Posiblemente imposible

V

-A veces siento que me persiguen personas malas, pero como si las conociera de algún lado se tratara, he tenido ataques donde escucho voces en mi mente y logro ver a personas con una expresión fría, pero sin tener rostro, es extraño al explicarlo, pero si lo vivieras me entenderías-

-Y ¿Podrías decirme por qué generalmente pasan estos ataques?-

-Es normal que después de algún momento difícil, como cuando estoy molesto por alguna situación, me molesta demasiado esto, pues a veces no me deja interactuar bien-

-¿Hay algo que te relaje o tranquilice en esos momentos?-

-Si de hecho si...-

-¿Y puedo saber que es aquello?-

-Mejor dicho quien es...-

-Ya veo, es una persona-

-Es Gissell-

-¿Tu novia?-

-Ojalá lo fuera- Me rio un poco, -Ella es increíble, solo que no piensa lo mismo de mí-

-No te adelantes a lo que no puedes saber, si ella te da tranquilidad es por algo, en la vida las cosas son por algo no es casualidad, todo tiene un sentido y si te aferras a decepcionarte siempre te decepcionarás, mejor deja que fluya, al final si ella es para ti lo será-

Me quedé callado pensando en Gissell, ella es parte de mí y no sé cómo hacérselo saber.

-Gracias...-

-Regresando al otro tema, te daré unas medicinas para cuando tengas esos ataques, desgraciadamente sufres de un trastorno y no cualquiera, la esquizofrenia no es fácil, pero si pones de tu parte y te mantienes motivado vas a lograr controlarlo-

-Gracias de nuevo-

-No es nada, mi misión es ayudarte y es lo que me hace feliz, nos vemos en la siguiente consulta, me avisas si ocurre algo y recuerda lo que te dije-

Salí del consultorio y me dirigí a tomar el autobús para llegar a mi casa, justo en ese momento al caminar mientras pasaba el autobús empecé a sentirme mal, mi vista se nublaba demasiado, me dolía la cabeza, mi corazón empezaba a latir demasiado rápido y me ponía nervioso cada segundo que pasaba, en ese momento un auto se frena al lado mío y puedo distinguir que es Gissell.

-Hola Nolan, ¿Estás bien?-

-No del todo-

-Sube al auto, te llevo a casa-

Subí al auto y mis latidos se aceleraban, más mientas empezaba a tener la sensación de no poder respirar.

-¿Que es lo que tienes?-

-Un ataque de nuevo-

-Tranquilo, no te dejaré solo, te cuidaré, sabes que lo haré porque me importas Nolan, me importas demasiado, desde que apareciste en mi vida todo ha sido más fácil-

Valla que ella sabía como tranquilizarme, aunque esas palabras me tenían confundido, no sé si lo que diga es verdad o si solo lo hace para ayudarme, es confuso, ella solo piensa que tengo ansiedad, aún no tengo el valor para decirle lo que padezco.

-Me haces sentirme seguro-

Acerque mi mano a la suya lentamente tratando de hacer contacto con su delicada piel, la punta de mis dedos roso, su mano y su reacción me sorprendió, al sentir mi mano volteo a verme y fue la mirada más tierna y sincera que he visto, esbozo una sonrisa pequeña y junto su mano con la mía por completo.

-Lo sé, y eso me gusta-

En ese instante algo en mí quería explotar, mi corazón se aceleró y esta vez no es de un ataque, era de nervios aunque trate de disimularlos.

-Oye Gises...- Dije un poco con voz cortada.

Solo podía ver sus ojos al momento que volteo a verme, justo el valor creció más y ya no podía soportar retener mis palabras, quería confesar todo, me daba igual su padre o su novio.

-¿Qué pasa?- Me pregunto un poco confusa.

-Verás..., desde hace tiempo hee...- Justo suena el celular de Gissell.

-Espera, es Cedric-

Mierdaaaaaaa.

Al escuchar eso todo mi valor y mi encanto se fue, ella soltó mi mano al tratar de contestar y yo dirigí mi mirada hacia la venta para ver los edificios viejos de la ciudad.

-Holaaa Amor- Le dijo con entusiasmo.

Cada vez que le llama así, mi estómago se llena de dolor.

-¿Qué ocurre?- Le pregunto un poco preocupada.

-Cedric ya lo hablamos-

Esta vez la escuché ya un poco molesta, pero más preocupada y volteé a verla.

-Está bien, voy para allá- Colgó el celular.

-¿Todo bien?- Le pregunté.

-Nolan...- Me dijo con un tono muy serio.

-¿Qué ocurre?-

-No sé cómo mierda paso, pero alguien te vio subiendo a mi auto y le avisaron a Cedric-

¿En qué momento pasan estas cosas?

-Y yo supongo que ahora está enojado-

-No te equivocas- Tomo un suspiro y me miro con seriedad.

Después de un silencio, algo incómodo, afín dijo algo.

-Iremos a mi casa y hablaré con él, quiero que te quedes en el auto, no bajes para nada-

Me molesto un poco ese comentario, pero no me quedo otra más que aceptar con la cabeza.

...

Después de un rato esperando en el auto salió Gissell de su casa con los ojos lagrimosos y con una mueca de enojo, atrás de ella salió Cedric tratando de alcanzarla, Cedric acelero el paso y la tomo del brazo jalándola con fuerza de ella, veía como discutían hasta que en un momento empujo a Gissell ocasionando que ella callera al suelo.

En ese momento sentí una rabia que subía por todo mi cuerpo y decidí bajar del auto, caminando un poco apresurado y llegue hasta ellos.

-Vuelves a tocarla y estás muerto- Dije con mucho enojo-

Su cuello se tensó y sus manos cerraron para quedar en puño.

-Justo a ti te quería ver- Me dijo con un tono confiado y enojado.

-Al parecer no aprendiste la última vez- Igual que él cerré mis puños con fuerza.

-Ahora es diferente-

Vi como su puño se dirigía a mi cara y trate de esquivarlo, pero con Gissell de tras mío no pude hacer mucho y conecto su puño con mi nariz, generando que me sangrara, caí al suelo y empezó a darme patadas hasta que Gissell lo giro tirando de su hombro y le solto un puñetazo, Cedric se quedó sorprendido.

-Te vas a arrepentir de esto, quédate con tu estúpido Nolan- Le dijo y se marchó.

Gissell volteo a verme y se acercó a ayudarme, yo solo traté de levantarme y al hacerlo mi mirada se quedó fija en una ventana de la casa, el padre de Gissell presencio todo.