Capítulo 7 : Ojo derecho

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Luo Binghe observó la conferencia desde una de las muchas pantallas que mostraban el evento. Fue nostálgico, odiaba ver cada momento de ello. Especialmente las veces que su yo más joven estaba en la pantalla. Realmente era una vergüenza. Todas esas mujeres se desmayaron por él y luego teniendo que ver su primera vez con Qin Wanyue... Literalmente enterró su cara entre sus manos avergonzado. Solo esperaba que su Qingqiu no lo viera en un cultivo dual. De lo contrario, puede morir de vergüenza.

Su discordia interna con su yo más joven hizo que casi se perdiera el momento en que la conferencia empeoró cuando los demonios de alto nivel comenzaron a atacar a los participantes. Maldiciendo, se dirigió a la arena para encontrar a Qingqiu, por fortuna pudo localizarlo rápidamente y afortunadamente, no había discípulos ni señores de Pico con él en ese momento, por lo que pudo acercarse al hombre sin preocuparse.

"Estás aquí" Shen Qingqiu dijo. Aunque el tono era duro, también podía decir que el otro hombre estaba feliz de verlo.

"Este está aquí para ayudar”. Luo Binghe respondió y agarró la muñeca del otro hombre. "Te sacaré de aquí" Antes de que Shen Qingqiu pudiera responder, cortó su espada en el aire.

Pero no se abrió ningún portal.

Lo intentó una y otra vez mientras el sonido de Xin Mo se volvía cada vez más ensordecedor. Apenas se dio cuenta cuando Shen Qingqiu luchó con éxito para quitarle la muñeca de las manos.

“No me voy. Tengo que ayudar"

"Pero estás en peligro" Luo Binghe dijo tontamente.

"Y también todos aquí, no soy especial. Si quieres ayudar encargate de los demonios en el norte y asegurarte de que todos los discípulos estén bien. Yo me ocuparé de los del sur. Asegúrate de que nadie se dé cuenta de que eres un demonio"

"Pero Qingqiu, estoy aquí para ayudarte".

 “Y me estás ayudando. No puedo estar en dos lugares a la vez, tonto" Shen Qingqiu espetó.

"Pero-"


 “Si vas a ser un fastidio al respecto, haré un contrato. Ve al norte y te daré mi ojo derecho”.

“No, no quiero–”


"¿Mi ojo no es lo suficientemente bueno para ti?" Las cejas de Qingqiu se levantaron. De hecho, técnicamente, un contrato por un ojo fue posiblemente uno de los mejores en esta situación ya que le permitiría ver lo que está viendo Shen Qingqiu. Pero no se trataba de querer algo de Qingqiu, sino de protegerlo.

"No es eso-" 

"Entonces tenemos un trato". Y antes de que pudiera detenerlo, su mano quedó atrapada en un apretón de manos que obligó a sellar el trato. Aunque Luo Binghe quería continuar objetando el arreglo ya se había hecho, Qingqiu ya se dirigía hacia el sur sin dejar tiempo para más discusiones.

Todo lo que podía hacer ahora era darse prisa. Xin Mo estaba tarareando alegremente. Hacía décadas que no se alimentaba tanto y, sin embargo, aunque el Xin Mo en su mano cantaba alegremente, no fue suficiente para detener el zumbido que llenaba su cabeza. Lan Haozhi había planteado la hipótesis de que la razón del creciente zumbido en su cabeza era que el otro Xin Mo se acercaba. Esto casi confirmó esa teoría y ahora parecía que Xin Mo no estaba satisfecho ni siquiera con el festín que estaba brindando e incluso estaba interfiriendo con sus habilidades de teletransportación. Apretó los dientes. Incluso si era difícil, necesitaba superar esto. El abismo se cerraría y se alejaría al final de todo esto, y entonces su mente se aclararía. Tenía que pasar hoy.

Periódicamente revisaba a Shen Qingqiu. Estaba luchando, elegante como todo un dios. Fue una vista magnífica. Deseaba poder verlo sin cesar, pero con su mente tan confundida, mirar durante demasiado tiempo lo dejaba demasiado vulnerable.

No estaba seguro de cómo podría siquiera medir si todos los discípulos habían despejado el área. Sin embargo, sintió cuando los demonios en el área parecían haberse dispersado en su mayoría, ya que había poco en ese momento para distraerlo del ruido que reverberaba en sus oídos. Finalmente escuchó a un Señor de Pico comentar que el área había sido despejada. Eso fue lo suficientemente bueno para él, por lo que comenzó a correr hacia el sur. Usó el ojo de Qingqiu para ver lo que estaba sucediendo donde estaba. Vio que su amado estaba con el otro Luo Binghe y estaban luchando contra un demonio. Incluso en su estado confuso, a pesar de que la vista era desde la perspectiva de Shen Qingqiu, envió una sensación de familiaridad que hizo que su sangre se helara.

No, no puede suceder.

No otra vez.

No podía ver cada momento, tenía que volver a luchar contra más demonios a medida que se acercaba a Qingqiu. Pero vio el símbolo del demonio celestial cuando comenzó a brillar en la frente de su yo más joven.

Estaba tan cerca. Necesitaba llegar allí. Necesitaba detenerlo. Por favor. Necesitaba llegar a tiempo.

Pero no lo logró.

Observó con horror cómo su shizun empujaba a su yo más joven hacia el Abismo sin fin.

Sus piernas estaban entumecidas. Sus pasos finales para llegar a su antiguo shizun estaban desequilibrados. Incluso con su amado a la vista, no podía hablar. Cada palabra que trató de formar murió antes de que pudieran salir de sus labios. Pero sobre todo lo que quería preguntar era "¿Por qué?" ¿No era este Qingqiu diferente del que había conocido en la otra línea de tiempo? Este hombre, que había conocido durante todos estos años, no podía odiar a los demonios ¿verdad? No podía odiarlo, ¿verdad? ¡No después de todo! Shizun estaba mirando hacia el abismo, con la cara en blanco y solo cuando Luo Binghe estaba a unos metros de distancia, finalmente miró hacia arriba.

"Tardaste más de lo que esperaba" Fueron las primeras palabras que salieron de la boca de su shizun.

Quería gritar, quería llorar, quería decir tantas cosas, pero todo lo que podía hacer era mirar al hombre que sabía que amaba incluso con las dudas que se asentaban en su corazón.

"Tengo otro contrato para ti" Qingqiu continuó.

Quería gritar, decir que no quería hacer más contratos. Que quería tener una conversación para poder entender, pero no había tiempo.

Shen Qingqiu miró por encima del hombro. Ambos podían escuchar a un grupo de cultivadores corriendo en su dirección.

"Ayuda a tu hijo en el abismo. Asegúrate de que salga vivo de allí Y... por favor, protégelo incluso después de eso. Se merece al menos eso de ti. Traté de ser el maestro que necesitaba, pero al final no creo que fuera bueno siendo el maestro de un medio demonio, así que... no sé si estará bien sin tu ayuda"

Luo Binghe aún no podía hablar.

'Él es tu familia también. No lo abandones. Sé que tienes a tus hermanos y a tus padres, pero tu hijo también merece tu amor y protección"

Los ojos de Luo Binghe se estaban agrandando. "No es como-"

Antes de que pudiera terminar su oración, sus labios fueron sellados por los de Qingqiu y su mano izquierda se encontró en el agarre de la derecha de Qingqiu. El beso fue rápido y cuando Qingqiu se separó, dijo: "Para su protección, te doy mi boca para que hagas lo que quieras cuando regreses" Y con eso sintió la palma izquierda de Qingqiu sobre su pecho y luego un empujón. Qingqiu todavía sostenía su mano izquierda, pero el agarre se estaba soltando lentamente. Y entonces, por segunda vez estaba cayendo al abismo.

Contrato con un demonio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora