Toc toc toc
Muy a gusto en los brazos de Alucard el sonido de la puerta me hizo pararme de la pequeña cama.
-Ya voy- grite ...toc toc toc. Abrí la puerta me encontré con el mercader John y el fulano aquel que ayudo a la pareja.
- ¡Mercader John, que gusto verlo! -
-Veo que sembraste la semillas que te di- dijo observando mi hermoso huerto.
-Si, ya quiero ver los avances, pero no se queden ahí pasen- y pasaron a mi casa observando todo a su paso
-No comas ansias muchacha-
-Tiene razón, pero dígame, ¿Qué les trae por aquí? -
-No salgas si quieres seguir con vida- dijo por primera vez aquel fulano.
- ¡Alex! - le reprocho el mercader John.
-Te están buscando- dijo el supuesto Alex.
- ¡Buscándome! ¿a mí? ¿Quién? - pregunte confundida
-Mira que serás bruta, a lo que veo no duraras mucho viva- abrí mi boca con indignación, acaba de llamarme bruta
-Alex, vinimos ayudarla no a ofenderla-
-Pero si es la verdad-
- ¿Cómo me llamaste? - pregunte acercándome a el
-Aparte de bruta es sorda, que le doy dos semanas con vida y luego la encontraremos muerta-
-Encontraran muerto otra cosa a como no te calles- le dije con un tono amenazador, ya me estaba haciéndome enojar y Esmeralda enojada no es buena.
-Ya basta los dos-
-De seguro no tienes novia, con esa actitud nunca encontraras a una mujer que te aguante-
-Ya veo porque estás sola- oh no, el no acaba de decir eso, era hombre muerto, con rabia le di una patada en su ''hombría'' si era que tenía. - ¡Auch! - se quejó agarrándose su parte y rápidamente me oculte detrás de el mercader John como el angelito que era. -Tu, sucia escoria- dijo en un intento de acercarse a mí, pero el Mercader John lo detuvo.
-No te quejes, tu empezaste- le dijo el mercader John, eso mercader John dígale más – Recuerda que lleva mucho tiempo sola. -El tal Alex solo me observaba con ira, le saqué la lengua en señal de paz y y dije entre mis labios – feo- y él lo entendió y volvió acercarse a mí. -Yo le explico y tu mejor te callas-
-Mira niña, aquel guardia que golpeaste te anda buscando como loco, y si te encuentra ya sabes de lo que él es capaz-, así que será mejor que no salgas de aquí por un tiempo-
-Pero...-
- Tranquila mi niña, Alex y yo nos encargaremos de traerte lo que te haga necesario-
- ¿Yo? -
-Harías eso por mí? - le pregunte claramente al mercader John, no a ese apestoso llamado Alex- Lo que menos quiero es volver a ver tu cara apestoso llamado Alex-
-Tranquila que no volveré-
-Si lo harás, de hecho, tendrás que venir en la tarde a traerle algo que le tengo guardado-
- ¿No puede venir usted? -
-Lo siento mi niña, pero no puedo dejar mi negocio por mucho tiempo a sola-
-Comprendo-
-Bien, ya nos vamos, cuídate mucho mi niña- se despidió el mercader John, el apestoso Alex no se despidió y azoto la puerta cuando salió
-Animal- le grite
-Al fin se fueron- dijo Alucard detrás de mí, asustada di la vuelta y ahí estaba el, de lo muy tranquilo mientras yo pasé un mal rato. -Esmeralda- dio un paso adelante – si ese tipo vuelve o cualquiera nadie debe saber que estoy aquí, no pronuncies mi nombre, y si te preguntan no sabes nada ¿de acuerdo?
-Está bien... pero el tal Alex volverá en la tarde-
-Tranquila, no saldré-
.......
Alucard y yo nos encontrábamos degustando algunas frutas en la mesa, el sonido de la puerta nuevamente nos interrumpió, mire a Alucard, le hice una seña que subiera a la habitación, se fue de inmediato mientras la puerta la tocaban cada vez más.
-Ya voy animal- abrí la puerta y ahí estaba el apestoso Alex con una pequeña bolsa
-Hasta que por fin abres- y entro a la cabaña sin mi permiso, ay como lo odio
-Oye, no te dije que podías pasar, que animal eres-
-Al menos mi cabello luce peinado- dijo jalándome el pelo
-Ay que eso duele, suéltame, puedo apostar a que esta sucio-
-Esto es por lo de esta mañana, esto no duele nada comparado al golpe que me diste-
-Como bien dijo el mercader John te lo merecías, eso y más- dije apartando mi cabello de sus sucias manos
- ¿Tienes compañía? - pregunta mirando la losa encima de la mesa-
-No, como crees- dije obviamente nerviosa, no se me da bien mentir, rápido Esmeralda piensa.
-Ah ya se, comes dos veces, con razón estas gorda- de mis labios se dibujó una línea para que no se me saliera un insulto.
-Ah si, eso es, adivinaste-
PAM
Se escucho un golpe de la habitación, es enserio Alucard
- ¿Escuchaste eso? -
-Que? Yo no escuche nada- dije apoyándome de la silla, le di una de mis mejores sonrisas para que no sospechara- Seguro fue una rata-
-Si eso debe ser, si quieres la mato- dijo tomando marcha a las escaleras
-No, no, no –detuve su marcha jalándolo del brazo, el me miro con el ceño fruncido- lo que pasa es que a mí me gusta tenerla ahí ya que a veces me siento sola
-Hmmm bueno me voy y te dejo con tu rata-
¡PAM! ¡PAM! Se volvió a escuchar
- ¿Segura que no quieres que mate a la rata-
-Si, muy segura-
-Bien, adiós- dijo y se marchó, al fin
Subí con prisa las escaleras y entre a la habitación, busqué con la mirada al causante del ruido y cuando lo vi lo empecé a golpear
-Ay, basta Esmeralda- lo jale del pelo- Auch, cálmate mujer- intente jalarle el pelo, pero de nuevo se escuchó la puerta siendo tocada, este definitivamente no era mi día
-Tu quédate aquí y no vuelvas hacer ruido- bajé sin esperar su repuesta y abrí la pueta y ahí estaba de nuevo nuestro odioso amigo Alex.
-Que- dije malhumorada
-Vine a devolverte esto- dijo mostrándome el pequeño bolso- Toma-
-Gracias-
-Ahora sí, adiós-
.......
Abrí la pequeña bolsa a ver lo que tenía, de la bolsa saqué cuatro bonitos vestidos, con una carta sobre ellos
-Esto es para ti mi niña, espero que te guste. Alex te regalo dos, no le digas que te dije- leí
- ¿Qué es eso? - pregunta Alucard
-Mis nuevos vestidos- le respondí mostrándole cada uno
-Te quedaran bonitos, cada uno-
-Gracias-
🍀☘️🥱 Tardanza, lo sé, muy corto? También lo sé pero la universidad se está llevando mi tiempo así que les pido paciencia 👍
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Mi dulce sueño
RomanceSinopsis Caminando por el bosque lo encontré, encontré un muchacho tendido en el pasto del bosque inconsciente, sin pensarlo corrí hacia él como si mi vida dependiera de ello, al llegar a él le quite una suave manta de cabello rubio, tan brillante...