Posiblemente imposible

VI

Me encuentro manopleando, el entrenador me da ánimos y consejos para mejorar mi técnica; sin embargo, no presto atención, pues estoy a punto de desmayarme, ya que, hoy empezó mi entrenamiento para mi pelea y vaya que cambia un entrenamiento normal a uno para una pelea profesional. Suena la campana y tomo un pequeño respiro.

- Buen trabajo, Nolan, fue un buen comienzo. -

- Gracias coach, estuvo muy cansado la verdad. - Le digo sin poder hablar bien.

-Bienvenido al box profesional.-Me dijo en tono de burla.

A lo lejos observo cómo Cedric nos mira con ojos celosos. Cabe recalcar que desde que se programó mi pelea, el entrenador me ha puesto más atención a mí que a Cedric, pero se debe entender, pues yo tengo una pelea programada y él aún no.

Al voltear a verlo de nuevo observo como viene con la mandíbula fruncida y los puños cerrados.

-Entrenador, ¿cuándo dejará a este imbécil para poder entrenar a su mejor peleador? -Dijo con tono enojado.

-Él te dio una paliza, ¿Recuerdas?. -Le dijo en forma de sarcasmo.

-Fue suerte, estoy seguro de que acabo con él en segundos.- Dijo mientras me observó con mirada retadora.

-Eres un idiota.- Dije riendo.

-¿Un idiota?, lo dice quien siente algo por alguien a quien yo me la cojo a diario.- Al momento de escuchar eso me ardió todo el cuerpo, ¿Cómo puede expresarse así de Gissel?, me queda claro que es un imbécil.

Sin darme cuenta, solté un gancho, lo cual impactó su rostro y cayó al suelo.

-!Nolan!, detente.- Grito el entrenador. -¿Qué te sucede, si alguien del consejo descubre que te involucras en alguna pelea fuera del boxeo te quitaran la licencia, ¿Eso quieres?.-

-No coach, lo siento, pero él no puede referirse así de...-

-Es su novia, no deberías de meterte, mejor concéntrate en cosas más importante.-

No pude mantener mi rabia y susurre -Que les jodan-, salí el edificio ni guarde mis cosas solo las tome y salí, la verdad ese comentario me hizo sentirme mal, pero..., al final tiene razón, yo no soy su novio y aunque sienta algo tan lindo por ella no puedo hacer nada hasta que lo deje, qué mierda es el amor ya veo por qué prefiero estar solo.

...

Voy caminando a clase de psicología, la verdad esta clase me agrada demasiado, pues tocamos temas muy interesantes, no es como la clásica clase donde solo los ponen a reconocer sus habilidades y sus debilidades, no vemos nuestras metas, más bien es una clase donde reflexionamos y el profesor parece drogado eso es gracioso, pero nunca tiene ni una sola palabra equivocada, todo lo que dice es cuerdo y la mayoría de veces me siento muy identificado.

Al entrar al salón de clase, escuche un gritillo "Nolan!", al escuchar pude distinguir esa pequeña voz, cálida y aguda, era Gissell, le dirigí mi mirada.

¿Por qué es más hermosa cada que la veo?

Rápidamente, me hizo la seña que había lugar libre al lado ella para que yo me sentara, yo dude la verdad en sentarme con ella pues, después de lo sucedido en la mañana me puse a reflexionar y creo que el entrenador tiene razón, tal vez estoy siendo el motivo de sus problemas con Cedric, tal vez voy el malo y no el bueno como yo lo creía; sin embargo, insistió y al final tome el asiento que me aparto.

-¿Cómo estás, Nolan?, no respondiste hoy mis mensajes.- Me dijo con un tono de enojo muy mínimo.

-¿Me escribiste?.- Pregunte mintiendo, claro que vi sus mensajes.

-Si, no me digas que no te diste cuenta.- Me contesto torciendo los ojos.

-La verdad no.- Seguí mintiendo.

-Bueno olvídalo, te escribí por qué hoy mi mejor amiga tendrá una fiesta y bueno pensé en invitarte para ir conmigo, imagínate tú y yo llegando juntos a una fiesta, ¿Qué dices?.- Me dijo con un tono de entusiasmo.

-¿Y por que no le dices a Cedric?.- Le pregunte con la misma ignorancia que siempre solo que, con ella si lo actuó.

-Valla, es la primera vez que no le llamas imbécil o idiota.- Me dijo burlándose. - Le dije pero estará ocupado.- Entonces soy la segunda opción, auch. -Al parecer tendrá una pelea y esta entrenando en las noches.-

¿Pelea?, claramente se que no es verdad, ya me imagino que hará en esos "entrenamientos".

-Okaaaay, no lo se.-

-Vamos Noli, sera divertido.- Me dijo y yo sonreí al sentir lindo.

¿Noli?, que asco tanta ternura pero que lindo.

-Me llamas de nuevo así y no voy a esa fiesta.- Le dije con tono de amenaza.

-¿Entonces es un si?.- Me dijo emocionada.

-Si como sea- Dije con ignorancia aun que por dentro estoy tan emocionado.

-Muy bien, paso por ti a las 7, nos vemos al rato.-

¿Que?, ya termino la clase ¿Que mierda?.

-Te quiero Noli.- Me dice mientras se aleja riendo.

...

Vamos llegando a la fiesta, es en una casa gigante, caballerizas, camionetas por todos los lados, y muchos mas lujos, bajamos del auto y Gissell toma mi brazo para entrelazar el suyo, caminamos a la entrada y todos empiezan a saludar Gissell, muchos me saludaban de igual manera y otros mas me miraban con desprecio.

-¡Giiiiisss!!- Grita una persona, al parecer la mejor amiga de Gissell.

-¡Hola Mili!!- Le contestó Gissell y se abrazan.

-¿El es Nolan?.- Pregunto viéndome con una sonrisa de emoción.

-Si es el...- Gissell respondió mientras sus mejillas se sonrojaban.

-Mucho gusto Mili- Dije con seguridad.

-Mucho gusto- Me respondió mientras se reía discretamente.

Paso un tiempo, Gissell y yo estuvimos platicando un rato, la verdad de los mejores momentos del día, en un momento Gissell se fue con Mili pues esta misma se puso a llorar por su ex, yo estuve tomando unos tragos y después de un tiempo termine demasiado ebrio, no se que es lo que los ricos toman pero valla que que pega, de repente sentí un dedo tocar mi hombro, al voltear me doy cuenta que es una mujer alta, de vestido negro pegado, pelo corto a los hombros de color azul, realmente era linda, aclaro no como Gissell.

-Hola, ¿Eres nuevo aquí?, nunca te he visto.- Me pregunto curiosa.

-Si, soy de aquí pero de otra parte de la ciudad.-

-Ya veo, y ¿Tienes novia?.- Me pregunto acercándose a mi poco a poco.

-No, pero hay alguien que me atrae, entonces no estoy disp....- En ese momento me besa y quede en shock, no la conozco de nada y me esta besando, los ricos son muy extraños, en ese momento escuche una voz de sorpresa.

-¿Nolan?-

Volteo a ver y era Gissell, no podre olvidarme de su expresión, era de sorpresa, enojo, decepción y tristeza, bajo su cabeza al suelo y no dijo mas, dio vuelta y empezó a caminar a la salida.

-Gissell espera no es lo que piensas.- Le dije sosteniendo su mano suavemente para que no continuara caminando. -Déjame explicarte.-

-No, ya vi suficiente, que tonta soy, creí que tu sentías lo mismo que yo sentía por ti.- Suelta mi mano y siguió caminando, quise decirle mas y seguirla pero palabras no me salían y mis piernas no reaccionaron, solo sentí como mis ojos se pusieron llorosos.