SOLO PIDO MAS TIEMPO

☄️ Capitulo 1 ☄️

Gracias a los ligeros rayos del sol que cruzaban por las cortinas, Rei fue despertando ligeramente notando frente a él a su pareja -. Buenas días dormilón - mencionaba el rubio de ojos rojos, aquel rubio que se había robado su corazón años atrás.

Con una ligera sonrisa y tomando asiento Rei suspiro feliz -. ¿A qué hora llegaste?, No me di cuenta - Cuestionó mientras estiraba sus brazos.

El rubio solo se levanto y suspiro dirigiendose al baño -. Ya era tarde - dijo - Pero no te quise despertar -

Cerrando la puerta y mirando su reflejo lleno de culpa, kazuki suspiro abriendo la llave del fregadero -. Solo fue una vez, no se repetirá - afirmo refrescando su rostro varias veces.

Para Rei era algo doloroso ese tipo de respuestas sin sentido, realmente amaba a su pareja y a su familia, por lo que aceptaba todo, pero aún así en situaciones así no podía estar en paz, pues la vieja fama de kazuki siempre los seguía.

Lentamente se levantó y con una ligera sonrisa admiro la fotografía que estaba en su buro, una fotografía donde se admiraba a su feliz familia, su esposo sonriente y a su pequeña hija, aquella que difícilmente lograron tener.

Al avanzar más el tiempo, llegó la hora del desayuno, aquella hora que durante los últimos meses había sido un dolor para el Omega al ver siempre el asiento vacío de su esposo.

-. ¡Papá Rei! Mira arregle mi listón yo solita - Gritaba una pequeña que corría hacia el pelinegro con mucha de emoción

Recibiendola entre sus brazos para después cargarla el pelinegro río suavemente -. Lo veo, te quedó lindo, estás lista para desayunar -

Sintiendo el calor del cariño y el amor que le daba su padre la pequeña sonrió enormemente -. Si!! -

-. No me iban a esperar, que crueles - dijo kazuki llegando al comedor.

Con asombro y emoción la pequeña bajo de los brazos del pelinegro para correr hacia el rubio quien la cargo rápidamente y beso finamente su mejilla -. Vas a comer con nosotros papá - Cuestionó la menor con mucho entusiasmo.

Bajando a su hija y sonriendo hacia su Omega, Kazuki asintio -. Por supuesto, son mi familia - respondió rápidamente.

Sin más los tres tomaron asiento y se dispusieron a comer, las risas y las anécdotas que escuchaba, solo hicieron que Kazuki comprendiera que realmente era afortunado, lo tenía todo, no podía pedir nada más.

-. Gracias por haber estado hoy - Menciono Rei mietras recogía la mesa para hacer tiempo para esperar a Miri para llevarla al preescolar.

Escuchar esas palabras hicieron eco en el rubio, al igual que hicieron que su mente se invadiera de las caricias, los besos y el aroma de aquella mujer que fue el remplazo de su marido, cerrando sus ojos y mordiendo sus labios tomo fuertemente brazo de su Omega y lo abrazo fuertemente entre sus brazos.

-. Nunca olvides que te amo y que he cometido errores, pero nunca dudes de mi amor -

Correspondiendo el abrazo Rei sonrió -. Lo sé, tranquilo - respondio generosamente.

-. Sabes, tomate el día, yo llevaré y recogeré a Miri, en la noche iremos a cenar, todo será como antes - Menciono kazuki besando finamente los labios de su Omega.

Rei sonrió y separó dejando la mochila de su pequeña sobre las manos de su alfa -. Okey, pero no olvides que sale antes por el clima -

Kazuki llamo a la menor y así río saliendo juntos, si era sincero era la primera vez que llevaría a su hija al prescolar, pero aún así estaba feliz, estaba dispuesto a borrar su error y seguir adelante con su familia.

Al llegar al lugar solo se despidió y se dirigió a su oficina, todo estaba yendo bien, pero por más pequeño que sean los errores pueden tener consecuencias terribles.

-. Me llamaste cariño - Cuestionó una mujer castaña que entraba a la oficina del alfa.

Kazuki levantó la mirada y suspiro -. Hiromi, dejemos esto ya por la paz, fue un error lo que hicimos, no puedo seguir viéndote... -

- Porque... -

- Los dos sabíamos que no era correcto, tengo mi familia, tú me obligaste... -

La mujer bajo la mirada para después acercarse de manera violenta hacia el rubio -. Crees que después de lo que pasamos me puedes dejar, ¿Acaso solo me usaste Kazuki? - menciono tirando todo lo que ocupaba el escritorio para acercarse completamente al alfa.

Para el rubio eso era un fastidio por lo que llamo a seguridad quien no tardó en aparecer y llevarse a la mujer -. NO CREAS QUE ESTO SE QUEDARA ASI KAZUKI - gritaba mientras la sacaban de la oficina

Mirando la fotografía de su escritorio, la misma que representaba lo que más amaba en el mundo sonrió levemente -. Fui un idiota, jamás debí hacer cedido ante ella y sus encantos - Susurro lamentandose de su error.

Al llegar la tarde Kazuki llegó junto a su hija a su cálido hogar, el olor de la comida mezclado con la calidez de un verdadero hogar fue todo lo que pudo admirar, al cenar y convivir los tres realmente noto que jamás quería perder o lastimar a su familia.

Mientras caminaba por el pasillo de la casa vio a su hija durmiendo tranquilamente, la sensación de nostalgia lo invadió, siempre había soñado formar una familia con Rei y ahora que la tenía estuvo a punto de perderla, levemente se adentro a la habitación de la pequeña acercandose para dejarle un fino beso en la mejilla.

Al terminar salió y se dirigió a su habitación donde admiro a Rei vistiendose para dormir, admirar a su Omega era su pasatiempo más preferido, lo hacía recordar cómo fue que se conocieron y lograron crear esa conexión que los unió hasta el matrimonio.

Lentamente se acercó hasta poder rodearlo por la cintura depositando ligeros besos por el cuello del pelinegro -. ¿Que haces? - Susurró rei levemente pues la sensación de esos besos era muy agradable.

-. Quiero estar contigo, solo es eso - dijo kazuki acariciando suavemente el pecho descubierto de su omega.

Sentir las caricias de Kazuki sobre su cuerpo lo hacían extremecer, si había algo que lo hacía vulnerable, era exactamente tener al rubio tocando su cuerpo -. Estás loco, Miri está durmiendo -

-. Exacto durmiendo - sonriendo y derrumbado al Omega sobre la cama para después colocarse encima kazuki sonrió besando constantemente a Rei -. Solo no hagas mucho ruido -

Sin poder hacer nada Rei quedó a su merced, no podía negarse después de todo tampoco le molestaba, solo quería saciar los deseos del celo de su esposo así como calmar la soledad que kazuki le había hecho sentir meses atras.

-. ¿Porqué tan de repente? - Cuestionó Rei vistiendose nuevamente

Kazuki solo suspiro mientras cerraba sus ojos -. Los descuide mucho tiempo, quiero enmendar mis errores solamente -

Rei sonrió y se recostó a su lado -. ¿Solo por culpa? - dijo - Claro que no, es porque amo a mi familia - respondió kazuki abrazando fuertemente al omega.

Para kazuki ese error quedaba en el pasado y se concentraría en su presente y futuro con su familia, ya no estaba dispuesto a perder el tiempo, el tiempo que era dificil de controlar.