqué algo que me pudiera ser útil. Busqué por todo lugar y no encontré algo que supiera usar, algo como una pistola o un cuchillo, nada de eso, así que procedí a retirarme de ahí, y fue cuando cayeron dos explosiones más cerca del lugar, lo cual ocacionó una especie de temblor en todo el plantel, el cual me hizo caer encima de alguien ya que yo iba corriendo.

-Perdone señor -dije levantandome y ayudando al tipo que cayó abajo de mi.
-¿Vicky? -reconocí su voz. Era Clint.
-¡Clint! -grité emocionada.
-¿Qué haces aquí? Deberías estar dormida.
-Esos bombardeos no me dejan dormir tranquila, Clint. Y menos sabiendo que ustedes aquí se arriesgan para salvarme el trasero -le comenté mientras íbamos caminando rápidamente al lugar donde se centraba la amenaza.
-Entonces ¿quieres arriesgar tu vida también?
-Ya lo he hecho antes, ¿por qué no ahora?
-Entonces sígueme -obedecí y él me llevo a una habitación donde había armas, de todo tipo. Blancas, de fuego, era como un pequeño paraíso- Elige tu favorita -dijo con una sonrisa en su rostro.

Busqué una que me convenciera y elegí una que no fuera ni muy grande ni muy chica. Simplemente tomé una pistola normal, y de hecho ya sabía usarla, antes espantaba a algunos clientes con una de esas, creo que a algunos sí los herí de gravedad, pero no me arrepentía ya que eran seres que no se merecían nada de mi.
Clint y yo salimos de ahí y de pronto vimos personas con la cara cubierta con una mascara que cubría todo menos naríz y ojos. Clint comenzó a dispararles, yo entré en pánico porque la idea era matarlos. Y aunque fueran malos, yo debía hacerlo, así que comencé a disparar, unos cuantos cayeron muertos a causa de mis balas. Sentí un remordimiento fuerte en el pecho, el cual se desvaneció en minutos cuando corrí junto con Clint al exterior. Había más como los que matamos adentro, eran muchos más de lo que yo me pude haber imaginado

-Que no te importe la vida de estos sujetos -dijo Clint lanzando flechas a los tipos malos-. Matalos, a todos, Vicky.

Yo me quedé seria mirando a la nada, asustada, con el arma en mano. No hubiera entrado en razón si no me hubieran empujado. Miré hacia arriba y un tipo me amenazaba con una bazooka, a lo que yo sin pensarlo ni una sola vez le apunté a la cabeza y le disparé. El impacto fue tan fuerte que le volvó todo de la nariz hacia arriba. Fue algo perturbador pero asombroso, y quería hacerlo otra vez.

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Perdonenme por tardar tanto :* No pensé que me fuera a tardar así. Pero voy a intentar terminarla en este año y para el 2016 comenzar una segunda temporada. Lo mismo va para Sweet Little Peonie, no aplica en Unforgettable porque apenas lleva dos capítulos... :v